Capítulo 14 - "Delirios y llantos"

1.2K 65 14
                                    

*Marco en multimedia*

Tina:

-Si sigo ayudándote con la materia comenzaré a cobrarte, o hacer eso mismo con otros estudiantes malos como tú en biología.-Expresé, mientras me estiraba en la silla por haber estado tanto tiempo en la misma posición. Había ido nuevamente a su casa, donde su abuela nos recibió bastante enérgica, aunque Sack seguía tratándola con sumo cuidado.

-No me cobras porque estás demasiado cegada con el placer de tenerme a tu lado.-Palmeó mi cabeza, gesto que odiaba. Solté un gruñido-¿Desde cuando gruñes?-Me encogí de hombros.

-Tal vez me estoy volviendo mujer lobo.-Arqueó una ceja, con una sonrisa algo amarga.

-Ya comprendo, te lo habrá contagiado el pulgoso.-Rodé los ojos, me molestaba que dijera esas cosas de Levi. Sí, al principio había actuado extraño conmigo, pero no nos llevábamos mal. No eramos amigos, pero cada tanto nos cruzábamos en clases y conversábamos, lo normal.

-No le digas así.-Sonó más duro de lo que quise. Él pareció ignorar mi comentario, ya que continuó anotando unas cosas de la materia, sin mirarme-¿Te enfadaste?-Pregunté, mientras me acercaba a él, solo para molestarlo.

Me parezco a él cuando se pone en modo molesto.

-No.-Contestó, pero por su tono supe que sí. Me aguanté la risa ante su reacción, lo hacía ver algo aniñado.

-Hungry like the wolf...-Interrumpió mi canto de sirena bruscamente.

-Cierra la boca, me desconcentras.-Mi boca se abrió tanto que seguramente una mosca intentaría hacer un tour por ella. Sack era así de imprevisible. Si bien siempre tenía mucho humor y era simpático, cuando se enfadaba se ponía del modo arisco en el que estaba. Aunque jamás lo había hecho enojar así, menos por una razón tan estúpida y carente de sentido.

Me gustaría decir que no me ofendí, pero no fue así. Me callé, sí, pero no porque me lo pidió, sino porque no tenía más ganas de conversar con él.

Él pareció notarlo, por lo que sentí su mirada en mí, luego de que suspirara.

-¿Qué dice aquí?-Me señaló un apunte mío, con mi letra, fingiendo no comprender. Sabía que solo quería que le contestara para aliviar el ambiente. Hice un gesto de boca cerrada con llave, mientras no lo miraba-Creí que el inmaduro aquí era yo.-Me mordí la lengua para no soltar un insulto-Entonces, ¿No vas a hablarme? ¿Estás segura?-Asentí, con la mirada fija en mis uñas.

¡¿Acaso estoy haciendo una pose diva?!

De un momento para otro apareció a mi lado, seguramente gracias a su poder, rodeándome con sus brazos mientras me alzaba y me colocaba en su hombro. Forcejeé para que me soltara, para luego inconscientemente hablar.

-¡¿Q...Qué Haces?!-Sentí que se reía, ya que su cuerpo vibraba levemente. Me enfadé.

-¿Te dignaste a contestarme?-Gruñí como respuesta-Grr...-Me imitó pero de una forma más absurda, yo no lo hacía de ese modo tan ridículo.

-Te odio.-Murmuré. Entonces fui consciente de su altura y el miedo que me daba el que me soltara y me cayera.

Si me suelta lo demando.

-Ambos sabemos que no lo haces.-Pataleé como una niña caprichosa, mientras él seguía riéndose.

-¡Está bien!-Expresé, odiándome a mí misma por perder la pelea-Te estoy contestando, ¿Escuchas? Ahora bájame.-Se la pensó, para luego hacer lo que le pedía-Gracias, oh, y... ¡VETE AL INFIERNO CHICO MALHUMORADO CON COMPLEJOS DE NIGHTCRAWLER!-Se partió de la risa.

Criaturas del zodiacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora