Beber de tu sangre

VIII

A la mañana siguiente Yuuri despertó en su habitación de la base, Un poco desconcertado y sin entender bien como llegó, refregó sus ojos y se estiró sintiendo la pesadez de su cuerpo, seguía notablemente cansado. Y como no, Viktor había consumido buena cantidad de su sangre lo que le dejó en estado de fatiga y debilidad. 

- Será mejor que me levante - tenía suerte de estar tan calmado, recordó que Viktor le había dicho que ese día lo usara para descansar y que ya tomaría el ritmo al día siguiente. 

Con toda la calma del mundo, el japonés tomó sus cosas de aseo personal y se dirigió al baño compartido con la intención de tomar una larga ducha para despejarse. Con a penas interés se fijó en la hora, pasaban de las 12 de la tarde... por un momento se sintió culpable por dormir tanto, pero cuando recordó que tendría el baño para él solo se sintió mejor y se dirigió a toda prisa al gran cuarto de baño. 

Ya había estado allí, pero ahora iba con más calma y relajado que el lugar le pareció extrañamente espacioso y frío pero se sentía a gusto estando solo.

El lugar se divide en dos secciones, en la primera están los lockers donde se dejan las pertenencias, entre cada pasillo hay unas bancas de madera que sirven a la hora de cambiarse. al fondo del cuarto hay grandes espejos como de estudio de baile, casi nadie los utiliza por lo que Yuuri decide tomar un casillero que esté alejado por esa zona, aun que no es como que haya alguien allí. La segunda sección es la de las cabinas de regaderas, son pequeños cubículos separados unos de otros por delgadas divisiones de acrílico opaco que solo tapan lo esencial de los cuerpos de los ocupantes. 

El pelinegro se despojó de su ropa y la guardó en el casillero tomando consigo solo la toalla que utilizaría al final, jabón, shampoo y una esponja. Tomó la cabina del centro y abrió la llave del agua caliente comenzando a regular con el agua fría, cuando consideró la temperatura adecuada se metió al chorro de agua y con toda calma se dedicó a acariciar su cuerpo con la esponja y lavarse el cuerpo para después permanecer un rato bajo el chorro de agua. Al final tomó la toalla y la enredó en sus caderas saliendo de las regaderas para dirigirse al casillero a cambiarse. Cuando llegó al lugar se despojó de la toalla quedando completamente desnudo, no pudo evitar ver su reflejo en el gran espejo del fondo, comenzó a observar su cuerpo de pies a cabeza notando la marca morada en su cuello, inconscientemente se llevó la mano a la zona comprobando una punzada de dolor.

Dejó caer la mano de su cuello y giró para darle la espalda al espejo. No tenía los lentes puestos y por ello no podía ver tan nítidamente, pero en su rango de visión periférica notó un borrón en su espalda. Para no tener dudas, tomó las gafas de su casillero y se las colocó sobre el puente de la nariz. Con calma se acercó al espejo y se paró de perfil tratando de acomodar su reflejo. A la altura de sus cervicales, cerca del trapecio de su espalda había un copo de nieve de 6 puntas trazado con lineas negras delgadas y con lagunas sombras en escala de grises que daban un discreto volumen al diseño. Yuuri lo miró por largo rato sin poder entender bien el significado - ¿a qué hora me hicieron esto? - pensó aún confundido. - Voy a preguntarle a Viktor - se vistió con el cambió de ropa que había llevado consigo y salió del baño...

toc, toc - llamó a la puerta de su vecino pero no hubo respuesta del otro lado. 

- Viktor, ¿estás ahí? - 

-...- 

- Volveré más al rato - si mal no recordaba el peliplata le había dicho que estaría en su habitación como por esas horas, el plan ahora es esperar en la habitación y salir a su encuentro si este no llega. 

toc, toc- al rededor de 10 minutos después alguien llamó a la puerta del japonés. El pelinegro se levantó de la cama y se dirigió a la puerta. 

- Viktor, justo te estaba buscando - 

- Me alegra mucho encontrarte aquí, vine hace rato pero nadie respondió... ¿estás bien? - preguntó el peliplata con verdadera preocupación. 

