La multitud de gente en el Barrio Fránces de Doncaster era sorprendentemente espesa, las calles estaban transitadas por diferentes coches y las aceras llenas de personas por doquier. A Harry no le hubiese sorprendido si alguien se desmayaba entre las personas. Louis paso su brazo por los hombros de Harry y lo acerco mas a su cuerpo. Se sentía tan genial poder caminar con el y reír como si en verdad fueran una pareja. Ojála. El suspiro y le sonrío cuando él dijo algo, cerro un poco su chaqueta por el frío que empezaba a colarse por su piel dándole escalofríos.
-Hace frío -murmuro Harry.
-Ni que lo digas, ¿quién diría que Doncaster estaría tan frío? Siempre pensé que era mas un lugar cálido que frío.
Harry asintió y señalo con su dedo un local.
-¡Mira, Starbucks! -dijo el rizado sonriente.
Louis pellizco su mejilla y lo llevo hasta el local.
-Pareces un niño pequeño emocionado por su dulce -le dijo divertido.
-Te digo, nunca creí emocionarme tanto en encontrar un Starbucks acá. Siempre ha sido mi delirio y sin ofender, pero estar dos semanas encerrado en tu casa no me ayudaban en nada.
-Pero no pones resistencia alguna, sabes que te gusta cher -guiño su ojo y pidió un Moccacino y un café solo, junto a una magdalena de chocolate.
Harry le dio un mordisco a la magdalena y degusto su sabor.
-Hmm, no es tan buena como las de Diana pero es algo.
-Nadie mejor que Diana.
-Claro que si, cocinas como profesional -señalo- sería genial que pudiera llevarte a ti o a Diana hasta Londres -dejo escapar un suspiro y su sonrisa se torno en una mueca.
Louis solo lo escucho, sin responder.
El también deseaba poder irse con el.
-¿Te gustan los caballos? -Harry lo miro con un brillo en los ojos, eso le respondía a todo.
-Me encantan.
-Vamos, te mostrare algo -sonrío y sostuvo su mano.
Caminaron unos cuantos minutos hasta llegar a un lugar donde había unos cuantos puestos donde había mujeres con sus tarjetas de Tarot y pinturas de artes, algunas tiendas de tatuajes y piercing y por último paseos en caballos. La cara de Harry se ilumino a ver los caballos atados a un carruaje, siempre le habían encantado los carruajes. Apretó la mano de Louis en la suya y luego de haber pagado ambos se montaron en el carruaje. Cuando el caballo comenzó a andar Harry miraba fascinado el paisaje. Aunque estaba todo un poco oscuro lograba ver gran parte. Sonrío. Louis era tan considerado con el, generoso, amable y además era un amor.
-Gracias -susurro y apoyo su cabeza de su hombro.
-No tienes porque agradecerlo, cher -sonrío.
Estaba completamente enamorado de él, en su interior aquella declaración lo hacía sentir tan cálido y a gusto con el mismo.
"Cuando se ama, el corazón es el que juzga" le había dicho una vez su profesora de Literatura. Se aseguraba que Louis sentiría lo mismo y decidió dar el primer paso. Se lo diría. Así tal vez ambos podrían comenzar una vida...juntos.
Cuando el caballo se detuvo Louis y lo ayudo a bajarse, Harry se le abalanzo encima y le dio un beso. El casi cae ante la sorpresa y respondió al beso pasando sus manos por su cintura.
-Debería darte un paseo en caballo mas a menudo -dijo divertido.
-Louis...
-¿Si?
Harry tomo aliento y se dio fuerzas para decir esas dos simples palabras. Todo cambiaría, de eso estaba seguro pero esperaba que fuera para bien.
-Te amo.El ambiente era afilado, la tensión que había presente era notable. Louis trago saliva y soltó a Harry. Lo miro sin comprenderlo y las ilusiones del rizado se destruyeron. El comenzó a caminar sin mirarlo. Le había dicho que le amaba. Eso era exactamente lo que el quería ¿no? el lo amaba de todos modos. Siguió caminando hasta escuchar los suaves y rápidos pasos de Harry tras el. Maldición. ¿Por que tenía que amarlo? ¿porque tenia que amar a Harry? No se lo merecía, se suponía que lo usaba como un juguete sexual y mas nada, no tenía planeado que el también lo amara.
