Shining Diamond- Jicheol

8. ¿Sí o no?

Era un día por la mañana cuando Jihoon abrió los ojos. Se levantó rápidamente y despertó a Seungkwan y a Chan.
Estaba expectante. Hoy era el primer día que se juntarían los tres clubs y estaba nervioso. Pero también emocionado y con muchas ideas en la cabeza.

ㅡHyung, estoy muy emocionado. ¡Vamos a bailar y cantar juntos! ㅡ Chan rebosaba felicidad, y Seungkwan tampoco se quedaba corto.

ㅡ¡Ay! ¡Que bien! Los tres juntos. Y también con mi Vernonie. Vamos a triunfar y nos convertiremos en famosos. ㅡGritaba el pelirrojo mientras hacía poses de modelo.

Jihoon sonrió y pensó en el futuro por tan solo un par de segundos. Tenía un buen presentimiento.

Salieron los tres chicos de casa y llegaron a la puerta del instituto. Donde se encontraron con el resto.

Parece ser que todos los demás se sentían igual de expectantes, pues aunque parecían inseguros y pensaban que no iba a funcionar, en el fondo tenían curiosidad y esperanza.

ㅡBuenos días, chicos. ㅡDijo Minghao. Todos se saludaron entre sí y se fueron a clase. Excepto Jihoon, que al ir a entrar por la puerta del instituto fue arrastrado por Seungcheol hasta un sitio más apartado.

ㅡEhh, ¿qué haces? ㅡLe espetó de mala gana mientras se alisaba la manga de la chaqueta, que Seungcheol había arrugado al cogerle y haberle llevado a la fuerza.

ㅡMe gusta tu idea. Me gusta mucho.ㅡ Lo dijo de sopetón y muy seguro. ㅡ Yo...creo que va a traernos cosas buenas, Jihoon. Es una idea brillante.

No paraba de sonreir, parecía que iba a echarse a llorar de la emoción.

ㅡOh, gracias, Seungcheol. La verdad es que yo también lo creo. Aunque se que no va a ser facil...

ㅡPodemos conseguirlo.

Jihoon sonrió ante el optimismo del mayor.

ㅡEsto...Jihoon. Quería preguntarte si te gustaría ir conmigo algún día a dar una vuelta o algo así. ㅡEl peli negro miraba al suelo y pensaba en que hacer si el pequeño decidía pegarle. Pasaron unos segundos y Seungcheol levantó la mirada al ver que el otro no respondía y se encontro con la cara del castaño roja. Era muy tierno.

ㅡOh, y-yo no s-sé... ㅡJihoon era muy cabezota. Y no iba a admitir así porque sí si le interesaba alguien. Pero tampoco iba a desaprovechar la oportunidad, despues de todo era prácticamente la primera vez que le pedían salir.

ㅡSi no quieres no pasa nada...

ㅡNo, no, sí quiero.

ㅡ¿Entonces te gustaria quedar conmigo? Vaya, pensé que me odiabas. ㅡMurmuró Seungcheol con una sonrisa. ㅡPuede que te guste un poco y todo.

ㅡIdiota... no te creas que me gustas o algo así. ㅡAfirmó el pequeño aún más rojo.

El mayor río y le dedicó una sonrisa. Luego se despidió con un "ya te llamaré, pequeño" y se fue.

Y ahí se quedó Jihoon. Muerto de la vergüenza pero con una pequeña sonrisa en la cara.

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Cuando llegó a su clase, Seungkwan le miró como si fuese una madre que ve que su hijo llega tarde a casa.

ㅡ¿Donde estabas? ¿Y por qué estás rojo? ¿Con quién has estado? ¿Qué has hecho?

ㅡNo me agobies. He estado hablando con un amigo. ㅡDijo el castaño sentándose en su sitio.

ㅡ¿Qué amigo?

ㅡ¿Eres mi madre o qué? Yo no te hice tantas preguntas cuando ayer llegaste tarde a casa. Y yo esperándote para cenar. Menudo marido estás hecho. ¡Quiero el divorcio!

Seungkwan procesó sus palabras en silencio.

ㅡTe has ido a tomar droga ¿no? Que fuerte...y no me invitas. ㅡBromeó poniendo cara de sufrimiento y una mano en el pecho.ㅡ Ahora en serio, ¿con quién estabas?

ㅡTe lo diría pero... Oh, vaya, acaba de llegar el profesor, que lástima. ㅡDijo Jihoon con malicia. Seungkwan solo pudo ponerle mala cara y aguantarse hasta que acabase la clase.

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Jihoon acababa de cerrar el libro cuando Seungkwan apareció al lado de su cara preguntando... otra vez.

ㅡNo te lo digo porque me lo vas a echar en cara y te vas a burlar de mí y eres muy cansino.

ㅡTe juro que no. Venga, cuéntamelo. ㅡDijo el pelirrojo haciendo un puchero

ㅡEstá bien. ㅡ Jihoon vaciló unos segundos, muy largos a decir verdad, preguntándose una vez más si era buena idea decírselo o no. - Seungcheol me ha invitado a salir con él algún día...

Estaba esperando la reacción de su amigo, pero no llegaba nada. Seungkwan se había quedado con la boca abierta. Y ahí se quedó unos segundos hasta que reaccionó y dijo:

ㅡ¡AAAHHH!! Tía, que fuerte. Osea que en el fondo te gusta. ㅡParecía una adolescente que se acaba de enterar del cotilleo del año.

ㅡMe habías dicho que no ibas a ponerte así... ㅡSe quejó Jihoon cruzandose de brazos.

ㅡEs verdad. Perdón. Ahora en serio, ¿te gusta?

El castaño no sabía que responder. Si le decía que sí se ganaría bromas de su amigo por varios días. Pero aunque le dijese que no, el pelirrojo no le iba a creer.

ㅡPues no sé.

Seungkwan se tapó la boca con las manos y murmuró un "oh mai gash".
Pero no dijo nada más. Aunque se muriese de ganas de seguir hablando, había prometido no pasarse ni agobiar al pequeño.

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Cuando terminaron las clases, todos se dirigieron a la sala donde ensañaban los del club de baile. Era el sitio que habían elegido para juntarse todos.

Cuando Seungkwan y Jihoon llegaron y abieron la puerta, se encontraron a todos los chicos hablando unos con otros. Algunos de pie y otros sentados.
Cuando ya se habían quitado los abrigos y estaban en corro, Jihoon intervino.

ㅡBueno, chicos. ㅡDijo cuando todo estuvo en silencio. ㅡVamos a empezar.