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Les voy a dar un poquito de amor, pero no el amor que esperan. Debo preguntarles algo que me he estado olvidando. ¿Quieren un fic con Greg o quieren que reviva el amor entre Nick y Amanda?
Acabo de encontrar una novela que tenía algo preparada entre Greg y otra chica y dije "Una de las dos novelas tendré que cambiar". ¿Qué dicen? ¿Hago esta novela fic con Nick o Greg?

Sin decir nada se levantaron con una sonrisa, comenzaron a ver la luz a través de las rocas que iban siendo removidas poco a poco. El procedimiento ya les había sido explicado, debían salir lentamente y con cuidado.

Greg fue el primero, él salió arrastrando un poco su pierna dando pequeños saltitos cuando comenzaba a doler.

Luego fue Amanda, al ir saliendo veía como asistían a Greg y le preguntaban como se encontraba. Ella no necesitaba atención, necesitaba que alguien la envolviera en sus brazos y le susurrara que todo estaba bien. Amanda sabía que todo estaba bien, pero necesitaba que alguien se lo asegurase.

Y salió, la envolvieron en un abrazo y le susurraron en la oreja. Nick se encargó de estar para ella todo el camino a casa.

No habían estado una o dos horas. Habían pasado dos días dentro de la cueva. Ya casi ni le quedaban fuerzas para bromear o decir algo, simplemente se dejó abrazar.

Nick no dejó que la llevasen a su hogar ya que él sabía por lo que había pasado Amanda estos últimos años y no quería dejarla sola luego de una cosa así. Sin decir más luego de interrogatorios y una visita al hospital la llevó a su casa.

Ambos estaban en el sofá, Amanda temblaba, no había dejado de temblar desde que salió de la cueva, Nick preparó café y encendió la televisión. Cuidaría de ella como si fuese su mas preciado tesoro. Sonaría posesivo, pero debía cuidarla, tenerla entre sus brazos y cantarle si era necesario.

—¿Cómo te encuentras, Amy?—le preguntó Nick suavemente.
—Bien—respondió ella sin apartar los ojos de la televisión donde habían comenzado las noticias.
—Está bien que tengas miedo, yo tuve miedo también.
—No lo tengo, Nicky, solo... No lo sé, no puedo parar de temblar. Pensé que jamás nos hallarían.
—Está bien—susurró y besó su cabeza.

Ambos se quedaron en el sofá durante las horas siguientes, Nick sólo se levantaba para ir al baño o a hacer alguna que otra cosa, luego volvía y abrazaba a Amanda hasta que ésta se quedó dormida.

La llevó a la cama donde la arropó.




—Amanda—dijo Greg mientras ingresaba a el laboratorio de ADN—. Grissom te busca. Quiere que vayas con él a tratar con él un homicidio. Uno grande.
—Muy bien—respondió Amanda dejando de lado unos cuantos papeles.

Salió del laboratorio y se encontró con Grissom en el pasillo, él le alcanzó el equipo y ambos se marcharon hacia las camionetas junto a Sara.

CSI: Las VegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora