Narra Key:
Nuestro compañeros estaban obligados a levantarse a las nueve, así que para que no nos viesen e hiciesen preguntas después, la Directora Braun y el Profesor Ramos nos dijo a Justin y a mi que estuviésemos en la entrada del campamento a las ocho y media.
Puse el despertador a las ocho y recogí lo que me faltaba por meter en la maleta, que era poco ya que la mayoría de las cosas las recogí la noche anterior, con ayuda de Jessica y Beth.
Jessica me había pedido perdón nada más que volví, me dijo que había sido una estúpida y que no tenía derecho para juzgar a Justin antes de que fuésemos novios o cualquier cosa, cosa en la que le daba oda la razón, menos lo que era estúpida.
Abracé a Beth y Jessica, quienes me dieron un largo abrazo y fuerte. Salí con mis cosas de la cabaña y bajé los escalones, encontrándome con Justin ahí. Había quedado unos minutos antes para poder hablar solos y tranquilamente, era nuestro último deseo.
"Entonces, ¿tienes pensado que vas a hacer ya?" Pregunto mientras andamos lentamente a nuestro punto de encuentro con el profesor y la directora.
"¿Y los buenos días?" Me dice divertido, sonriendo con media boca. Al parecer se le había hinchado tanto el labio que ya no podía ni moverlo del dolor.
"Buenos días." Dije con una sonrisa y fui a besarle en la mejilla, por lo de su gran herida, pero giró la cara y a pesar del pequeño jadeo que ahogó, siguió presionando sus labios contra los míos, parándonos a mitad de camino mientras él soltaba su maleta para posarme una mano detrás de la nuca, profundizando el beso.
Una vez nuestro labios separados, juntamos las frentes, hizo una mueca de dolor. "No hacía falta." Susurré.
"Pero yo quería." Negó con la cabeza.
Seguimos andando, cada uno agarrado de su maleta, sin darnos la mano y llegamos a dónde habíamos quedado. Miré el reloj de mi muñeca. Teníamos unos minutos aún.
"Cuéntame." Le dije, refiriéndome a lo anterior.
"Pues no lo sé. Está claro que no voy a aparecer por casa, daré vueltas, no sé, quizás iré a un hotel, pero no importa." Dijo con indiferencia. "No es la primera vez que hago ésto."
"Ya me dirás, supongo..." Murmuré. "Ya que tenemos unos días libres, no sé, podríamos vernos si quieres." Dije en un tono más alto y algo tímida, no sé por qué, era más atrevida que ésto.
"¿Qué te gusta hacer?" Me pregunta, a la vez que sonríe y su mirada se desvía por encima de mí, la sonrisa desaparece, por lo que me imagino que los profesores están viniendo.
"Buenos días, chicos." Dice la Directora Braun.
"Los mejores de mi vida." Me permito responder. Me mira con un aire raro, como desconcertada pero no le da importancia.
"El autobús está a punto de llegar, así que, si me permitís, voy a proceder a deciros unas cuantas cosas." Continúa la directora. Nadie habla así que se toma la libertad de seguir. "Tus padres han reaccionado de una forma que me ha sorprendido realmente, Key."
Alzo una ceja sin mover ningún músculo más que los que son necesarios para esa acción. "¿Qué es lo que le ha sorprendido?"
"Pues sus padres, señorita, han amenazado con poner una denuncia al centro por este acto y nos ha acusado de violadores de la intimidad por intentar separaros." Responde bastante irritado el Profesor Ramos.
No muevo un músculo de la cara, mi ceja sigue arriba, noto a Justin rígido. Yo tampoco me lo esperaba, para ser sinceros, pero demuestro ser una roca y que me esperaba aquello, con tal de joderle un poco a ellos.
ESTÁS LEYENDO
Unexpected
FanfictionJustin Bieber es un chico con mala fama por Stratford, su pueblo, pero en cambio, su hermano Bryce Bieber es un chico educado, bueno y estudioso, lo que muchos llaman un nerd y además es el centro de todas las bromas de la escuela, a pesar de que su...