Cry Baby • Joerick

How long

Lo admitiré, es mi culpa, pero tienes que creerme
cuando digo que sólo pasó una vez
Lo intenté, e intenté, pero nunca verás eso
eres él único al que quiero amar

Isak iba paseando por los estrechos pasillos, optando por un paso relativamente acelerado, por la razón de encontrar a una persona en particular. Así es, quería o más bien necesitaba encontrar a Joel. Y no, no lo quería para una vez más reclamarle, o solamente pelear. Le iba a "Advertir" sobre él mismo, así es; le contaría todo a Erick, sin importar los reclamos de Joel. Cabe resaltar que se le había bajado el enojo anterior, ya no estaba deseoso de venganza, esta vez quería ser sincero. Y no, no es que con Erick se llevará de lo mejor, pero colocándose hipotéticamente en sus zapatos, preferiría que alguien le dijera la dura realidad, sin importar que su relación terminará. No quería que Erick estuviera en un lazo, donde las mentiras se presentan, necesitaban confianza. Un engaño no es humilde cosa, jugó con ambos, sin importar los sentimientos de intermedio. ¿Acaso Joel puede ser más tonto? No pensó bien las cosas, pero que culpa tenía él, se enredó en todo su juego, sin saber primero lo que sucedía. Sabía que él había cometido un error, pero bueno, los retires traen consecuencias, y está vez no se iba a ir con las manos limpias.

Con tantos pensamientos en la cabeza, chocó con un par de estudiantes, donde la mayoría gruñó de manera agresiva, a Isak solamente la paciencia se le iba. Buscaba aquellos ojos marrones, donde alguna vez se perdió en ellos, pero que ahora le parecían insignificantes. Se podría decir que entendía que de los errores se aprende, y para él, Joel era un tonto error. Paso su mano en su frente, limpiando el exceso de sudor, causado por caminar demasiado. A punto de rendirse, diviso a Joel, tomando la mano a Erick. Frunció el ceño, y no, no por celos, sino por saber el secreto que mantenían, ¿Por qué el destino decidió así?

Trató de sonreír, pero una mueca se formó en su rostro, pensaba en arrepentirse, pero necesitaba decir la verdad, así se sentiría en paz consigo mismo. Con un poco de valentía, se colocó delante de la pareja, evitando el caminar de ambos. Joel se tensó, causando que tomara más fuerte la mano de su acompañante.

- ¿Podemos hablar? - Preguntó, causando que Erick tomara de manera posesiva al chico, sonrió por lo dulce de la pareja, pero su expresión cambió cuando observo la de ellos, y volvió a hablar - Creo que entendieron mal, necesito hablar con ambos, no necesitan sentirse celosos.

Ninguna palabra salió de alguno de los jóvenes, de manera silenciosa caminaron hacía algún lugar; donde no pudieran ser escuchados por los demás. Aún sentía que Joel estaba nervioso, lo había advertido. Aunque no sabía lo que había sucedido esta semana, donde Joel tuvo una de sus peores experiencias, aunque lo quisiera ocultar. De reojo, podía observar los cuerpos tensos de la pareja, sintiéndose en una situación demasiado incomoda, pero bueno, iba a terminar con su propósito. Después de unos segundos, el par de chicos estaba delante suyo, ambos con una expresión inexplicable, cerró los ojos pesadamente, aclarando un poco la garganta; para poder empezar con una oración coherente.

- Necesito confesarte algo, podrá ser que dudes de la sinceridad de mis palabras, pero, será asunto tuyo, Erick. Aclarando, no son celos, esto es la realidad, perdón, aunque no es culpa mía. - Las palabras salieron por si solas, dirigiéndose al chico de ojos verdes, quien lo miraba con atención y asentía dudosamente.

- Habla, no me dejes con la intriga - Respondió con ciertos nervios, sintiéndose indefenso frente al rubio. ¿Dónde quedó aquel chico? En cambio, Joel, sentía su Karma venir, sin otra opción esperó la confesión del chico, con su mirada gacha; no tenía algo más que hacer, completamente indefenso.

- Bueno, podríamos decir que ambos cometimos el error, aunque en cambio yo, no tenía idea. Todo empezó cuando yo lo invité a salir, por la razón que quería compensar mi ausencia en la fiesta de Joel, además me gustaba demasiado. Él aceptó, dándome una de las mejores emociones, aunque después descubrí que no. Mi plan fue ir a un parque, cuando estuviera la bella luna. Empezamos con coqueteos tenues, pero después cometí un error, le pedí un beso. Aclaro que no lo obligue, él lo aceptó, cumpliendo un sueño para mí.
No fue uno, fueron varios besos que tuvimos, donde compartimos algo especial. Aquella noche le envíe un mensaje, siendo respondido por un; te amo Erick. Me enojé, sí, me enojé, no podía creer que había jugado con ambos, pero lo hizo. Hablé con él, pero me contestó con excusas tontas, donde mi enojo aumentó más. Unos días después descubrí que eran novios. Pero lo que más me dolió, fue que el día donde empezaron su relación, era el mismo donde te engañó conmigo. Un chico los vio cuando te declaraste, y me lo dijo. Sacando de conclusión, que te engañó unas horas después, que fueran oficialmente novios. Mi intención no es separarlos, pero necesitaba confesarte esto. Sé, que debió decírtelo Joel, pero pensé que jamás te lo iba a confesar. Es todo, gracias por tomar el tiempo de escucharme.