A quien corresponda

Carta # 3.- Ruptura

Perdóname por no dejarte ir tan fácilmente como acordamos. Me duele. Bastante.

Me dejaste con muchas cosas atravesadas en la garganta, muchos sentimientos que no lograron transmitirse a ti, muchos besos que me negué a pedirte en el último momento y mil lagrimas que no deje que me traicionaran.

Prometo no hacerte ningún reclamo, yo estuve de acuerdo con esta decisión.

Sin embargo quería escribirte una vez más... Sé que lo tuyo no es leer así que intentare ser lo más breve posible.

Me siento muy triste, se me va la onda y me quedo mirando a la nada con la mente en blanco, estoy molesta con todo mundo, no tengo hambre incluso tengo nauseas de tanto llorar combinado con un dolor de cabeza horrible; no sé qué contestarles cuando te mencionan.

Pero te prometí que lo intentaría siempre, aunque fuera difícil. Aún sigo intentándolo, quizás no de la manera que planeaba pero lo seguiré haciendo.

Te agradezco los buenos momentos, jamás los olvidare; te agradezco las risas, las palabras, la confianza y todo lo bueno que compartimos. Juro que algún día lo recordare sin ponerme a llorar.

A pesar de que me duele, me hace sentir libre y eso me hace sentir peor.

Voy a dedicar un buen rato a reconciliarme conmigo misma y quiero hacerlo sin culpa, sin pensar en ti o en alguien más.

Así que no te sorprendas si a veces prefiero no hablar contigo, aunque dudo mucho que conversemos seguido.

Aquí empieza otra parte de mis promesas. No quiero dejar de saber de ti, ni de tu vida; en serio seamos amigos. Cuenta conmigo en lo que necesites y te pueda ayudar, no creas que te desharás tan fácil de mí, lloro aun con mis amigos, hablo hasta la madrugada quejándome de la escuela mientras tomo café para no dormirme, quiero tu sinceridad y yo te daré mi confianza.

A veces me costara trabajo escuchar tu voz, no te asustes ni te sientas mal cuando escuches la mía temblar por algunas lágrimas que se me salieron, te pido perdón por los silencios prolongados que habrá en un principio y los nudos en la garganta que no me dejaran decirte las cosas rápidamente.

Intentare ser fuerte. ¡Se feliz! Si me extrañas y te extraño quizá volvamos a estar juntos. Si por el contrario, esto es el final; Gracias por todo.