Yo Te Ayudaré (Klaine boyxboy) (Autora original)

CAPÍTULO 1: THE WARBLERS

CAPÍTULO 1: THE WARBLERS

Kurt se encontraba totalmente perdido por los pasillos de la academia Dalton. Había aceptado la “sugerencia” de Puck de ir a espiar a los Warblers y ahora pensaba que su plan, o más bien la falta de él, era estúpido. No había sido un buen día, mejor dicho, no estaba siendo un buen año para él. El acoso en el McKinley había aumentado, se sentía solo y parecía que a nadie le importaba. Comenzó a bajar unas escaleras de caracol y se dio cuenta de que mucha gente seguía el mismo camino así que se decidió y le preguntó a un joven que por allí pasaba.

– Disculpa, ¿Puedo hacerte una pregunta?, Soy nuevo aquí.

– Si, dime – Respondió el chico rubio.

– ¿Qué esta sucediendo exactamente?

– Ah, eso... Los Warblers vamos a cantar, si me disculpas, tengo un poco de prisa. No te preocupes, sigue a la multitud y llegarás a nuestra sala. Te veo allí... – El chico comenzó a correr, pero a los pocos pasos se dio media vuelta – Por cierto, soy Jeff.

– Yo Kurt – Respondió el ojiazul todavía perplejo por lo que acababa de pasar.

Kurt decidió hacerle caso al consejo del rubio y siguió a la multitud hasta llegar a un aula donde había unos sillones y unas mesas bajas (en vez de los habituales pupitres y sillas de cualquier instituto). La decoración era clásica y por todos los rincones se notaba que no era una escuela pública (más bien pareciera el salón de la casa de algún rico). En el centro se encontraban 14 chicos divididos en dos filas con su uniforme (entre ellos el chico rubio con el que había hablado Kurt en la primera fila en el centro). Varios chicos comenzaron a hacer un acompañamiento musical con sus voces y Jeff y dos chicos más, ambos morenos, se adelantaron para cantar “This Love” del grupo Maroon 5. Todos los chicos seguían la coreografía y las armonías de una manera que la actuación resultaba mágica. Cuando la canción terminó, varios Warblers se acercaron a Kurt y le pidieron que fuera con ellos a la cafetería. Cuando entró allí, lo acompañaban 3 chicos morenos, un afroamericano, un asiático y Jeff.

– Supongo que me habéis descubierto – Afirmó el intruso viendo cómo el chico asiático le tendía un café.

– No eres un buen espía – Dijo el chico de piel oscura divertido– Por cierto, yo soy David, a Jeff ya lo conoces – el rubio le dedicó una sonrisa – y ellos son Wes, Nick, Trent y Thad. – Dijo señalando a cada uno de los chicos mientras decía su nombre.

– Yo soy Kurt – puso la sonrisa más inocente que pudo para evitar problemas.

– ¿Hay algo que te preocupe? – le preguntó el rubio

– ¿Por qué lo preguntas? – se extrañó Kurt.

– No creemos que hayas venido sólo a espiarnos... – comenzó a decir Thad

– Si hubieras querido espiarnos habrías sido más discreto – Concluyó Wes

– ¿Sois todos gays? – Preguntó el ojiazul. Todos se echaron a reír.

– No, bueno, Jeff y yo si lo somos, pero los demás no. De hecho, acabas de conocer a todos los gays de Dalton. – le dijo Nick e hizo un guiño.

– Déjame adivinar – Dijo el chico rubio – te acosan en tu instituto.

Los ojos de Kurt se abrieron como platos, ¿tan obvio era?.

– Si necesitas contárselo a alguien, Jeff y yo pasamos por lo mismo que tú, puedes confiar en nosotros. Al final vinimos aquí porque Dalton tiene una política de cero tolerancia con el acoso pero nuestra experiencia puede servirte de ayuda. – Dijo Nick

– Aquí no juzgamos a las personas por sus preferencias sexuales, religión, color de piel, etc. Todos somos iguales, tenemos los mismos derechos, así de simple – Aclaró Wes.

Después de pasar una tarde muy agradable con los Warblers volvió a su casa, allí estaba su padre, Burt, viendo un partido en la televisión con su hermanastro Finn. Los saludó y se fue a la cocina para saludar a Carole, su madrastra. Su padre aún no se había casado con ella, pero ya eran una familia. Él había encontrado en ella el cariño y apoyo que su madre no le podía dar ya que falleció cuando él era un niño... Y no podía negar que le agradaba tener a alguien cerca con quien poder hablar. Después se fue a su habitación para hacer sus deberes. No había terminado cuando su teléfono vibró indicándole que tenía un mensaje.

Se fuerte, nadie podrá cambiar lo que eres, XO. J

Y entonces Kurt decidió que iba a seguir el consejo de sus nuevos amigos.