The Fate of the Furious 2

11

Deseaba con toda mi alma este momento

-¡No me pillas! ¡No me pillas!- grita Jack corriendo y alegre.

-Claro que si- se me ocurre una idea -Espera Jack, me hice daño.

Me agacho y sujeto mi tobillo. Jack deja de correr y se acerca a mi. Se agacha.

-Pillado- le digo tocando su hombro.

Jack cae de culo. Me mira desconcertando, al final rompe a reír. Corro mientras río, veo a Jack más lejos sin poder moverse del agotamiento.

-¡No vale, eres mayor! ¡Tito ayuda!- se queja.

Dom ríe levantándose de su hamaca. Corre a mí, intento huir pero me atrapa. Me coge de la cintura y me alza un poco..

-¡Al agua! ¡Al agua!- Dom ríe.

Nos acercamos cada vez más al agua de la playa. Intento escapar de su agarre, pero al final me lanza al agua. Claro que se ha mojado un poco para que cuando me lanzara, cayera en profundo. Salgo a la superficie, echo mi pelo hacia atrás. Le salpico para que se moje. Dom se baña y se acerca a mí. Le salpico huyendo.

-¡Dejad espacio!- Mia viene corriendo.

Se baña con nosotros, Jack y Brian se unen. Todos reímos y salpicados agua. Es extraño, pero algo en mí, me dice que esto es lo que añoraba, lo que le hubiese gustado vivir. Esa sensación será Amelia. Tengo que recordar pronto, si no me volveré loca.

...

-¿Te suena el coche?- pregunta Dom.

Suspiro. Miro de nuevo el Chevrolet Chevelle SS 1970. Intento hacer el esfuerzo, pero nada.

-Lo siento, pero no- me abrazo a mi misma -¿y si no recuerdo más?

-Si eres así de negativa, me temo que pasará- medio sonrío -solo date tiempo.

Respiro hondo. Que remedio. Miro atrás, Brian y Mia están hablando más alejados. Brian... ¿y si jamás recuerdo a mi hermano? Me gustaría saber todo lo que he vivido con él. Hasta ahora, los únicos recuerdos parecen ser de hace nada pero... aquellos desde que era pequeña... nada. No hay nada en mi memoria.

-¿Cuándo iremos a por Dumitres?- pregunto para mirar a Dom.

Suspira.

-Lusy, Tego y Rico están buscándolo. Por lo visto se fue de Rusia la misma noche que te trajimos. Cuando lo hallen, iré a por él- dice serio.

Cierro mis ojos. Esto no está bien. Lo presiento. Es una molestia, como una patada en la espinilla.

-Chicos, ha venido Lusy- dice Brian desde la puerta, miro a Dom.

Suspiro y ambos nos vamos. Lusy medio sonríe al verme.

-¿Y bien?- pregunta Dom.

-Estrecho de Bósforo, Turquía- dice ella sin más.

-No, si al final viajaremos por todo el mundo- dice con gracia Brian.

Río un poco.

-Hacemos turismo- me encojo de hombros -bueno, habrá que idear un plan antes de que lo haga él y conociéndolo, ya lo estará planeando.

Lusy sonríe.

-Lo sé, el plan ya está hecho- saca un mapa de su mochila -iremos en barco, así no tendrá escapatoria, ya que solo podrá salir de allí en barco. No tiene trasporte aéreo.

-Pero puede pasar por el puente- dice Brian.

-Hobes pudo ordenar a la policía de Bósforo, un busca y captura hacia Dumitres. La única salida que tiene es el mar y ahí estaremos nosotros- dice Lusy.

Brian asiente.

-Saldremos esta noche, solo podrán ir cinco y yo iré a parte junto con Hobes para dirigir en todo momento la actividad de cada uno- explica ella.

-Tego, Rico y nosotros tres- dice Dom.

Brian y yo asentimos.

-Como dije en su día, simple pero arriesgado- dice Lusy cruzándose de brazos.

-Le diré a Tej y Roman que no necesitaremos su ayuda- dice Mia yéndose arriba.

-Iré a terminar de arreglar el barco, avisen a esos dos para que estén preparados. En unas horas partís- dice Lusy para irse.

Brian respira hondo.

-Mia y yo iremos a hablar con Tego y Rico- dice Brian.

Asiento, miro a Dom, él se va al taller. Brian y yo subimos las escaleras.

-¿Estás segura de venir con nosotros?- pregunta mientras subimos escalones.

Niego.

-No, pero esto también me incumbe- digo con una media sonrisa.

Ambos dejamos de andar, ya llegamos a la primera planta. Brian me mira serio y preocupado.

-Si vienes, quiero que me prometas una cosa- asiento -si llega el momento en que nosotros no podamos hacer algo y creas que podrás hacerlo, aunque sea poco, ni siquiera te lo plantees. Si hay algo que nosotros no podamos hacer, nos vamos. No quiero que vuelvas a poner tu vida en riesgo.

Me quedo mirándolo unos segundos. Sonrío.

-Te prometo que no haré nada- él asiente.

-Por cierto, haz la maleta, lo necesario- dicho esto se va a una habitación que hay a la derecha.

Suspiro. No cumpliré con esa promesa, si puedo ayudar, ayudaré. Cueste lo que cueste. Iré a mi habitación para hacer la maleta.

Cierro la cremallera de mi mochila. Ala, todo listo para el viaje. Me acerco a la ventana, el sol está cayendo, dejando un precioso color naranja con retoques en rosado.

-Cuando eras pequeña, me dijiste que odiabas los atardeceres- escucho a Dom, lo veo ponerse a mi lado.

-Pues he cambiado- digo casi en un susurro -ahora no me gustan los amaneceres.

Él ríe.

-Los colores son hermosos, y tú nunca me hiciste caso- esta vez río yo.

-Ahora estoy a tu favor- digo sonriendo.

Respiro hondo. Tal vez deba decirle.

-Me acuerdo el día en la piscina- digo casi en un susurro -me acuerdo que dijiste... puede que sea la última vez.

Miro a Dom, él mira el horizonte.

-Puede que esto sea lo mismo- dice.

Asiento. Y nose quien ha empezado, pero ya estoy en los brazos de Dom. Me agarro a él como si fuese un koala. Mis manos en su cuello y mis piernas rodeado su cintura, Dom sujeta mi trasero. Añoraba con todo mi ser esto, y aunque nunca lo halla vivido en mi pérdida de memoria, es como si ya lo he pasado. Y conozco esto, sé perfectamente esto. Y ansiaba con todo mi ser este momento. Me lleva a la cama, me deja debajo suya.

-Deseaba con toda mi alma este momento- dice Dom en un susurro cerca de mi oído.

-Esta vez, no lo digas- no responde, solo me besa mientras sus manos me acarician con delicadeza pero a la vez desesperado.

Han pasado dos años, y aún recuerdo.