Entre la espada y la pared.

Capítulo 14 <HARRY POTTER>

Hogwarts, decían que era el lugar más seguro del mundo mágico, pero ahora todo está patas arriba lleno de dementores por todas partes, un asesino suelto y una rata que solo da problemas.

Harry Potter se disponía a ir a su clase de Defensa contra las artes oscuras, con el nuevo profesor, Remus Lupin. Se le hacía muy conocido y no sabía porqué, únicamente lo había conocido en el tren, cuando el dementor le atacó en el vagón.

-Potter-. Una voz terrorífica resonó por todo el pasillo de la tercera planta, donde únicamente el estaba solo, llegaba tarde a su clase. No le dio mucha importancia y volvió a caminar.

-Potter-. Volvió a escuchar esa voz, y esta vez se dio la vuelta buscando de donde provenía ese ruido. Atormentado por no saber de donde venía, continuó su camino pensando que se lo había imaginado.

-Isabella Potter-. Harry se paró en seco y tiró todos sus libros al suelo al escuchar su apellido combinado con el de su amiga Bella. Se quedó pálido y decidió correr todo lo posible hasta su clase, donde intentó tranquilizarse por todos los medios.

-¿Alguien sabe que es lo que hay dentro del armario?-. El profesor Lupin preguntó a la clase.

-Es un Boggart señor, se convierte en lo que uno más teme-. Como era de esperarse, Hermione levantó su mano dispuesta a responder la pregunta.

No sé como siempre lo sabe todo.

...
-Harry Potter-. El grito de Bella resonó por toda la sala común de Gryffindor, nadie sabía que como siendo una serpiente podía entrar en la guarida del león.

-¿Bella?-. Harry se dio cuenta que había echo una pregunta tonta en el momento que su amiga volteó los ojos.

-¿Quién sino?-. Se levantó y le dio un abrazo enorme, sentía que debía hacerlo, ya que no se le iba de la cabeza la voz que había escuchando camino a la clase, aún se preguntaba que era lo que decía, Isabella Potter.

-¿Qué quieres? No tengo todo el día-.

-Uy Potter, no te conviene hablarle así a la hija del profesor de pociones-. Bella le sonrío de manera divertida y se sentó en uno de los sillones de la sala común. -Tengo un par de cosas que contarte-. Continuó.

-Adelante-. Harry le dio hincapié para que continuara explicándole lo que le sucedía.

-Harry Potter-. La voz de Bella cambió estrepitosamente a una voz terrorífica, justo la que había escuchado en el pasillo horas atrás.

-¿Bella? ¿Qué pasa?-. Al ver que su amiga no respondía, corrió al despacho de Snape a decírselo.

-Profesor Snape, es Bella, no se que le pasa-. Snape al escuchar el nombre de su hija salió de la clase corriendo y siguiendo a Harry por el pasillo. Se detuvo en la torre Gryffindor y entró preguntándose que hacía su hija allí. Se la encontró tirada en el suelo convulsionando y repitiendo la frase: Soy Bella Potter.