Recuerdos parte dos: Memorias de un diario

Capitulo lll: La tragedia de Eclipsa, la reina de la oscuridad

Han pasado ocho meses desde que acepte ser escolta personal de Moon y debo decir que es muy diferente a como lo imagine se puede decir que conocí a la verdadera Moon, una chica con un espíritu libre, lleno de energía, Despreocupada y una chica hermosa. Yo me había enamorado sin saberlo; me enamoré...

Todo ocurrió una noche de celebración, era el cumpleaños catorce de Moon y la reina Butterfly le había obsequiado la varita mágica; la reliquia familiar mas antigua. Durante la cena Moon estaba contenta y a la vez inquieta podia verlo en su mirada pues eso indicaba una cosa, pronto tendría que desposarse con un príncipe. Al cabo de un rato cuando los invitados le dieron un respiró acompañe a Moon a dar un paseó por el palacio sabia como se sentía y no podia verla así.

-Espera no vallas tan rápido – intente alcanzarla hasta tomar su hombro ella paro en seco. – Moon ¿Qué sucede? – pregunte

-Nada Toffee, porque preguntas – volteo a verme con una sonrisa falsa – Estoy contenta, por fin tengo la varita. Eso significa que podre hacer magia, pelear con monstruos y... Y... – paro en seco bajando la mirada

-Moon... Te conozco, por favor dime ¿Qué ocurre? – le pregunte inclinándome a su altura, pronto rompió en llanto – Estoy asustada Toffee, esta varita solo significa una cosa. Pronto tendré que casarme con alguien que no conozco ni que amo; nunca pensé que llegaría este dia.

-Moon... – pase uno de mis dedos sobre su mejilla secando una de sus lagrimas – No importa que pase y con quien estés. Yo siempre estaré a tu lado – le sonreí acercándome un poco mas a ella, con la misma mano le acaricie la mejilla – Moon. Tengo algo que decirte, pero también tengo miedo – baje la mirada, sabia que esto cambiaria todo pero aun asi me arme de valor y volví a mirarla – Han pasado ocho maravillosos meses y he podido conocerte mejor; no hay nadie como tu y ojala esto no cambie nada entre nosotros – Moon aun no comprendía lo que queria decir sin embargo no me detuve, me acerque mas a ella

-Toffee ¿Quieres besarme? – pregunto captando mis movimientos – Si Moon, quiero hacerlo – respondí sin apartar la vista de ella. Moon se acerco a mi, con una mano me acarició mientras me besaba podia sentir sus labios húmedos y su respiración rozando mi cara. El beso no fue brusco ni rápido; fue un beso apasionado, sabia que ella también me amaba al cabo de unos segundos ambos nos separamos mirándonos.

-Te amo... – le susurre

– También te amo Toffee – volvió a besarme luego se levanto y dio media vuelta abrazándose asi misma en un intento de valor – Toffee esto esta mal – su voz se escuchaba quebrada – No podemos hacer esto. El reino, mi padre. Te matarían si lo supieran y de solo pensarlo me parte el corazón, de verdad te amo Toffee pero tengo que hacer esto por el bien de los dos.

Al oírla sentí como mi corazón se partía en pedazos no podia hacer nada salvo respetar su decisión. Después del beso ambos nos fuimos a nuestras habitaciones pero no antes acordar que esto nunca paso. Esa noche no pude conciliar el sueño...

(...)

De regreso a mi habitación no podia dejar de pensar en el beso, era mi primer beso y fue con quien menos lo esperaba pero de alguna forma queria que asi lo fuera. Toffee fue el primero en verme diferente ante los demas y no como la princesa Butterfly, supongo que también me enamore de el.

Camine a mi vestidor a ponerme mi pijama mañana comenzaría una nueva etapa de mi vida y quiero empezarla con el monstruo que amo.

A la mañana siguiente fui llamada a la sala principal a hablar con mi madre en privado – Me mando a llamar madre ¿Todo esta bien? – me incline frente a ella – Que bueno que llegas hija mía tengo algo para ti – mamá camino a un baúl e invocando su magia interior un enorme libro salió volando hacia ella – ¡Asombroso! – estaba impactada al ver el libro – Este es el libro de hechizos de la dinastía Butterfly, aqui están los hechizos de generaciones y generaciones de reinas. – ¿Entonces tus hechizos están aqui? – me acerque al libro tocando la portada – Asi es hija, tu abuela y bisabuela también escribieron en ese libro y tu también lo harás a su momento.