El ojiverde bostezo y se dirigió hasta la cocina para desayunar. Aunque la mayor parte del frío se encontraba en su cuarto quiso haberse puesto unos pantalones largos en vez de aquellos shorts de pijama. Sintió como su gata se frotaba contra sus piernas mientras el caminaba, sonrió y la cogió entre brazos.
-Zafiro -acaricio su pelaje- Buenos días chica.
La gata ronroneo y se estiro entre sus brazos para luego volver a bajar y huir hasta la cocina.
Harry se apoyo en el umbral de la puerta y sonrió al ver a Louis agachado buscando algo en la nevera de su cocina. Con su mirada busco a Diana y frunció al ceño al no poder verla.
Harry se mordió el labio y recorrió la espalda desnuda de Louis. Tenía unos hombros anchos y una cintura estrecha haciendo un triangulo perfecto, podía ver sus músculos moverse junto a él y sintió sus dedos picar ante la necesidad de acercarse, acariciarlo y frotarse como si fuera un felino. Ahogo una risa ante la idea de frotarse contra el ¿Qué reacción tendría si lo hiciera?
Louis se movió por la cocina mientras encendida la radio encima de la nevera, esta comenzó a sonar una canción que el conocía. Movía las caderas de una manera divertida junto al ritmo y cantaba la canción con un tono ronco y desafinado. Harry apretó sus labios intentando no reír ante su intento. Definitivamente la música no era su fuerte.
Rompió unos huevos y los puso sobre el sartén. El siguió cantando y se dio la vuelta para encontrarse con su mirada verde.
-Debería darte unas clases de canto, pareces un perro –le dijo burlón.
Harry le regalo una sonrisa la cual el devolvió. Se acerco a Harry y atrapo sus labios con un lento y sensual beso.
-Buenos días -dijo a escasos centímetros de sus labios.
-Buenos días. -contesto Harry y volvió a besarlo. Paso sus brazos por su cuello y lo atrajo hacia Harry sintiendo su torzo perfecto, aplastarse contra el duro y caliente torzo de Louis. El gimió y se separo.
-Que buena forma de saludar a las personas ¿lo haces siempre con todos? -le sonrió burlón y Harry le golpeo el brazo y paso por su lado.
-Es extraño verte acá, pensé que pasabas todo el día en tu oficina...no pareces muy atraído al mundo exterior.
El hizo una mueca fingiendo estar ofendido.
-Gracias por creer que soy un desadaptado social.
-¡No me refería a eso! –rió- Digo que siempre estas más concentrado en tu proyecto que en otra cosa.
-No en realidad solo que quiero terminar con esto lo mas antes posible. Algunas personas pueden ser una espina en el culo -Harry rió por el comentario- Además le di un descanso a Josh y Diana por Navidad, tenía que comer.
-Navidad es dentro de dos semanas -recordó Harry.
El simplemente se encogió de hombros.
-Debo de tener una vena bondadosa, aunque me agrade Diana se que tiene mejores cosas que hacer que alimentarme y Josh... -se rasco la nuca y puso una cara pensativa- En realidad el chico ya lo estaba pidiendo, necesitaba arreglar algunos asuntos con su familia.
El observo como suspiraba y un brillo de tristeza se acumulaba en sus ojos azules.
-Debe ser lindo tener una familia -susurro. El corazón de Harry dio un vuelco y quiso atraerlo y abrazarlo con fuerzas.
Lo entendía con perfección. La última vez que había tenido una Navidad feliz fue antes de que su madre muriera, hace 15 años atrás. Carraspeo y decidió cambiar de tema.
-¿Qué cocinas? Huele bien.
-Haré unos panqueques con huevos revueltos. ¿Tienes hambre?
Harry le sonrió coqueto.
-Siempre -el soltó una risa que hizo estremecerse.
-Bien, entonces ayúdame.
-¿Quieres tener un postre? –pregunto él.
Si estas tu en el por supuesto, pensó Harry.
-Claro, ¿por qué no?
-Haré una ensalada de frutas con chocolate –le guiño el ojo y paso por su lado.
-No soy bueno cocinando. Estoy acostumbrado a comer en restaurantes y eso -le comento mientras le ayudaba a hacer la mezcla de los panqueques. Louis sacaba algunas frutas de la nevera y comenzó a cortarlas de la manera de como lo haría un chef.- ¡Eres asombroso!
El rió y reunió todas la frutas cortadas en un bol.
-No soy un pobre solterón que no sabe cuidarse de sí mismo -guiño y saco syrop de chocolate para echarlo encima de las frutas cortadas. Cogió una fresa repleta de chocolate y la acerco hasta los labios de Harry.
Harry saco un poco su lengua para probar el chocolate que chorreaba de la fruta. Abrió los labios y mordió un poco deleitándose de la mezcla de sabores entre ambos objetos.
-Mmm -gimió y lamio el chocolate de sus labios. Louis sonrió y acaricio su mejilla.
-No puedo encontrar la razón por la que seas tan hermoso -El se sorprendió diciendo eso en voz alta. Las mejillas del rizado enrojecieron y siguió mezclando.
-Gracias -dijo por lo bajo con sus mejillas totalmente encendidas.
Siguió enfrascada en su tarea y vertió la mezcla en el sartén, ya caliente, intento hacer un círculo con la mezcla y se volvió para hablar con Louis cuando un polvo blanco le llego a su cara.
