Entre la espada y la pared.

Capítulo 15 << BELLA POTTER>>

Bella despertó en un lugar poco conocido para ella. Las paredes eran blancas, espaciosas y con grandes ventanales que cubrían la mitad. Se fijó en el sillón de al lado de su cama, sentado en este dormía plácidamente su tía Narcisa, con su típico peinado y su fachada de malvada pero que todos sabíamos que era la mejor.

Poco a poco se quedó pensando en que había pasado para estar allí, ya que se encontraba en San Mungo, el hospital de los magos.

-Princesa-. La voz de su tía hizo que se girara de inmediato hacia ella, viendo como se frotaba los ojos con delicadeza. -¿Cómo te encuentras cariño?-.

-Hola tía, me duele un poco la cabeza, ¿cómo he llegado aquí?-.

-Es una historia muy larga, lo que necesitas ahora es descansar-.

Su tía hizo un llamamiento con la varita al medico que le atendía, para preguntar si la pequeña podía volver al colegio.

Al poco tiempo el médico llego, le hizo un par de pruebas a Bella y este, le dio el alta para que pudiera volver a Hogwarts.

........

-¿Papá?-. Bella se encontraba en su sala común descansando la cabeza, ya que según su tía se había dado un golpe fuertísimo y por eso la llevaron al San Mungo.

-Hola cariño-. Su padre la abrazó entre sus fuertes brazos y le dio uno de sus besos en la cabeza. -¿Cómo te encuentras?-.

-Mucho mejor, ya estoy lista para volver a incorporarme a las clases-. Sonrío de una manera tierna, para que así su padre la dejara volver a clase.

-No Bella, no puedes volver aún, necesito preguntarte unas cosas-. Esa frase hizo que Bella se desconcertara un poco.

-Dime papá, me estás asustando un poco-.

-¿Te acuerdas de alguna cosa que pasó de tu accidente?-. Su padre se la quedó mirando fijamente a los ojos, poniéndola nerviosa.

-Solo me acuerdo de estar en la sala común de Gryffindor y desmayarme, pero según la tía Cissy, me di un fuerte golpe en la cabeza-. Snape le miró la cicatriz de la frente, cosa que hizo que a Bella le ardiera fuertemente.

-Ahh!-. Exclamó Bella haciendo que se volviera a desmayar de nuevo.