Aaron se movía nervioso por toda la casa, cogiendo cosas y empaquetando todo el equipaje que habían llevado hasta allí. Hada sabía que algo iba muy mal, sobre todo cuando Eva, la vistió de una forma poco habitual. Hada llevaba unos vaqueros oscuros ajustados y una camiseta negra, además, iba maquillada y en la cabeza se había puesto una gorra. Estaba más que claro, de que Aaron pretendía esconderla de algún modo y de ahí, a que tuviera que ir tan distinta a como lo hacía siempre. El chico también llevaba ropa más casual, había dejado los trajes y los abrigos largos a un lado, para ponerse pantalones vaqueros y un jersey con el logo de una universidad. La gorra, también era uno de los complementos clave para pasar desapercibido.
Hada no decía nada, sólo observaba como el muchacho se apresuraba cogiendo ciertas cosas y las metía dentro de una bolsa de cuero.
Una vez que tenían todo recogido, se marcharon de aquel lugar dejándolo totalmente libre. Ahora, sólo tenían que ir a otro sitio, pero por el momento Aaron había decidido que no irían a otra casa, si no a un Hotel. Era más seguro moverse, que quedarse en el mismo lugar en donde podrían se hallarlos con facilidad.Hada prometió que no se asustaría y que sería más fuerte y eso, era lo que intentaba al no pedirle explicaciones a Aaron y al no mostrar nerviosismo ante la situación de haber podido ser descubiertos en aquella casa.
Llegaron a un Motel, no era del todo malo, pero a Aaron le recordaba a cuando era un crío y su padre le obligaba a quedarse en uno con el tipo que lo cuidaba, o más bien, vigilaba, mientras que el Rubio, se instalaba siempre en los mejores hoteles.
Aaron eliminó ese recuerdo y se acercó al mostrador para pedir la llave de un cuarto para él y para Hada.Aaron observó al conserje de aquel antro y vio que se comía con la vista a Hada. Por alguna razón, eso lo enfadó, y cuando obtuvo su llave le dijo al oído sin que la chica se diera cuenta:
- ¡Vuelve a mirarla así y te corto los huevos!
El hombre asintió asustado y pidió disculpas.
La habitación era pequeña, pero tenía una cama grande en el centro con una mesita y una lámpara a cada lado. La televisión era bastante antigua, pero seguramente ni siquiera la encenderían.
- Aaron, ¿por qué has elegido este sitio? No me gusta...
- Ratoncita, tampoco te vayas a pensar que a mi me tiene encantado, pero necesitábamos ir a un sitio en donde ellos piensen que yo no iría.
- ¿Solo vas a hoteles con clase?
- Siempre voy a los mejores hoteles. Soy un hombre con suficiente dinero para pagar ciertos lujos, es evidente que no me los voy a negar.
- Entonces, ¿hemos venido al peor lugar por que no te apetece pagar mi parte?- Hada intentó que sonara como una broma, pero lo cierto, es que parecía más un reproche que otra cosa.
- Lo dices como si tu antes te hospedaras en los de cinco estrellas... Me parece que podrías acostumbrarte a dormir aquí por una noche...
Eso había sonado cruel, por que sabía que Hada era pobre. La chica se sintió ofendida y no se iba a callar lo que pensaba.- Tienes razón, estuve en sitios peores que esto, como la cabaña en la que me metisteis al principio. Podría tolerar está habitación, sí.
Aaron notó el rencor de la chica y se disculpó.
- No quería ser ruin. Perdóname.
- Está bien.- A Hada le gustó ese "perdóname" porque había sonado natural y sincero.Después de haber comido un par de sándwiches y unas patatas fritas de bolsa, Aaron se recostó para intentar dormir una siesta, pero Hada, tenía muchas preguntas y en ese momento, tenía claro que quería hacérselas.
- ¿Por qué trabajas para tu padre? Se ve a la legua que no lo soportas.- Aaron se sorprendió, pero decidió contestarle, ¿por qué no? Así, podrían ir conociéndose mejor.