-¡Louis! -lo escucho gritar desde atrás. Louis apretó la mandíbula y siguió caminando sin responder a los llamados de el. Sabia que tenia que alejarlo antes de que eso pasara. Lo sabia muy bien.
Harry siguió a Louis casi corriendo, caminaba rápido y no miraba hacia atrás. Era un estúpido. ¿Cómo creía que el lo amaría? Bufo y volvió a llamarlo intentando detenerlo. Debías callarte Harry, pensó, tu y tus estúpidas manías de hacer cosas antes de tiempo. El corazón bombeaba sangre rápido y su respiración se agito aun mas con el frío. Cuando ambos entraron en el estacionamiento donde esta el coche de Louis, Harry suspiro, podría hablar con el. Louis abrió la puerta del copiloto, aun sin mirarlo y entro en el lado del piloto rápidamente. Aferro sus manos al volante e intento respirar calmado, miro de soslayo la sombra de Harry entrar al coche.
-Louis... -dijo Harry en voz baja- Mírame.
El soltó el aire con lentitud y se limito de mirar al frente. Temía que al mirar a sus ojos verdes lo abrazaría y lo besaría como si nada.
-Louis, lo siento, solo quería decirte lo que siento. No podía ocultarlo por siempre y me carcomía por dentro...
-Te dije que no confundieras el sexo con el amor -respondió con voz baja y gruesa- Te lo dije claro, no quería que esto pasara.
-No es mi culpa, no decido a quien amar.
-¡Deja de utilizar la maldita palabra amor!
Los ojos de el se tornaron obscuros, Harry se estremeció al verlo molesto. Quiso llorar y golpearlo.
-No quería que el amor se involucrara, solo quería tener sexo contigo.
-Todo es tu culpa, eres amable y romántico conmigo. Hasta cuando fue mi primera vez -le recordó- no fuiste salvaje, fuiste amable.
El negó y resoplo.
-Fue en ese momento, nunca soy amable o romántico. Ya no. Debiste controlar tus emociones.
-¿Así que me estas sermoneando por enamorarme? -bufo- Eres un estúpido.
-¡Aquí lo único estúpido son tus sentimientos! -espeto con fuerza y quiso tragarse sus palabras cuando observo como Harry mostraba decepción y tristeza en sus ojos. El cerro los ojos y salió de estacionamiento con rapidez.
El trayecto hasta su casa se había hecho mas largo e incómodo de que él creía. Harry no lo había vuelto a mirar o hablar por media hora. Si existieran premios por las idioteces que se pueden decir cuando se está molesto, el se ganaría un premio. De algo estaba seguro Harry se iría después de esto y el volvería a ser normal y retomar su proyecto y vida. Aparco su coche y Harry salió de el rápido, Louis abrió la puerta de la casa y dejo que Harry entrara. Cuando se volvió hacia el pudo percibir su tristeza en aquellos ojos verdes.
-¿Te irás? -pregunto él. Harry negó con su cabeza.
-Pediste que pasara un mes contigo, eso haré. Todavía faltan dos semanas.
El cerro los ojos y gruño por lo bajo. Era demasiado terco.
-Buenas noches -dijo Harry y se fue caminando.
Decidió convencerlo de irse antes de que Harry siguiera sufriendo o el terminara herido otra vez. Era lo mejor para ambos.La noche había transcurrido lenta y tortuosa para Harry. No logro dormir mas de 3 horas seguida, sus problemas de insomnio volvieron después de la tarde anterior. El culpable tenía nombre y apellido. Louis Tomlinson. Si solamente Harry no hubiese sido tan estúpido como para soltarle la bomba, tal vez nunca se hubieran peleado y nadie saldría herido. Logro ver la hora en el reloj de pared que marcaba las nueve con once minutos. Suspiro y se obligo a si mismo a levantarse de la cama.
Tal vez Louis y el volvieran a la normalidad y harían como si no pasara nada hasta que terminara el mes. Hasta podría convencerlo de que el también lo amaba. Negó ante su testarudez, debía irse, lo sabia pero aun así quiso quedarse. Tenia la esperanza de que todo habría sido un malentendido y Louis olvidara que el le confeso que lo amaba. Aquella idea le dolía aun mas de lo que pensaba.
