*foto de Alexander*
Nuevo Estudiante.
-Buenos días chicos- saludó el profesor mientras entraba por la puerta y se dirigía a la pizarra.
-Buenos días- susurraron todos, pero yo simplemente me limité a mirar por la ventana como siempre.
Era la clase de chica antisocial de películas que se sentaba en los últimos asientos de los salones vacíos por miedo a la maldita sociedad. Detestaba la gente, solo tenía dos amigos y con ellos bastaba.
-Hoy comenzaremos con las matemáticas avanzadas- informó el profesor mientras comenzaba a escribir en la pizarra.
Perfecto. Era pésima en las matemáticas, mi nota era un desastre. Nótese mi cara de agonía.
¿Acaso el mundo me detestaba? Mi humor estaba a mil metros sobre el cielo. Joder, como odiaba cuando me sentía así.
La puerta del profesor sonó pero aún así ni me molesté en mirar. No era necesario.
-Señor director, buenos días- habló el profesor con una sonrisa nerviosa. -¿A qué se debe esta grata visita?- preguntó mientras aflojaba su corbata de los nervios.
Mi yo interior sonrío. Que patético.
Me volteé finalmente hacia el director pensando en que era una noticia de Amanda pero no. Nada por el estilo. Noticias viejas o nuevas, nada me interesaba.
Volví a voltearme hacia la ventana mientras miraba el patio trasero de la escuela.
-Tenemos un nuevo integrante en la escuela, un estudiante de intercambio- avisó. -Alexander Walker, adelante- llamó el director.
No me volteé a verle hasta que las chicas soltaron gritillos y empezaron a escucharse murmuros.
Ahí me volteé rápidamente y me quedé sin habla.
Cabello castaño caído al estilo Bieber, vaqueros rotos, remera blanca con chaqueta de cuero negro. Miré su rostró sintiendo mi corazón en la garganta.
Sus ojos, de un color azul hielo hipnotizante. Sus pestañas eran largas. Sus labios eran finos pero carnosos y en estos se formaba una sonrisa sarcástica. Sin esquivar el cuerpo de infarto que tenía.
Era el idiota de la moto. ¡El que me había lanzado un beso!
Quedé estática al verle. Mis manos comenzaron a temblar y depronto comenzé a sudar. Lo ví detenidamente y sentí un pequeño hormiguero traicionero en mi estómago. No podía tragar, no podía moverme y tampoco podía hablar.
Mierda. Esto no es normal en ti Esmeralda. Necesitas ir al psicólogo urgente.
Estaba muy nerviosa y ya me sentía mareada.
¿Qué diablos me pasa?
-Puedes sentarte en donde gustes- habló el profesor.
El chico sonrió sarcásticamente y miró todos los asientos en busca de uno.
No conmigo, no conmigo, no conmigo...
Solté un pequeño suspiro mientras veía como el chico se acercaba a mi con una sonrisa estúpida.
-Pero mira nada mas.... La chica que hablaba por teléfono.- habló mientras se sentaba a mi lado.
-Ahhh si, eres el del beso...- susurré mientras hacía ademán de leer el libro de matemáticas.
El rió y luego pude sentir como me miraba detenidamente.
Incómodo.
Sabia que tenía las miradas asesinas de una de las 'barbies' de Julia. Era más que obvio.
ESTÁS LEYENDO
La Vida Es Un Hilo (Pausada)
Fiksi RemajaAveces la vida puede ser simplemente un hilo. "Pisas mal y te caes". Esmeralda es una chica de 16 años, humilde, amable y generosa, con una vida llena de sueños a seguir. Pero... ¿Que pasa si tienes una madre prostituta y un padre inexistente que t...