-¡Louis! -grito el, apartando parte de la harina de su cara y cogió el syrop a un lado, apretó la botella y dejo que el líquido llegara a su cara y pecho desnudo. El rió y cogió el líquido chocolatoso de su cara y lo restregó por el cuello esbelto de Harry, luego con la botella esparció mas chocolate por su pecho.
Lo cogió por su cintura y lamio el chocolate de su cuello enviando una carga eléctrica a su columna estremeciéndolo por completo. Cuando comenzó a bajar por su pecho Harry comenzó a reír como loco e intento apartarse.
-¡No! -chillo riendo- ¡Basta, basta, basta!
Él lo subió en el tope de la cocina, abrió sus piernas, se poso entre sus muslos y acaricio haciéndole cosquillas. Beso su boca con suavidad permitiéndole saborear el sabor de chocolate en su lengua, luego aumento la intensidad del beso. Levanto su camisa y acaricio su vientre plano. Zafiro subió a al tope hasta llegar a unas de las frutas en el bol.
-¡La fruta! -jadeo cuando el mordió su oreja- Zafiro las comerá.
El frunció el ceño.
-¿Zafiro?
-La gata… -él se volvió hasta la gata y la agarro para dejarla en el suelo, esta ronroneo y se froto contra sus pies para luego lamerlo.- Zafiro tiene un buen gusto –el rió y volteo los panqueques.
-Ve como quedo mi pecho –señalo Harry- esta todo pegajoso.
-Yo lo limpio luego, cariño –guiño el ojo y beso su mejilla.Luego de que terminaran de comer, ambos se dieron una ducha junta para quitar los restos de harina y chocolate de sus cuerpos. Todo su cuerpo se estremecía en tan solo pensar en Louis, simplemente en pensar en su nombre sentía un gran impulso de suspirar como lo había hecho una vez a sus quince años mientras espiaba a Louis cambiarse la camisa en su habitación o cuando seimaginaba como se sentiría besarlo. Casi rió por recordar su adolescencia, era sumamente estúpido no cabía duda alguna.
Harry metió un puñado de palomitas a su boca y miro con detenimiento cada escena de la película en la televisión.
La película de suspenso reclamaba mucho de su atención y se sentía totalmente a gusto de poder ver una película. Demonios. La última vez que había visto una fue hace 1 año antes de que hubieran lanzado su primer disco al mercado. Luego de eso no había tenido tiempo de lograr ver una y en los breves descansos que tenía no los usaba para eso realmente.
Observo como la chica de la película cogía un cuchillo de su cocina y entraba en el sótano para "investigar" el sonido proveniente del lugar. Harry negó con su cabeza ante la estupidez de la protagonista y sentía la necesidad de golpearla, si tan solo pudiera...
La chica se detuvo cuando su móvil comenzó a sonar y contesto para advertir a su novio sobre lo ocurrido. Los ojos del rizado estaban tan abiertos como dos bolas de golf y mordía su labio mientras la chica abría un viejo armario para encontrar nada.
La molesta música de fondo le ponía los pelos de punta y sus nervios aumentaron, la protagonista estaba segura que no había nada y justo cuando salía de la habitación el asesino la agarro por su garganta y clavo un cuchillo profundamente en su vientre. Grito fuertemente mientras caía en el piso y el asesino la estrangulaba con sus grandes manos.
Harry salto del sofá esparciendo algunas palomitas en el suelo.
-¡Sabia que pasaría eso! -exclamo eufórico- Que idiota, tenía que ser rubia -bufo y volvió a sentarse.
-¿Tienes algo contra las rubias? -pregunto Louis a su lado, ¡casi se había olvidado de él! Estaba tan absorto en la película que no recordaba la presencia de él.
-No, en absoluto, solo que conozco muchas que son estúpidas -señalo a la protagonista, ya muerta- Solo mírala ¿Quien entra en su sótano para ver que o quien está? -resoplo fastidiado- Yo correría y llamaría a la policía.
Louis rió y rodeo sus hombros con un brazo.
-Vale, tranquilo. Solo es una película.
-Una donde la protagonista tiene los pechos más grandes que su cerebro.
-Me gusta como es.
Harry lo miro con las cejas arqueadas.
-Típico, les gustan solo las de pechos gigantes pero sin nada en su cabeza ¿no es cierto?
-Tengo que admitir que esa actriz es sexy, tengo una debilidad por las actrices rubias -confeso. Harry arqueo una ceja y frunció el ceño.
-Pero... -continuo el- También me gustan los hombres, especialmente los cantantes con cabello rizado. Sobre todo los que llevan el nombre de Harry.
Sonrió y se inclino para besarlo. El lo levanto y lo sentó a horcajadas en su regazo, acariciando su cuello con el puente de su nariz.
-No quiero seguir viendo esta película -murmuro el cerca de su oído- Prefiero calentarme el cuerpo un rato.
-Solo piensas en sexo ¿cierto?
-Solo cuando tu estas cerca -beso su barbilla y subió la camisa de este.
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UN MES DE PLACER (Larry Stylinson) Terminada
RomanceLouis tiene una venganza que cumplir en contra de Dave Styles, así que toma a su bello hijo Harry Styles por un mes, un mes de placer.