Parte 13: Escapemos

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A las afuera de la ciudad, dentro de un bosque se encuentra una lujosa mansión la cual le pertenece a los Ackerman, en ella se encontraban en la gran sala los padres de los futuros esposos. Bebían, reían y conversaban sobre el futuro de sus hijos.

— Solo faltan 3 días para la boda, Grisha—. Dijo un rubio mientras daba un sorbo a su copa llena de vino.

— Solo 3 días para convertimos en familia—. Respondió un pelinegro sonriendo.

— ¿Mikasa ya vio su vestido?— Pregunto una castaña.

— Si y esta encantada, Carla—. Respondió una pelinegra—. Sin duda alguna eres una gran diseñadora.

— Ex-diseñadora—. Corrigió Carla sonriendo un poco incómoda.

— ¿Talia, donde están los chicos?— Pregunto .

— Están dando un paseo en el jardín —. Respondió —. Le dije a Mikasa que vaya sintiéndose ya como la Sra. Jaeguer.

°•°•°•×•°•°•°

En el lujoso jardín se encontraban una pelinegra y un castaño caminando por los rosales de la ya conocida mansión, en ella estaban sus recuerdos de sus travesuras cuando eran niños con Armin ¿Como olvidar los viejos tiempos?

— ¿En que piensas, Eren?— Pregunto la pelinegra un poco curiosa.

— En el futuro—. Respondió sin dudar el castaño.

— Ya veo—. Sonrió—. Yo también he pensado en nuestro futuro además he soñado con el.

— ¿Que soñaste?

— Pues... Soñé que tres años después de casarnos quede embarazada—. Dijo Mikasa sonrojada—. Tuvimos una niña, era idéntica a ti, tenia el cabello castaño oscuro y sus ojos eran verdes. Pasábamos mucho tiempo con ella, ella era nuestra engreída. Nuestros padres siempre venían a verla. Eramos felices... Los tres.

Eren no contesto, no sabía que decir, no lo sabia. Se sentía pésimo ya que estaba lastimando a Mikasa. Él sabia que ese futuro no podía y nunca podría ser, Mikasa no era su destinada hací que no podía formar una familia con ella. No tiene ninguna duda que la pelinegra era la mujer perfecta y que ella iba a encontrar a su verdadera pareja...

Se quedaron en un silencio incómodo. Ninguno de los dos sabia que hacer para romper esa incomodidad hasta que el timbre del celular de Eren sonó haciendo saber que alguien lo estaba llamado... Salvados por la campana...

— Disculpa, Mikasa. Dame un momento—. Dijo Eren alejándose de la pelinegra ya que ese timbre era de su complice.

— Si, claro.

Eren se alejo lo suficiente de Mikasa para que no escuchara su conversación, luego contestó.

¿Erencito?

— Dime, Hanji.

Ya esta todo listo.

— Bien, gracias ¿Crees que puedas guardar los pasajes hasta el viernes en la noche?

Claro, no te preocupes.

— También avisale a Levi que vaya alistándose, que lleve todo lo necesario, por favor.

Yo le digo...

— Cualquier cosa te llamo ¿Bien?

Esta bien, tengo que colgar. Cuidate Erencito.

TU ERES MI BUSQUEDA [Ereri] [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora