.Oficialmente se acabó.

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Elsa

Me dolía, era horriblemente doloroso. Muchos podrían afirmar que estaba exagerando, pero ¿qué tan duro es que te traicioné la persona en la que confiaste toda tu vida? Oh, déjame decirte que duele.

¿Cuántas fueron las personas que me dijeron que esto pasaría? Muchas, incluso lo publicaron en el periódico escolar ¿recuerdan? Pero yo a todos ellos les dije la misma cosa: "Jack es mi mejor amigo, y ahora mi novio, sé que él no me haría daño porque me quiere y yo a él" ahora, siento que esa fue una patética respuesta.

Siempre que algún chico idiota que me rompía el corazón, yo me refugiaba en Jack, porque él era el único que no me hacía daño. Yo no había contado con otra persona que no fuera él. Maldita sea, ¡Lo conocía desde niños!

Cuando llegué a casa mi mamá exigió una explicación de mi estado, pero yo no pude hablar, Norte terminó diciéndole todo. Y mi mamá me abrazó y me dijo que todo estaría bien.

Aunque en realidad yo solo quería estar sola.

Y ahí estaba en mi cama dos horas después sin poder dormir un poco. Tampoco lloraba, mis ojos estaban muy irritados para sacar una nueva lágrima.

Entonces sentí el ácido subir por mi garganta y corrí hacia el baño. Era asqueroso sentir lo amargo en mi boca y las arcadas raspaban mi garganta. Era horrible.

Cuando terminé tire de la cadena para que el agua se llevara todo y me apresuré a lavar mi boca con pasta dental extra. Odiaba vomitar, y odiaba estar así de enferma. Cuando estuviera en Nueva York iría a un hospital, no fui cuando mi madre me dijo.

Volví a mi cama y no tardé en escuchar que su auto se estacionaba. Esperaba que no hiciera alguna estupidez como pasar a mi ventana, porque juro que lo tiraría del segundo piso. Pero no paso, no escuché ningún ruido la siguiente media hora, solo las pocas gotas de lluvia que caían.

Mis ojos se cerraron, yo estaba a punto de dormirme... Pero escuché una voz muy furiosa a lo lejos. Me levanté de mi cama y abrí la puerta de mi habitación, pero no era en mi casa.

Fruncí mi entrecejo y me dirige a mi ventana. Eran Norte y Jack.

Mis ojos se llenaron de lágrimas nuevamente cuando lo vi. Él lucía tan devastado como yo.

Entonces Norte le dijo algo cruel. Pero así era la verdad, ¿no? Fría y cruelmente cierta.

Su padre lo dejó solo y Jack cayó al suelo, llorando con visible frustración y rabia.

Yo me di la vuelta y también caí al suelo al lado de mi ventana. Abracé mis piernas contra mi pecho y el nuevo nudo que se formó en mi garganta salió en pequeños sollozos y nuevas lágrimas.

Jack no era el único que había perdido.

En una maldita noche de alcohol, yo perdí a mi amigo, a mi novio. Al único chico en el que confiaba y ponía mis manos al fuego. Yo también perdí, no solo él.

******

Desperté por la mañana ya que mi mamá había llegado a mi habitación para hacerlo. Yo apenas había dormido unas horas.

— Hija debes despertar, tu vuelo sale al medio día.

Parpadee mis ojos irritados — ¿Puedo quedarme en cama un poco más?

Ella acaricio mi cabello — Nena, sé que te duele. Pero créeme esto no es el fin del mundo.

— ¿No? — Sorbí mi nariz — se siente muy parecido a eso.

— Elsa...

Sentía nuevamente como mis ojos ardían. Ya no quería llorar, no obstante para mí eso se hacía una tarea imposible. Nunca había llorado tanto por un chico, pero es que nunca me había dolido tanto.

Oops, Baby I Love You  [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora