Un amor peligroso

Capítulo 19

Desperté pues mi papá, mamá, Dylan y Bryan estaban cantando las mañanitas al unísono, lo cual me saco una sonrisa de oreja a oreja, Bryan sostenía un pastel en chocolate en sus manos con velas con el número 18, terminaron de cantar y yo soplé las velas, me levanté de la cama y todos me dieron un gran abrazo acompañado de unas cuantas palabras, bajamos pues mi mamá me había preparado mi desayuno favorito, panqueques, los llené de miel y los comí, acompañada de mi familia, claro, terminando de desayunar comenzamos a decorar un poco el patio pues ahí sería la parrillada, teníamos un lindo jardín, con flores de distintos colores y césped de verde intenso, pues estaba muy bien cuidado por mi mamá, colocamos dos globos grandes de color dorado uno tenía en número 1 y el otro tenía el número 8, junto con otros globos de color dorado y morado de distan tonalidades, colocamos las mesas, Dylan y Bryan sacaron la parrilla, mamá sacó las gaseosas, papá y yo le colocábamos un lindo mantel a la mesa de color morado, Dylan sacó las sillas, cuando terminamos de arreglar el jardín eran las 2:00pm, todos entramos a la casa a arreglarnos, me di una larga ducha, salí y me vestí con el vestido que elegimos ayer, era color negro de tirantes, pegado y de la cintura hacia abajo iba suelto, unas zapatillas de punta color dorado, y una cadena de dorada con una cruz que mi papá me obsequio cuando nací, era igual a la que usaba él, sólo que la mía era más pequeña.

Unos aretes sencillos del color dorado, hice unos rizos en mi cabello y lo dejé suelto, mi maquillaje era un poco similar al de siempre, sólo que ahora usaba delineador y un labial mate de color café, por último me rocíe mi perfume favorito, revisé la hora y ya eran las 5:00pm les dije a todos que a esta hora comenzaría así que bajé a esperar a los invitados.
Para las 5:30pm ya estaban todos aquí, bueno casi todos, sólo faltaban uno...Cameron, el tío Tej y el tío Roman comenzaron a hacer la parrillada, estábamos por comenzar a comer cuando alguien toca el timbre, supliqué por mis adentros que fuera Cameron, me levanté de mi asiento y fui a abrir, ¡Sí! Al parecer mis súplicas funcionaron, era Cameron, en sus manos traía un ramo de flores, eran unas hermosas rosas rojas, en el ramo venían dos globos en forma de corazón.

Cameron: ¡Feliz cumpleaños, amor! –Dijo extendiendo sus brazos-.

Comenzaba a gustarme que de vez en cuando me llamara amor.

Me lancé sobre él para darle un gran abrazo.

Cameron: Son para ti –Dijo dándome el ramo de flores con una sonrisa en su rostro-.
Pauleth: Muchas gracias, pasa –Dije tomando el ramo y me hice hacia un lado para que él pasara-

Fui por un jarrón, lo llené de agua y las puse ahí, cuando regresé a la sala Cameron seguía ahí, supuse que le daba pena pasar.

Pauleth: Vamos te presentaré a todos –Dije con una sonrisa-.

Llegamos al jardín y aun nadie había comenzado a comer.

Pauleth: Ella es mi tía Mia, tía Mia él es Cameron, él es mi tío Brian, tío Brian él es Cameron...-Seguí así con todos y cada uno-.

Al terminar, Cameron se sentó a mi lado, como Mike fue el primero en comer el hizo las oraciones, ya que es una tradición de mi familia, desde pequeña siempre lo han hecho. Mientras comíamos, reíamos, contábamos anécdotas, simplemente pasábamos un buen rato familiar.
Cameron conversó con los chicos y ellos muy pronto le dieron la confianza para que fuera el mismo.
Corona tras corona, canción tras canción, paso el tiempo muy rápido y sin darme cuenta ya eran la 3:00am.

Cameron: Ya me tengo que ir ya es tarde –Dijo dejando en la mesa la corona que sostenía en su mano-.

Era demasiado tarde y no dejaría que Cameron se fuera a estas horas.

Pauleth: ¿Por qué no te quedas a dormir?
Cameron: ¿Puedo? La verdad estoy muy cansado para conducir así
Pauleth: Claro

A las 4:00am se fueron todos, dejamos todo como estaba y por la mañana limpiaríamos.

Pauleth: Ve a mi habitación, yo iré por ropa de Bryan para que duermas –Le dije a Cameron-.

Cameron obedeció y subió a ni habitación, yo fui a pedirle la ropa a Bryan, me dio un short y una playera, fui a mi habitación y Cameron estaba perdido en su celular.

Pauleth: Toma –Extendí mi mano con la ropa y el la tomó-.

Yo tome mi pijama y fui a ponérmela en el baño, la ropa que traía puesta la metí a la canasta de la ropa sucia, cepille mis dientes y salí, Cameron ya tenía la ropa de Bryan puesta y ya se había quedado dormido, me recosté a su lado dándole la espalda, tomé mi cobija y me arrope con ella, estaba a punto de quedar dormida cuando Cameron se gira y me abraza por la cintura, yo sólo sonreí y puse mis manos sobre las de él, después de eso caí en un profundo sueño.