Dreamers «Harry Styles» ✓ #1 (Edición)

Capítulo 1

El taxista bajaba mis maletas, mientras yo tenía mis audífonos puestos. "Flaws" por Daugther. Esa canción resonaba en mis oídos.

Miraba a todas partes. El lugar era muy pintoresco. Había miles de personas con maletas y diré que se sentía bien al percibir que era la única que acababa de llegar a este lugar.

Un auto se detuvo. Miré al chico que estaba dentro de él, en los asientos de atrás, con unas gafas muy a la moda puestas cubriéndole los ojos. Escuchaba una canción, el chico de rizos pretendía tener un micrófono en su mano, mientras cantaba.

«¿Me está cantando a mí?»

El auto avanzó. Una sonrisa boba se pintó en mi rostro, y al darme cuenta de ello la borré casi de inmediato.

— ¡Hola! —Me dijo una chica rubia posándose frente a mí—. Bienvenida a London Night University.

El nombre era un tanto ridículo, pero, respetaba su temática, sin dejar de un lado que las carreras que ofrecía esta universidad eran muy buenas.

—Gracias...

— ¿Cuál es tu dormitorio?

—Ah...—Miré el papel que tenía en la mano, leí el arrugado pedazo y alcé la mirada notando la sonrisa falsa que aquella chica tenía— Edificio Summertime, cuarto Dreamers. –Fruncí el ceño. Que raros nombres.

—Claro. El edificio está frente a nosotros, y tú cuarto está en el tercer piso —Mostró nuevamente la sonrisa más falsa que había visto en mi vida.

—Claro. Que amable —Dije algo afable, tomé mis maletas y recorrí un camino despejado en donde se encontraba algo de césped.

Al ir caminando logré notar los diferentes grupos sociales que se hallaban ahí en ese momento. Me sentía algo fuera de lugar, sin embargo, seguí caminando.

Entré en el edificio que la chica risas perpetuas me había indicado.

«Demasiados rosa» Fue lo primero que pensé al entrar. Una sensación de asco vino a mi boca. Me estremecí levemente cuando me detuve, pero luego de analizar y tratar de adaptarme, seguí mi rumbo.

Subí los escalones y maldije por el hecho de que no hubiese elevadores. Mi pereza no me rendía para más.

Llegué al tercer piso, había demasiadas chicas intentando encontrar sus habitaciones, al igual que yo.

Caminé entre aquel mar de caras y al final de un pasillo, antes de doblar a otro estaba la famosa habitación. La palabra Dreamers (222) estaba grabado en letras doradas sobre la puerta blanca.

La puerta estaba entre abierta así que cuando caminé al interior de la misma me di cuenta que  una cama ya estaba llena de cosas, así que di por entendido que tenía que tomar la que estaba cerca de la ventana. La única desocupada.

Lancé una de mis maletas a mi nueva cama. Y me senté en la orilla comenzando a sacar algunas cosas de esta.

—¡Hola! —Volteé inmediatamente y me encontré con una chica de piel levemente bronceada por el verano, cabello rubio y unos ojos cafés muy extraños, puesto que tenían el centro de un color verde, pero era leve el tono y al ir creciendo el círculo se volvía café oscuro. Eran penetrantes.

—Hola —Me puse de pie para saludarle.

—Tú debes de ser mi nueva compañera —Se acercó a mí.

—He de creer que sí. Me asignaron esta habitación.

La chica se acercó a mí, y comenzó a tocar y acariciar mi cabello. La incomodidad me invadió.