Lo Virtual que fue Real

Día 3 8:00 - 8:45

Sentir que nadie te apoya, que estas solo, todos se van contra ti y tener poca visualización a tu alrededor, como si estuvieras perdido en la niebla, Pero no es así, tu no estás solo, levántate mira a tu alrededor, y descubre las personas que están junto a ti para ayudarte, y tú a ellos.

No podía ver a más de 4 metros de distancia desde mi lugar, Smally iba atrás de mí, o eso creía.

-Smally, donde crees que este el núcleo de ellos- dije con duda. Pero no hallé respuesta.

-¿Smally?- voltee a verla, pero ya no estaba.

-¡Smally! Diablos, no sirvo de niñero, ¿cómo nos pusimos haber separado?- Volteaba a todas partes para buscar rastro de ella, cuando escuché un grito.

-¡Cuidado!- dijo el chico de mi equipo a lo lejos; al escuchar cuidado brinque hacia delante (Reflejos ocasionados por la última vez que escuché: "Cuidado")

Una daga cayó a lado mío.

-¡Pero que!- me levanté rápido y fui corriendo hacia el chico.

Un chico que se me hizo muy familiar...

-Ponte detrás mío- Dijo mientras se cubría con un escudo (Demasiado grande)

-¡¿Qué nos ataca?!- pregunté con rapidez

-Es como un ninja, es demasiado rápido; ¡Déjate ver! Y pelea frente a frente- grito con locura y risa.

-No los podrás salvar a todos- Dijo la voz entre la niebla cerrando con una risa escalofriante.

-Gracias por advertirme- Dije cubriéndome en su espalda.
-Por cierto mi nombre es Rio-.

-¡¿Río?!- gritó.
-¡¿Qué changos haces aquí?!- dijo aún más fuerte.

-¿Me conoces?- pregunté.

-Soy yo- se levantó su casco.

Era el "Chico de ojos cafés"

-¡Pero que... tu qué haces aquí!- dije con ansias.

-No, tu qué haces aquí- empezamos a chocar las frentes.

-Espera, seguirá el tipo loco de las navajas- pregunté mientras veía a todos lados.

-No creo- dijo mientras corría
-Fue por los demás, hay que encontrarlos antes que él los encuentre- se metió más entre la niebla.

Por lo cual lo seguí

-Oye, corres muy lento- dije mientras caminaba a su lado, si caminaba ya que iba más lento que el hijo de una tortuga y un caracol.

-Perdón- Exhalo aire.
-No me puse puntos en agilidad- siguió corriendo (caminando para mi).

Pero los demás deben estar en el centro donde no hay niebla, adelante es derecho, para no perderte sigue la corriente del viento.

-¿La corriente del viento?-.

-si- Señaló hacia adelante.
-El viento se dirige al centro, pero la niebla a los lados, por eso es que a siente muy extraño el ambiente- dijo exhalando más aire (oxígeno)

-Bien entonces lo seguiré- corrí hacia donde me llevaba el viento.
-No tardes- Grité para que me alcanzará a escuchar.

Después de estar sólo en la niebla, sentí miedo, temor y me quería quedar quieto; esperar a que alguien me encontrara, pero... debo yo encontrarlos a ellos, ya que, a veces para ser encontrado debes buscar.

Y lo vi, el centro, los árboles con sus hijas rojizas cayendo lentamente, y también estaba todo mi equipo ahí (Menos "Ojos cafés")

-¡Hey! Qué bueno que están aquí, saben pensé que ya no iban a estar, ya que hay un tipo bien loco allá fuera- dije rápidamente.

-¿Y tú quién eres?- dijo la chica alta con capucha y vos gruesa.

-Soy Rio y tú eres...-.

-Eso no te incumbe- dijo sería y con su voz sumamente grave.

-Es buena persona- Dijo Smally
-Además somos un equipo, ¿o no?- la vio a directo a los ojos, casi viendo el alma.

Se quedó callada la chica alta, me miro.

-Dime águila- dijo con voz grave.

-¿Águila? Y ¿eso?-dije, Cabello plateado miraba en todas direcciones.

-porque puedo dispararle al lunar que tienes a lado de los labios, a una distancia de casi un kilómetro- dijo con burla.

-Hay ajá sí, yo también puedo hacer eso; pero no un águila... creo que es mejor un zopilote o un buitre, ellos ven un cadáver a una distancia impresionante- dije regresando la broma.

-Mira Rio, sé que eres de mi equipo pero aun así te puedo disparar- dijo empujándome con su dedo.

-Así... pues éntrale- le regrese los empujones en el hombro.

-Hey ¿basta! no peleen- dijo Smally separándonos.

-Ella empezó- señale.

-Tú empezaste- proclamó.

-Chicos- Dijo "Cabello plateado"

-No te golpeo porque te destruyo en un segundo-.

-¡CHICOS!- Grito Cabello plateado.

-¡Que quieres niña!- dijo zopilote.

-Tenemos problemas- señaló al fondo del otro lado del círculo.

Al voltear, me quedé inmóvil, ya que se encontraba el equipo contrario con sus 5 integrantes.

-Pero miren que tenemos aquí- dijo un chico con copete y pistolas en mano.

-Por fin algo que golpear- Dijo un hombre demasiado robusto con tanto músculo, que parecía tener músculos hasta en las venas.

-  他们要燃烧-  dijo un chico de pelo naranja y sin playera, aunque no sé muy bien que dijo sonó algo así: Tāmen yào ránshāo.
[jaja no es cierto, se lo que dijo porque en mi brazalete esta la grabación de la condición y viene con subtitulos, bueno siempre se guardan las grabaciones, lo malo es que no las puedes borrar, pero bueno viendo el lado bueno, puedo escribir lo que dijo, perdón me llego el sentimiento, sigo escribiendo o pensando, no se, es raro escribir con la mente]

-No gasten toda su fuerza, todavía no- dijo un hombre con barba y sombrero traje morado, el cual estaba hasta atrás de ellos.

-Ya llegué chicos perdonen la tardanza- era Ojos Cafés.

-Es que soy muy lento y... ¿porque tan serios?- volteo a ver al otro lado.
-O, ya veo ¿Cómo has estado Daguitas tramposo?- dijo al chico veloz con traje gris.

-¿Tramposo? que no se te olvide que somos del mismo bando- dijo Daguitas mirando lo fijamente.

-Hoy no- dijo Ojos Cafés colocando el escudo frente de él.

-Déjenme a ese- Señaló Daguitas a Ojos cafés.

-Que así sea- Respondió.

Fueron segundos en los que nadie se movió, iba cayendo una hoja en medio y cuando tocó la fuente, comenzó la batalla.