12° Capítulo: "Inspiración" 🎹

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La magia había sido interrumpida. Me sentía frustada y culpable. Esto estaba pasando y todo por haber mentido.

Maldita sea.

Liam avanzó su paso sobre nosotros.
- Ali... ¿puedes explicarme esto? - dijo él mirándome. Vi que atrás estaban Clay con cara de confundido y Sam triste mientras me hacía gestos para calmarme

Estaba molesta y no soy buena para ocultar mis emociones.

- ‎Discúlpame Liam, pero no tengo nada que explicar aqui delante de todos. Hablemos tranquilos mañana, ¿Puede ser? - dije lo más calmada que podía
- ‎No, quiero explicaciones ahora - dijo mientas se movía de un lado a otro.
- ‎Liam, disculpa, pero no es buen lugar ni hora para que hablen, ¿por qué no te calmas, y hablan mañana? - dijo Shawn mientras me miraba pero yo solo podía dirigir mi mirada al suelo o a Samantha que estaba frente mío.
-  De acuerdo. Mañana hablaremos de lo que pasó esta noche, Alina. Ya sabrás lo que pienso sobre esto - nos fulminó a Shawn y a mi con su mirada molesta y se dirigió hacia su auto con Clay, quien lo seguía para que se calmara.

Me quedé paralizada pero ante la salida de ellos dos, Sam se dirigió a mi para darme un abrazo. No sé porque, pero las lágrimas de mis ojos empezaron a mojar mi rostro y el hombro de mi mejor amiga.
¿Por qué carajos estaba llorando? Nunca fui sensible y ni menos llorar por algún problema que haya tenido con Liam.

- Ali, no debes llorar por esto. Él entenderá. Además ya hablamos en el taxi del tema. Nadie debe decirte lo que tienes que hacer, y menos llorar por un imbécil como Liam - me miraba a través de mis cabellos despeinados en el hombro de Sam. Se sentía bien cuando él me daba consejos o simplemente notaba que decía algo desde su corazón.
- Gracias Shawn. Aunque sigo sin saber por que estoy llorando - dije, reí entre lagimas y buscaba un pañuelo en los bolsillos de mi campera.
- ‎No estés mal, ¿si? Nadie debe hacerte daño - Me alejé de Sam y miré a Shawn
- ‎Gracias de vuelta. Debo entrar a mi departamento y perdón por este mal momento - miré a Sam y nos dirigimos hacia la puerta. Ella entró y Shawn se acercó para darme un abrazo y despedirse. Todo había sido tan perfecto y por la estupida idea de "fiel amistad" de Liam, mis mentiras y los malentendidos se había arruinado. Él se fue al taxi. Y nos despedimos con un saludo de manos.

Subí a mi departamento. Vi a Sam sentada en el sofá mirandome con cara triste y me dijo:
- Amiga, lo siento tanto - me abrazó
- ‎Dios, maldita sea mi vida - dije llorando de nuevo y tirandome en el sillón
- ‎No digas así, Ali. Las cosas pasan. Y esto también pasará. No fue para tanto. Liam es un exagerado y lo sabemos - dijo mientras se sentaba en el piso y poder verme a la cara
- ‎No lo sé. Pero había sido todo tan perfecto Sam. Ni sabes. Y por mi estúpida inmadurez tuvo que terminar así- dije soltando un sollozo y enterrando mi cara en un almohadón
- ‎Ali, deja de llorar ¿si? No te pongas mal por esto, llevate lo bueno de esta noche - hizo un silencio - Perdón por arruinar este momento triste, ¿pero ibas a besar a Shawn cuando llegamos? - dijo sonriendo
- ‎Algo así. Te juro que no lo busqué. Pero había sido una gran noche y me acompaño hasta mi casa en un taxi, me deje llevar, no lo sé, aunque él me encaró, bah no sé, ya no sé nada, quizás fui una estúpida también con eso. Siempre imaginando cosas de pavadas - dije elevando mis cejas y llorando de nuevo.
- ‎Oh, mi dios, Ali. Mierda Liam - mientras iba a buscar su nutella a la cocina - Amiga, debes olvidar este momento y creo que esto puede salvar cualquier mala noche, más si le agregamos Netflix ¿no? - dijo riendo y señalando el nutella.
- ‎Sam, ¿enserio me estás diciendo? - reí y levanté mi mirada y la observé con cara divertida y sorprendida. Mi amiga nunca recurriría a esto. Ella saldría a bailar o iría a una fiesta, ya que pensaba que comer y ver películas era de personas inmaduras.
- ‎Y si, la inmadurez es un regalo del cielo, y hay que aprovecharlo, ¿no? - dijo riendo y sentandose a mi lado en el sofá.

Miramos una película y me dormí.
7am, me desperté porque sonaba el timbre, ¿quién carajos estaba interrumpiendo mi sueño? Sam ni se había despertado. Asi que me levanté del sofá y me dirigí a la puerta.

