Montañas Rocallosas (Camren G!p)

Capítulo 15

-Taylor ¿Qué haces aquí, cómo me encontraste? - la chica se quitó el abrigo y se sentó en el sillón individual invitando a su hermano a hacer lo mismo.

-Llamé a tu empresa, me presenté y me dijeron que estabas aquí, necesitaba hablar contigo, luego llegué a este maravilloso lugar y parece que todo el pueblo te conoce ya que al preguntar por ti supe dónde encontrarte - se alisó la ropa - te veo tenso ¿sucede algo? - el chico frunció el ceño

-No sucede nada - desvió la mirada. Taylor lo miró fijamente, pero no le creyó nada.

-¿Otra vez problemas de juegos? - Intentó persuadirlo

-No, y no es de tu incumbencia. - sus contestaciones eran esquivas.

-Puedo ayudarte si quieres, Chris, eres mi hermano y no me gusta verte así. - el chico suspiró profundamente. Luego de pensarlo unos segundos, el chico decidió hablar.

-Estoy metido en un buen lío. Es por el juego pero no aquí, hace un tiempo le debo dinero a unas personas peligrosas - Tay lo escuchaba atentamente - Me están cobrando una gran cantidad de dinero y todo me está saliendo mal - dijo frustrado - Tenía un plan, era perfecto, pero luego Lauren, intervino y todo se echó a perder.

-Un momento ¿Lauren? ¿Nuestra hermana Lauren?

-Si, ella vive aquí y ahora la están buscando en la montaña luego de que se estrellara con una avioneta - Tay abrió los ojos como platos

-¿Qué?

-Que están buscándola en la montaña, luego de estrellarse en una avioneta. No sé si está viva o muerta, solo sé que la están buscando - su voz era tranquila, no había una pizca de preocupación en su voz.

-¿Y tú estás tan tranquilo aquí?, de verdad no has cambiado nada Chris. - el tono de Tay era de preocupación real

-¿Y tú sí? - fue el turno de Taylor suspirar profundamente.

-Claro que si, Chris, no se puede tener tanto rencor guardado, no te deja vivir en paz. Lauren es nuestra hermana, y sabes tan bien como yo que los equivocados éramos nosotros, por Dios Chris, no pudiste ser tan sordo para no escuchar los gritos de mamá cuando era golpeada.

-¿Qué harías tú si te enteraras que tu esposo te engaña? - Taylor no podía creer lo que escuchaba

-¡Chris! Despierta maldición. Era nuestro padre el que tenía otra familia.

-¿Has venido aquí a decirme todo esto o simplemente se terminó el dinero y vienes por más? - Taylor esbozó una sonrisa al escuchar a su hermano.

-No sabes de lo que hablas Chris, a mí nunca me importó el dinero, si acepto que me ayudó pero si no lo hubiera heredado hubiera trabajado para conseguirlo.

-Te recuerdo que te desapareciste de la vida de mamá tanto como yo.

-Pero fueron por razones diferentes Chris. Ahora estoy bien, y puedo ayudarte. De verdad, si me lo pides puedo ayudarte - Taylor sabía que el orgullo de su hermano le impediría tal cosa, pero debía intentarlo.

-No quiero de tu maldita limosna, ahora si me permites quiero que te vayas, tengo que volver a la empresa, aquí no tengo nada que hacer.

El plan que había estado pensando Chris era simple, las probabilidades de que Camila saliera de esta eran nulas, por lo cual decidió adelantarse a los hechos y firmar él mismo los papeles para adueñarse de la empresa, conocía de memoria la firma, por lo tanto podía plasmarla en los papeles sin ningún problema. No estaba acusado de nada por lo que podía irse sin ningún problema.