Perdidos

7° Capítulo: "Exámen" 📚

Jueves por la tarde. Llueve. Me encontraba trabajando en la tienda, mientras estudiaba. El exámen era mañana y aún me sentía en falta. Mi cabeza estaba por explotar, me estaba sobresaturando de teoría de inglés. Decidí descansar, además nadie entraba en el negocio, debido a la falta de personas en la calle.

Tomé mi celular y como siempre, elegí reproducir mi playlist favorita. Había comprado pizza para almorzar, así que decidí merendar lo mismo. Ya que no podría salir a comprar algo y dejar el negocio solo. Me recosté en la silla y me dediqué a mirar el techo mientras comía mi porción de muzzarella contenta. En mi serenidad de no estar estudiando, empezó a sonar una canción de Shawn Mendes que había en mi playlist. Su voz me daba tanta paz. Mis pensamientos volaron hacia la fiesta del Martes y lo extraño que había sido todom Encontrarlo, caer a la piscina con él, que me haya curado mi herida, bailar y hasta conocer su departamento. Demasiado loco. Su mirada se hizo presente en cada recuerdo. Esos ojos, llenos de magia, encanto y luz. Eran tan especiales. No sé porque razón pero pensando en sus ojos, empecé a tararear una melodía que no conocía. Simplemente reí y no entendí lo que estaba haciendo. Hasta que llegó un cliente e interrumpí toda mi situación extraña para dedicarme a vender el instrumento que estaba necesitando.

Terminó el día de trabajo. Había pasado tan rápido. Así que conduje rápido hasta mi casa para terminar mi estudio e irme a dormir. Y así fue.
6:20am sonó el despertador. Día completamente soleado. Mis padres me mandaron un WhatsApp para desearme suerte. Me bañé, cambié y desayuné. Mi mamá seguía insistiendo por chat que le envíe una foto mía para ver como me encontraba, ya que no veían hace bastante tiempo. Así que les envíe una para que no se preocuparan tanto por mi estado de salud.
(foto en multimedia).

Condujé rápido rumbo a Ryerson University que quedaba a media hora de mi casa. Llegué y corrí al departamento de intercambios.

- Señorita Bilbao, al fin llega - me dijo la mujer elegante de la puerta. Sonreí extrañada, ¿Acaso estaba llegando tarde? Había perdido la noción del tiempo al conducir pero tampoco era para tan... (logré mirar el reloj de la habitación) mierda, era 8:23am y el exámen empezaba a las 8am. No sé que había pasado con los tiempos pero esta mujer me estaba negando totalmente la entrada debido a mi tardanza y (según ella) mi falta de educación por haberle puesto cara descortés al entrar. Estaba desconcertada y no sabía que iba a saber. Me había esforzado mucho por ese exámen. Mis pensamientos aumentaban mientras caminaba por toda la habitación, cuando un chico interrumpió mi paso y freno mi caminata de ira. Lo miré y reconocí que era uno de los amigos de Shawn que había conocido en la fiesta. Geoff, si definitivamente era él.

- Hey, te conozco - pensó- Oh, si, de la fiesta de Shawn. Eres amiga de Liam - sonrió y se colocó delante mio.
- ‎Si, y tú eres Geoff, amigo de Shawn. Me acuerdo de ti - sonreí sin dientes.
- ‎Y qué te sucede? Tu caminata perturbó mi alegría matutina - dijo riendose
Le expliqué lo que me había pasado, inclusive hablando de la mujer delante de ella, quien nos escuchaba a lo lejos, sentada en su silla, mostrándose fría ante nuestra presencia.
- Pff, dejame que ya te resuelvo el problema - dijo Geoff serenamente.
Lo seguí con la mirada. Llamó por teléfono a dos personas. Y en la última llamada, le paso su móvil a la mujer, quien me miraba con desprecio y colgó.
- De acuerdo, señorita Bilbao, pase a rendir su exámen - suspiró - más le vale que obtenga una nota alta - dijo mientras se dirigia a otra habitación del lugar.
- ‎Oh, gracias Geoff. Te debo una. ¿Cómo lo hiciste? - dije sonriendo y dandole mi mano en gesto de darle los cinco.
- ‎No hay problema Bilbao. Mi tío es rector de uno de los departamentos de esta universidad. No dudó en ayudarte - sonrió, chocó mi mano - Y si, ya sé como puedes agradecerme - lo miré extraña, no pensé que sería necesario pero asentí cuando él continuó - Al terminar tu exámen, buscame en la puerta del campus de deportes ¿de acuerdo? - y empezó a caminar hacia la salida
- ‎De acuerdo - dije mientras me ponía en puntas de pie, y corría feliz al salón para rendir el exámen. Dios me ayude.