SEIKATSU KATSURA

Kunoishi

El mundo estuvo en guerra hace 17 años, antes de nacer mi familia de la que provengo estuvieron involucrados y claro porque esta guerra afectaba a todo el mundo o por decirlo más simple a todo ser vivo. Por mi parte apenas estaba naciendo, el cual durante el parto mi madre murió. A esta guerra la llamaban "Seikatsu Katsura" como su nombre lo dicta son pelucas vivientes que se alimentaban de energía vital "Kay" de los seres vivos, al hacer eso pueden poseer el cuerpo y hacerlo suyo, ellos buscan seres vivos con bastante "Kay", los cuales los hacen más fuertes aunque hay un riesgo de no poseer el cuerpo por completo por la propia voluntad de la víctima. Los "katsura" tienen cualidades y hay diferentes de ellas, bueno para diferenciarlas era por la cola, si ellas tienen cola, aunque muy inusuales ya que en la punta de sus colas tienen formas diferentes..
Los únicos que sobrevivieron de mi familia fue mi padre, lo sé porque él me ha dicho todo, aunque él tenía un hermano pero no ha sabido nada de el; mi padre me entreno desde muy pequeño a controlar el "Kay", y sí, mi familia se especializaba en controlar la energía vital a temprana edad y tener mejores capacidades que un humano normal, según mi padre yo era especial ya que tenía bastante energía que cualquier otro de la familia, a excepción de mi Tío que además de haber sido la cabeza de la familia, decía que era el más fuerte de nosotros y por ende tenía bastante "Kay" lo que lo destacaba. Desde que los Katsura llegaron a invadir, han venido por nosotros muchas veces, son como ratas en busca de su comida desesperadamente, desde entonces mi padre me ha protegido... hasta ahora.

A la edad de los 13 años nos refugiamos en las afueras de un pueblo, en unas montañas donde ellas tapaban el sol al atardecer, bueno no podíamos irnos muy lejos porque el pueblo era el que nos mantenía con vida y mi padre no aguantaba mucho caminando, él era el que iba por comida y demás cosas, yo sentía que me sobreprotegía mucho, lo cual me daba un poco de enojo y a la vez un alivio porque aún tenía miedo de pelear, pasadas las horas de que mi padre se había ido, ya se estaba oscureciendo, mi padre no llegaba, por un momento me dió un dolor en el pecho *ugh* , preocupado por mi padre salí a buscarlo.
Ya había caído el sol, La luna me empieza a seguir a donde quiera que vaya, me acuerdo que había luna llena, y me sentía seguro al saber que ella me observaba.
Durante un largo camino llegue al pueblo, no podía llegar como una persona normal que viene del trabajo a la casa , si no como una persona que viene de visita a ver a sus seres queridos que desde hace tiempo lo estaban esperando, supongo que hay mucha diferencia en estas suposiciones, claro porque estoy buscando a mi padre pero no puedo aparecerme a si no más porque hay mucha "gente" por los alrededores que no me estiman, o eso creía...

Al llegar al pueblo veo que no hay nadie, ni siquiera hay alguien en sus casas, no guardo sorpresa alguna y empiezo a gritar: ¡Padre! ¡Padre!
no se oía algún ruido que respondiera a mi llamado o de alguna otra persona, solo se escuchaba la brisa que rozaba conmigo. Después de unos minutos siento una mirada encima, no me preocupaba por eso y seguía buscando, cada ves sentía que me apretaba, al punto de sentirme incómodo, y al caso que decidí voltear a esa "mirada", vi a alguien en alguna de las casas y decidí inspeccionar porque pensaba que fuera mi padre, pero se me hacía raro que él no me llamara...