Derpy estaba siendo ayudada por Rarity para probarse el vestido el cual era de unos tonos verdes aguamarina, la torpe chica apenas podía acatar las indicaciones de la estilista la cual con gafas puesta tomaba medidas, apoyaba a la rubia a moverse para ponerse el vestido. Derpy se miraba ruborizada en el espejo.
—¿Crees que le guste?— Dudó nerviosa mientras sonreía tensa. —Él es muy especial para mi, fue quien me cuidó desde la excursión a la playa... ¡Fue quien se enteró que yo existía!— Sonrió mientras terminaba de probarse el vestido.
—Dime querida... ¿Cómo va tu relación con Forest?— Sonrió la estilista mientras anotaba todo en un cuaderno notando la emoción de Derpy.
—Él es increíble, parece que habla con los árboles, es comprensivo y ni hablar de que tan buenos son... ¡Dios sus muffins de arándano son exquisitos!— Reía Derpy emocionada mientras miraba a Rarity. —Deberías probarlos... Te encantarán— Exclamó ruborizada mientras jugaba con su cabello. —¿Cuánto sería Rarity?— Dudó mientras volteaba a la estilista.
—¡Bah Derpy te lo dejó de cortesía! Pero me debes unos muffins si son tan buenos como dices— Exclamó Rarity apretando con cariño la mejilla de Derpy la cual asintió y al salir por error derribo un maniquí. —Calma yo lo recogeré— Sonrió mientras anotaba todo en una libreta de pedidos oyendo a alguien bajar escaleras.
Renqueando un poco pero con una sonrisa bajaba el pelo plateado de Combine mientras traía el desayuno, dando un suspiró la chica fue a él aceptando el emparedado con una sonrisa pero esta se desvaneció al ver a Sombra dándole unos analgésicos para el dolor. Rarity se mostraba aun algo insegura de la presencia del director en su boutique. Suspiró al ver como ambos se retiraron a Canterlot, ya los juegos terminaron con la victoria de Canterlot, DarkBlood se había retirado dejando a Cinch con Crystal en tercero y a Ozpin en segundo.
Pero eso no quitaba la bienvenida para que volvieran para el baile de otoño ya que Celestia les premió con alegría dejarlos volver, la única preocupación ahora era que el gimnasio estuviera decorado a la perfección, Pinkie corría de aquí a allá lanzando cintas a más no poder, ayudada por las demás limpiaban el polvo salvo AppleJack que con McLaggen, Bulk Bíceps, Big Mac y Fructus cargaban las cajas con múltiples bebidas siendo la principal sidra de manzana. Fluttershy ayudaba a Rainbow la cual estaba encargada de vigilar a los alumnos voluntarios.
Salazar (Hasta que apareces chico, ¿Dónde andabas?) vigilaba a las Dazzlings las cuales cantaban con unos amuletos de menor poder, solo para permitir subella voz pero no lo suficientemente fuertes para hipnotizar, Sombra estaba con las principales las cuales ayudaban a decorar, Fructus de vez verificaba que ni Discord ni algún otro alumno hiciera travesuras hasta que comenzó a oir una discusión.
—Es mucho queso Cheese... Ya es suficiente— Exclamó Pinkie viendo al castaño el cual insistía en poner aperitivos de bolas de queso, ambos discutían hasta que descubrieron que alguien debía moler el hielo.
AppleJack, Bulk y los más fuertes seguían ocupados y estaban sobretiempo hasta que con un estruendo el hielo comenzó a partirse bajo la fuerza de dos prótesis de potencia demoledora y unos guantes con manoplas. Discord y Battery estaban moliendo a punta de golpes el hielo, Discord fracturaba generando grietas y la fanática militar remataba haciendo a ambos ser capaces de deshacer un total de treinta kilos de hielo. Twilight estaba junto Sunset con una sonrisa explicándole que hacer a Flash y los demás músicos.
Salazar después de ensayar con las Dazzlings sintió una punzada fuerte en la cabeza al igual que nuestras chicas y chicos, Fluttershy que estaba en la parte área por el aturdimiento cayó en brazos de Rainbow Dash la cual adolorida reconfortó a su pareja. Algunos alumnos fueron a auxiliarles pero parecían estar bien pasado un buen rato. Pinki rió al ver como los que se desocuparon jugaban, cantaban o hacían batallas de rap en la cual había intentando entrar el hermano de Fluttershy.
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Vientos De Amor
FanficLas chicas entraban a otro año más, siempre unidas hasta que aparecen múltiples ocurrencias. Desde un viaje al campo hasta el baile de graduación harán que nuestras chicas deban meditar con exactitud que deben hacer. Y ni hablar de sus amores que no...