Comencé a llorar fuertemente, como cuando Zayn me había terminado. ¿Porque la vida suele ser injusta? ¿Acaso la felicidad no es para mí?
Tomé una de sus camisas y la olí, lo necesitaba. Al buscar su pantalón este tenía una cajita, la abrí y era un anillo. ¿Me iba a proponer matrimonio?
Mierda, mierda y más mierda. En estos momentos odio a Julissa con todo mi ser.
Tomé mi celular y llamé a Zayn, era con el único que podía desahogarme.
-¿Si?-
-Zayn.- Dije sollozando. -¿Podrías venir?-
-Si, claro. Tranquila.- Dijo un poco alterado.
Minutos después tocó la puerta y abrí. El pasó y me abalancé sobre el para abrazarlo.
-¿Que sucedió Pezz?- Dijo mientras nos abrazábamos.
-Lo perdí para siempre Zayn.- Sollocé. -Iba a pedirme matrimonio.-
(...)
¿Que? ¿Había escuchado bien?
-¿Que?-
-Si.- Dijo limpiando sus mejillas. -Ve esto.- Se acercó al suelo y tomó una pequeña caja.
-Mierda Perrie.- Susurré. -¿Porque no se lo dijiste?-
-No puedo Zayn.- Soltó frustrada. -Por más que lo ame sería injusto tenerlo dos años de mi vida a escondidas, el no lo merece.- Se sentó en la cama. -Será muy difícil olvidarlo, me enseñó tantas cosas.- Sonrió. -Me enamoró como alguna vez lo estuve de ti.-
Hablaba en pasado, ya ella me ha superado.
-Lo se.- Asentí triste.
-Puedo preguntarte algo.-
Asentí.
-¿Porque me dejaste?-
Me senté a su lado y hablé.
-Creía haberme enamorado de Gigi.- Dije. -Pero me di cuenta que no cuando..- Callé.
-¿Cuando que?-
-Cuando volví a verte.- Soleté. -Cuando estabas cerca de Geoffrey me enojaba. Sentía odio hacia mi por haber dejado a la única mujer que en mi vida he amado.- Coloqué un mechón de cabello detrás de su oreja. -Pero al verte feliz con el entendí que no debía ser egoísta, aunque a veces era inevitable no sentirme celoso y reclamarte por estar con alguien más.- Reímos.
-Lo recuerdo.- Rió. -Gracias por estar aquí Zayn.- Sonrió triste viéndome a los ojos.
-Gracias a ti por perdonarme.- Sonreí. -Siempre que me necesites aquí estaré.-
Ell sonrió y nos unimos en un hermoso abrazo.
(...)
Una semana después...
Estábamos en México, ensayando para el concierto de ésta noche. Ya en las redes Zerrie era tendencia, algunos felices, tristes, enojados y decepcionados. Geoffrey no me dirigía la palabra y eso me hacía sentir horrible. Las chicas se enojaron conmigo al igual que Harry, pero no podía decirles nada.
-¿En que piensas?- Susurró Zayn en mi oído.
-No, nada.- Dije. -¿A quien le toca ensayar?- Pregunté.
-A Geoffrey.-
Asentí triste.
-Pezz.- Susurró y lo miré. -Hay un paparazzi en la ventana.-