- Si, es solo que ...  ¿tienes tiempo ahora? - preguntó el muchacho. 

- Claro, te buscaba también para presentarte al equipo con el que estaremos trabajando, pero eso no será hasta dentro de una hora ¿estás de acuerdo? -

- Bien, de acuerdo - asintió el pelinegro. - Pero antes me gustaría consultar algo contigo - dicho esto, se hizo a un lado y le dio el paso al ruso y este sin decir otra cosa entró. 

Viktor se sentó en la cama y Yuuri permaneció de pie. 

- Es mejor si te lo muestro - llevó las manos a la solapa de su camisa y comenzó a desabotonar la hilera de botones blancos. El ruso con la cara llena de confusión observó las acciones del otro en silencio. Con el último botón dio la espalda al ojiazul y deslizó la prenda por sus hombros hasta dejarla colgando sobre su antebrazo bajó ligeramente la cabeza para mostrar mejor el diseño del tatuaje. 

- ¿Qué es esto? ¿Cuándo lo hicieron en mi? -preguntó 

- Precioso - como hipnotizado el ruso se levantó de la cama y alargó la mano hacia donde estaba el japonés, en un instante estuvo tan cerca que pudo contornear aquel delicado diseño con la yema de sus dedos. 

- Viktor, ¿qué significa esto? - nadie nunca le había dicho que algo así era parte del trato, no es que estuviera en contra de marcar su cuerpo pero nadie le había dicho que harían algo así con su cuerpo sin su consentimiento. 

- Es la marca de nuestra alianza - los ojos de Viktor relucían con verdadera felicidad y sin poder evitarlo posó sus labios en la nuca del pelinegro para dejar un beso. 

- Sigo sin entender - Yuuri sintió escalofríos y para recuperarse levantó la camisa y se la puso mientras encaraba al de cabellos plateados. 

- Yo tampoco estoy seguro, yo creí que algo como esto se presentaría de manera más especial, es más cuando te vi no sentí más allá del deseo de tu sangre...- dijo mientras sostenía la mirada de Yuuri. - Incluso ahora no veo en ti más que a mi compañero y creo que tu sientes lo mismo por mi - el menor asintió seguro, vamos solo tenían un par de días de conocerse y era imposible pensar en que las cosas se desarrollaran así de rápido entre ellos... 

- Esa marca en tu espalda no es normal incluso entre los vampiros, esa es mi marca reclamándote como mío y entonces yo ... - como si una idea llegara a su mente, Viktor se interrumpió y sin más comenzó a desnudar su torso, Yuuri aún más confundido lo observó con nerviosismo. El ruso dio la espalda al pelinegro y este abrió los ojos con sorpresa. - ¿Ves la marca en mi también? - preguntó pero no hubo respuesta inmediata. 

- ¿Yuuri? - preguntó de nuevo

- Es igual al mio - soltó aun con la perplejidad gravada sobre su rostro. 

- La marca sobre mi piel eres tu reclamándome como tuyo - la sola frase hizo que Yuuri se estremeciera. 

- ¿Porqué pasó esto? - ahora tenía más dudas.

- No estoy seguro, necesito investigar un poco más... Yuuri - se cercó al de menor tamaño quien no entendía nada. 

- Yuuri, necesito que estés tranquilo y que confíes en mi, por ahora no digamos nada esto - el ruso puso sus manos sobre los hombros de su compañero. - Te prometo que te voy a dar una respuesta y que voy a protegerte con todo lo que tengo - instintivamente abrazó al japonés, la diferencia de estatura no era mucha sin embargo en ese momento Viktor parecía querer envolver completamente al otro y de una manera extraña a Yuuri no le molestó pero no fue capaz de devolver el abrazo. Solo asintió mientras sus manos formaban puños a sus costados...

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Hola!! 

Hoy es una pequeña pero necesaria actualización, les adelanto que en el siguiente capítulo se presentarán otros personajes y posiblemente sabremos sobre las habilidades de Viktor, al ser un capitán y pertenecer a la división especial debe tener una habilidad especial :O

Gracias por sus votos, me gustaría leer sus comentarios y recibir sus votos en este nuevo capítulo !! n___n