- Me obligó a empezar con su negocio y no pude negarme o el castigo, hubiera sido inolvidable.
- Pero ahora pareces tener poder, ¿por qué sigues haciéndolo?
- Por que una vez que entras, ya no puedes salir. Yo soy así ahora y no puedo cambiarlo.- Hada notó tristeza en la voz del chico.
- Creo que eres un buen hombre porque has decidido ayudarme a pesar de que es un riesgo.- Aaron sonrió sin ganas al escuchar dicho comentario.
- Aunque es cierto que quiero ayudarte a salir lo más ilesa posible de ésto, no quiere decir que yo sea buena persona. Tengo un pasado que no se puede borrar, así que, no tengas ideas equivocadas de mí.
- No las tengo. Es lo que veo, y eres bueno.- Hada se levantó y se acercó a Aaron para depositar un casto beso en su mejilla. Esa acción, sorprendió al chico.
Aaron no pudo contenerse, agarró la cara de la chica, y besó los labios de Hada, de forma suave y pausada.
Hada reconoció de nuevo una tranquilidad que creía que jamás volvería a sentir. Aaron la haría creerse segura.- ¿Por qué este beso?- Preguntó ella.
- ¿Por qué el tuyo?- Respondió el otro.
- Quería dártelo por que me salió sin más.- Dijo Hada con las mejillas coloradas.
- Yo también quería besarte, así que sentimos lo mismo.Hada estaba preciosa para Aaron. Él se removió y le dio la espalda por que sabía que si no lo hacía, la devoraría entera. Hada por lo contrario, era inocente y no notaba las intenciones del hombre, así que lo abrazó por la espalda y apoyó su cara contra él. Quería sentirlo cerca por alguna razón.
- ¿Está mal ésto?- Hada estaba confundida.
- ¿Te refieres a besarnos en esta locura de situación en la que nos hemos metido de lleno?- Hada asintió.- Puede que sí, que esté mal, pero a mí nunca me importó hacer las cosas bien, ¿por qué iba a hacerlo ahora?
- Yo todo lo contrario, siempre quise hacer lo correcto, pero ahora ya me da igual.
- Hada, si "coges mi mano", quizá luego no puedas soltarla y te veas arrastrada a mi mundo oscuro.
- Tal vez no me importe ya. -Hada sabía que lo que sentía por Aaron no lo había sentido por nadie, así que ya que estaba en esa situación tan mala, ¿por qué no disfrutar de los besos y caricias de ese muchacho?Aaron se dió la vuelta quedando frente a frente con Hada. Le acarició la mejilla y le sonrió.
- Eres muy valiente, Ratoncita, pero prefiero que te sigas manteniendo a salvo. Es mejor que te alejes de mí en cuanto todo ésto termine.
- Contigo me siento a salvo.- Aquellas palabras sorprendieron a Aaron. Hada, al fin confiaba en él y eso, lo hizo llenarse de alegría por dentro. Hacía muchísimos años que no se sentía así de bien. Hada lo aceptaba de alguna manera y él, quería agradecérselo.La volvió a besar un poco más intenso y luego añadió.
- Gracias Hada.- Besó su nariz y acto seguido ella lo abrazó.
- Gracias a ti, Aaron.~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Hola Mis Queridos Lectores, tal vez este capi sea más corto, pero al menos fue más suave, ¿no creéis?
¿Qué pensáis de como se van dando las cosas? ¿Qué os apetecería para el siguiente te capítulo, acción o algo más tranquilo?Si os gustó el capi, votar y comentar. Espero que lo hayáis disfrutado.
"Si el amor es verdadero, los obstáculos, no importan tanto."
J.G.
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Marcas Ocultas
RandomLe di mi mano. Ella la agarró. Cuando la quise soltar, ya no había forma. No estaba bien seguir. Ambos lo sabíamos. ¿Deberíamos continuar? ¡Deberíamos! Aviso: Algunos capítulos con palabras blasfemas, violencia y escena subidas de tono. (+18)