Cuando entro al cuarto de baño se despojo la ropa y miro su rostro en el espejo. Sus ojos estaban hinchados y rojizos aun cuando no se había permitido llorar, tenia unas leves bolsas bajo ellos por su falta de sueño y sus labios estaban completamente pálidos y quebrados. Obviamente no parecía el mismo Harry de unas noches atrás, en ese momento se recordaba como el adolescente que lloraba por la falta de atención de su primer amor. Irónico. Unos 6 años atrás se encontraba en la misma situación con Louis solo que el no estaba consciente de su presencia en aquel momento.
Se dio una ducha rápida y se cambio de ropa para encontrarse con Louis. Por intuición sabia que estaba en la cocina. Respiro unas cuantas veces y se paro en seco al escuchar una risa masculina desconocida.
¿Qué mierda...?
Sintió la sangre abandonar su cuerpo y un nudo en su garganta al escuchar la voz suave del hombre. Avanzo a la cocina y se quedo parada en el umbral para ver a Louis solo con unos vaqueros oscuros y un hombre castaño y hermoso usando su camisa.
Ambos intercambiaron miradas y en su interior lo que quedaba se había roto por completo. Seguía amándolo, pero su sangre hervía de rabia y sentía la necesidad de matarlo a golpes.
-Harry... -murmuro Louis.
Harry cerro sus ojos y quiso que la tierra se lo tragara ahí mismo sin que dejara algún rastro de el.
-Este es Liam. Liam el es Harry.
El ojimiel se levanto dejando ver sus kilométricas y bien torneadas piernas, su perfecta cabellera castaña caía en ondas y este esbozo una pequeña sonrisa. Por supuesto era todo lo contrario de el. Cuando este estiro su mano Harry la ignoro, paso por su lado y se planto enfrente de Louis.
-Puedo explicarlo...
-Tu, Louis Tomlinson, eres el cabrón mas grande del mundo. Mi papa siempre tuvo razón en ti, eres un jodido infeliz -apretó sus labios hasta convertirlos en una linea. Una lágrima sin poder contenerla se escapo de sus ojos y resbalo por su mejilla- No solo eres eso, eres patético. ¿En verdad crees que me trago eso de que te acostaste con el? Se que no eres capaz, teníamos un vinculo especial y lo sabes; si solamente querías que me fueras tenias que pedirlo, no tenías porque crear este estúpido escenario -suspiro- En estos momentos te odio como a nadie ¿estás feliz con eso?
Bufo.
-Por supuesto que lo estás -murmuro- en realidad creí que podías amarme aunque sea un poco, lo creí.
Louis se quedo callado mientras Liam solo los miraba. El rizado espero que Louis hablara y cuando no lo hizo se limito a limpiarse las lágrimas y negar con su cabeza.
-Al menos conseguiste tu objetivo, fui tu juguete sexual. Iré a empacar mis cosas, au revoir.*
Harry dejo la habitación y Louis no parpadeo durante un minuto. Lo había lastimado mas de lo que pensaba. No había pensado en como se sentirá cuando había llamado a Liam.
El castaño se le acerco y lo miro culpable.
-Es muy inteligente
-Mas de lo que yo podría ser.
-Y eres un imbécil.
Asintió.
-Lo se, uno de primera.
-Eres peor que Zayn, en estos momento lo prefiero a él antes que a ti. Pensé que lo amabas -el dejo salir un suspiro y miro a su amigo.
-Lo hago.
-¿Por qué lo hiciste?
El movió su cabeza.
-Te dije, es mejor para ambos. Además soy un bastardo egoísta -rió amargado- Me preocupo mas de mi mismo que del hombre de mi vida.
-¿No intentaras detenerlo? -el se negó.
-Es lo mejor...
Liam resoplo.
-Espero que sigas pensando lo mismo en unos días, sabía que ayudarte en esto sería una idiotez y eso fue. Te daré máximo una semana hasta que te arrepientas.
-No lo haré, créeme.
O eso creía él que no haría, cuando Harry estuviera lejos de su casa volvería a tener su mente despejada, eso esperaba.
*Au revoir (francés): 'Adiós' o 'Hasta luego
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UN MES DE PLACER (Larry Stylinson) Terminada
RomanceLouis tiene una venganza que cumplir en contra de Dave Styles, así que toma a su bello hijo Harry Styles por un mes, un mes de placer.