Capítulo 14: La verdad revelada

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Nureyev salía de aquella habitación de forma presurosa, ya que sólo escuchar el nombre de Cybertron le causaba cierto recelo. Había llegado a un cuarto que servía como área de comunicaciones. Debido a la diferencia de "años luz" que tenían, la tecnología cibertroniana presentaba algunas dificultades: No podía realizarse videollamadas o en su defecto, adoptar la forma vehículo de los cuales estaban acostumbrados.

¿Entonces cómo podían comunicarse con Cybertron?

Como en su momento explicaron Silvia y Stauffenberg, las únicas señales disponiles eran frecuencias al estilo de la radio, código morse; en otras palabras, sonidos específicos.

El grupo de Nureyev había interceptado una señal proveniente de cybertron, los sonidos tenían ciertos patrones. Un grupo de militares hacía la transcripción necesaria para traducirlo. El militar ruso ingresa a la habitación y en un gesto propiamente de la milicia, los soldados le dan el saludo correspondiente.

-Hemos traducido el mensaje de Cybertron, camarada Nureyev. –Expresó el soldado mientras entregaba un papel a su superior.

Sergei lee el papel de forma silenciosa, el rostro del ruso cambia por completo: Su mirada parece contener cierto odio.

-¡Maldito viejo! –Expresó con reproche el ruso. -¡Soldado, ordene toque de queda!

El soldado sin cuestionar obedece la orden. Mientras tanto Nureyev llevando el papel en mano decide buscar a su compañero Pável Kourchenko; éste último estaba torturando a golpes a Silvia.

Pável la golpeaba a puño cerrado, Silvia soportaba el suplicio; como a su vez no emitía queja alguna.

-¡Kourchenko! –Expresó Sergei con cierta rabia. - ¡No gastes tu energía en ella!

-¡¿Qué te ocurre Sergei?! –Respondió con cierto enfado el mencionado.

-¡Mira esto! – Le extendió el papel a su compañero.

Pável deja de golpear a Silvia, mientras éste lee, Nureyev decide soltar a la mujer quien estaba más inconsciente. Tomándola por la fuerza y sin quitarle sus ataduras decide sentarla en una silla de forma violenta.

"¿En verdad creías que Lockdown y tú se saldrían con la tuya? No soy estúpido cómo siempre lo has creído. Pronto recibirán su merecido."

Kourchenko había leído en voz alta el mensaje, un gesto de odio se apoderaba en él. Silvia al escuchar las palabras del mensaje soltaba una sonrisa muy vengativa.

-Por lo visto Alpha Trion les manda sus saludos. –Expresó Silvia de forma burlesca, aunque estaba adolorida.

-¡Vaya! Hasta que "Silvia Wojtyla" rompió el silencio. –Respondió Kourchenko de forma sarcástica.

-Es obvio que ustedes son tan cobardes que pueden agredirme estando en desventaja, las heridas que me han dado son severas, dudo que pueda vivir para contarlo. ¿Podrían decirme por qué decidieron intervenir en una época distinta a la nuestra? –Expresó con cierta dificultad la mujer.

Sergei junto con Nureyev sonríen de una forma maliciosa.

-Después de todo estamos de acuerdo en una cosa "querida": No vivirás para contarlo. –Expresó Sergei.

-¿Podríamos cambiar a nuestra forma pretender? No soporto ésta apariencia. –Dijo Kourchenko.

Los ojos de Silvia observaban la transformación de los dos militares ante sus ojos: Pável Kourchenko y Sergei Nureyev dejaban sus apariencias humanas para convertirse en Lockdown y Sentinel Prime respectivamente.

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