One-shots ~lucaya Y Mas♡

27 vuelve- Beret

Lucas Friar, gran chico. todos lo conocían era una buena persona, no discutía con nadie era un chico que tomaba buenas decisiones o eso es lo que todos pensaban hasta que tomo la decisión de involucrarse con maya hart, la chica de las tres R, rubia, rebelde y real.

muchos creían que el chico había sido muy estúpido al caer por ella, incluso hasta sus amigos lo creían y quizás tenían razón, pero el no lo pensaba así, si había cometido un error no había sido por fijarse en ella, sino haber elegido un mal momento para hacerlo.

se había enamorado y sabia que había sido estúpido y arriesgado, pero en el momento no supo frenarlo, sabia que la chica no era de siempres, su vida estaba llena de finales escritos con tinta indeleble, por que el seria distinto?, por que quiso creer que así seria?, "maya no se deja por nadie y tampoco cambiara su vida por un chico como tu Lucas, acéptalo y sigue adelante".

lamentablemente seguir adelante era una tarea muy dura hoy en día, la primera vez que le rompen el corazón y parecía un niño pequeño que se había caído de la bici con un raspón en la rodilla y con la pena de no tener a nadie quien lo ayude, dolía pero mas la idea de no volver a tenerla.

la desesperación se había apoderado de el y sus amigos ya no podían detenerlo mas, como zay había dicho debían darle tiempo, pero el necesitaba respuestas y apenas sus amigos se fueron el tomo su chaqueta y salió en busca de la rubia, toco su puerta, tres golpes y apareció una rubia despeinada, ojos rojos y cubierta solo por una camiseta blanca del triple de su tamaño.

no hubieron palabras de bienvenida, ni una invitación verbal a pasar, tan solo abrió la puerta y se dirigió a la sala, la vio tomar asiento en el sofá, mientras cruzaba sus piernas en forma de indio.

- que quieres Lucas.- hablo la chica apenas el rubio tomo asiento junto a ella.

- entender esta mierda maya- un suspiro salió de la boca de la rubia, no quería hablar ahora, sabia que a el le dolía, por que ella también lo sentía.

- no hay mucho que entender Lucas, sabias los riesgos, como fuiste tu podía haber sido cualquiera.

- quiero oír palabras que salgan de ti, no de los idiotas que intentan meterse entre nosotros.

-pero tienen razón rubio, por mas que intentemos negarlo así es la vida. piénsalo de este modo, querías vivir nuevas experiencias, nunca habías tenido el corazón roto, bienvenido al clan, todos sabíamos que algún día llegarías.- los ojos de la rubia no podían evitar cristalizarse y Lucas cada vez entendía menos.

- si pero yo quería vivirlas contigo, no con la chica que aparentas ser ahora.

- lucas, se que quieres creer que soy distinta, que dentro de toda esta fachada hay una chica dulce dispuesta amarte, pero no es así, lo que ves es lo que hay, acéptalo y sigue adelante.- las palabras seguían doliendo como navajas clavándose en su piel.

- lo que veo es una chica que esta tan mal como yo, que ha pasado semanas sin dormir, que lo único que a ingerido este tiempo no son frutas ni ensaladas, pero aun así a pesar de sus pocas fuerzas intenta con todas ellas que la odie, pero es lamentable que no puedo hacerlo no sin saber que mierda pasa.

- veo que sigues creyendo que decirle a una chica que parece zombi es un alago.

- veo que sigues creyendo que puedes desviar el tema así de fácil.

- quieres saber que pasa?- susurro la rubia mirándolo por fin a los ojos- pasa que no soy la única que te quiere a su lado, y que seria una egoísta si te niego la oportunidad de estar con alguien que si vale la pena. que los sentimientos no se controlan, y que no puedo obligar a mi mejor amiga a que deje de quererte como lo hace.- y esa era la situación, se había enamorado de ella en un mal momento, quizás si se hubiera fijado en una chica que no quisiera a su mejor amiga como si fuera su hermana tal vez esto no hubiera sucedido.

- no lo podemos controlar, pero tampoco me puedes obligar a quererla, por que no lo hago.

- Lucas...

- maya no, no puedes controlar todo, no porque creas que es mejor para mi puedes romper conmigo.

- lucas ya esta, lo nuestro no es, ni podrá ser entiendes?, las cosas ya acabaron hay que aceptarlo, saldrás adelante, todos lo hacemos al final.- un silencio vino después de aquello, el chico se levanto del sofá y camino a la puerta, la rubia solo lo miraba sin desviar su mirada las lagrimas que rodaban por su mejilla reflejaban el dolor que sentía.

- solo dime una cosa.- dijo este retrocediendo- lo nuestro siempre fue un juego para ti?, aparentabas quererme solo para ilusionarme? en tus planes siempre estaba dejarme verdad?.

- el siempre nunca esta en mis planes y lo sabes.

- la chica que veo hoy frente a mi no es la misma de la que me enamore.

- que te puedo decir, nadie es la misma persona cuando se rompe.- y luego de aquello el chico salió del departamento.

pero lo que la rubia olvido decirle es que cuando algo se rompe no hay forma de volver a unirlo, y el estaba roto y ella también lo estaba y su condena siempre seria tener la mitad del corazón y no lograr hacerlo encajar con nadie mas.