Era el chico de nuestro suplemento mensual de revistas de moda. Dios.
Le pagué. Y entré a mi departamento nuevamente. Me encontraba aún dormida pero decidí desayunar, debía trabajar por la tarde en la tienda y no perdería mi mañana de Lunes por haber pasado una mala noche ayer. Busqué mi celular en la cartera para poder poner Spotify cuando veo que tenía varios mensajes en mi Whatsaap. Algunos de grupos, pero me centré en los tres mensajes de Shawn y tres de Liam. ¿Y si no los leo? No, debo entrar y ser fuerte. Tú puedes Alina.

[02:45] Liam: Hey Ali.
[02:47] Liam: Quizás estes molesta o durmiendo pero no quiero que nos peleemos por esto. Eres mi mejor amiga y no lo arruinaré por este tipo de cosas.
[02:48] Liam: Cuando leas este mensaje, llamame o respondeme. Te quiero.

Siempre hablando de valorar nuestra amistad este pibe. Dios. ¿Te quiero? Si me quisieras, no hubieses hecho ese espectaculo ayer. Idiota.

[03:45] Ali, ¿cómo estás?
[03:45] Espero que estés mejor. No le des lugar a este tipo de cosas. Nada ni nadie debe quitarte la sonrisa. Llamame si quieres hablar con alguien. Descansa.
[04:56] Aqui de vuelta yo, Shawn, disculpa si estás durmiendo, aunque imagino que ya estarás haciendolo. Pero quería decirte que a pesar de que digas que pasamos un mal momente anoche, me ha sido de inspiración para una nueva melodía. Asi que gracias Ali por tu ayuda. Ha sido divertido mi noche contigo. Descansa.

¿Inspiración? ¿Y ese horario? Que tarde se acostaba este chico. Simplemente me hizo reír tanto que desperté a Sam.

- ¿Qué carajos te pasa? - dijo Sam molesta pero riendo y con sus cabellos todos enredados.
- ‎Nada, amiga. Sólo digo que aproveches tu Lunes y seas feliz. Nada ni nadie debe quitarte la sonrisa, Sam - dije riendo y saliendo de la cocina pegando saltos
- ‎¿Te puedo decir algo sinceramente? Eres bipolar, amiga. Pero tienes razón. Que inspirada estás hoy - dijo elevando sus cejas y prendiendo la cafetera.
- ‎Quizás la inspiración no sea mía - dije riendo y sentándome en la mesa
- ‎No preguntaré - río y me miró elevando sus cejas - ¿No esperarás que arme todo el desayuno? Todo muy feliz pero prepara las tostadas, querida amiga -
- ‎A sus órdenes - dije riendo

Desayunamos. Fui a correr. Hicimos juntas varios trámites y se hizo la hora de ir a mi trabajo. No respondí ningún mensaje. No sabía que palabras que decir.

Pero antes de irme a la tienda, decidí enviarle el mismo mensaje a los dos:

[14:31] 😊👍

No era el mensaje correcto, lo sé, pero era mejor que clavar el visto. Conducí a la tienda con mi playlist, venía cantando a todo pulmón para poder distraerme un poco, mis pensamientos querían tomar una alta velocidad pero los frené con la música más fuerte. No me dejaría derrumbar en este Lunes. Debía sonreir y punto. Creo que nunca estuve tan segura.

Al entrar a la tienda, me encuentro con Leah, la chica que tiene el turno anterior al mío, hablando con nada más ni nada menos que Shawn, ¿qué hacía aquí? Reí sola y me dirigí hacia ellos.

- ¿Shawn? - ambos me miraron - ¿qué haces aquí? ¿viniste a devolver a Stella? - reí y él soltó una risa silenciosa.
- ‎Por supuesto que no. Está en casa descansando. Vine a verte - sonrió y me miró fijo a mis ojos.
- ‎Oh, bueno, aqui estoy - dije. Soy una estúpida, lo sé. Pero no logro responder de la manera que quiero, cuando me mira a los ojos, no sé porque.
- ‎Bueno, hola - me saludó con la mano - ¿podemos hablar? - se incorporó ya que se encontraba apoyado sobre la mesa de caja
- ‎Si, dime, ¿qué pasa? - de nuevo siendo una idiota con titulo. Él tan considerado y yo siendo un bloque de hielo del polo Norte. Alina, calmate ¿si?
- ‎Bueno, ¿hay un piano? - Noté que estaba nervioso porque estabamos en una tienda de instrumentos musicales, ¿cómo no va a haber un piano, Shawn?
- ‎Si, en el pasillo 3. Hay uno disponible para usar - dijo Leah, quien me miró guiñandome un ojo y sonrió.
- ‎Acompañame - me dijo Shawn y me llevó de la cintura hasta el piano.
- ‎¿Por qué necesitas un piano para hablar conmigo? - dije. Me siento idiota por tercera vez. Mejor dejo de hablar ¿no?
- Es que yo no hablaré. Dejaré que hable el piano por mi...-

Continuará [...] ❤️ - Bri -
La historia de Shawn y Alina está por empezar y estoy muy emocionada por comenzar a escribirla. Espero que se sigan enamorando de esta historia. Agreguen a su biblioteca para recibir las notificaciones, comenten y recomienden a sus amigos. Gracias por los hermoso comentarios que siempre me dan! Un abrazo amigos.

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