II

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Al escuchar ese grito subí rápidamente al cuarto de Maite.

-¿Qué pasó?-Les pregunte a Maite y Anastacia.

-Hay una araña-Dijo Maite asustada, suspire y entré al cuarto.

Al encontrar a la arañita la agarré y la escondí en mi sudadera, salí del cuarto y me fui al mío.

Me coloqué unos shorts​ no muy cortos con estampado de media lunas de color negro, una camiseta de tiras pegada negra con tiras verde fosforescente y con la imagen de un gatito mirando la luna y mis pantuflas negras con puntos blancos.

Sonó el timbre y bajé, al abrir vi a unas niñas, a un chico y al idiota de la secundaria, las niñas entraron y cerré la puerta antes de que el idiota hablara.

Después de avisarles a las trillizas que sus amigas ya habían llegado me encerré en mi habitación y me acosté en la cama escuchando música con mis audífonos.

Un rato después logre ver como la puerta de mi habitación se abría lentamente dejándome ver una cabellera castaña y otra pelirroja, me quité los audífonos y me incorporé para ver bien a las dos niñas.

-¿Qué pasó?-Pregunté.

-No queremos dormir con mis hermanas-Respondió Rochelle.

-¿Podemos dormir aquí?-Pregunto la pelirroja tímida.

-Claro-Respondí sonriendo, acomodé unos dos colchones en el piso y me senté en uno de esos colchones.

-¿Por qué no estabas en la pijamada?-Me preguntó la pelirroja.

-Ahmm-¿Le digo la verdad? No creo que sea buena idea-Porque es su pijamada-Mentí.

  Si estaba ahí Maite y Ana me tratarían de esclava o le dirían a mi padre para que me encerrara, no exagero.

-¿Tú nos puedes llevar a nosotras a la escuela mañana?-Me pregunto Roche.

-Si tu amiga esta de acuerdo sí-Dije mirando a la niña.

-Soy Mérida y sí me gustaría que tú me llevaras-Dijo Mérida-¿Cómo te llamas?.

-Soy Mackenzie, ya son las diez a dormir mañana hay que levantarse temprano-Dije levantándome-¿En qué cama quieren dormir?.

-Quiero esta-Dijo Rochelle lanzándose a uno de los colchones del piso.

-Y yo esta-Dijo Mérida imitando a Rochelle pero en el otro colchón del piso.

-Okey-Dije acostándome en mi cama-Buenas noches niñas.

-Buenas noches-Dijeron al mismo tiempo.

Apagué la luz y me dormí, me desperté y vi la hora 06:00 am me levante y desperté a Mérida​ y a Roche.

Me cambie y me puse un jean negro, una camisa gris claro con la palabra "Only" en negro, una sudadera negra y mis converse negras también, todo mi cabello suelto y sin maquillaje.

Al llegar a la escuela de las niñas con Mérida y Roche en mi moto un montón de niños y niñas se nos quedaron viendo, dejé a las niñas y me fui a mi secundaria.

Fui a mi salón y me senté en el mismo lugar de ayer cuando una castaña se me acerca ¿Y desde cuándo alguien se me acerca?

-Hola soy Caroline-Dijo la castaña ¿Desde cuándo me hablan?.

-Hola Caroline soy Mackenzie y yo no vine a hacer amigas así que adiós-Dije sonriendo falsamente, ella me miró sorprendida y se fue a sentar.

Llegó la pitufina.

-¿Qué quieres pitufina? ¿No te bastó lo de ayer?-Dije.

-¡No me digas pitufina!-Gritó molesta y todos nos observaron.

-Eres chiquita, rubia, ojos azules, te vistes toda de azul excepto por tu gorro y zapatos que son blancos literalmente pareces pitufina-Dije y todos empezaron a reír.

-Vas a ver-Me amenazó y salió del salón.

Un momento ella comparte esta clase conmigo, ñeh no es mi problema.

Después de clases en la cafetería se me acercó el idiota.

-Hola linda.

-Agh ¿Qué quieres?-Pregunte fastidiada.

-No te hagas la ruda, sé que quieres llamar mi atención-Dijo guiñándome un ojo ¿Y este quién se cree que soy?.

-¿Para qué querría llamar tu atención?-Pregunte confundida.

-Para que me enamore de ti-Respondió vanidoso.

-Ajá si claro, bueno adiós me voy-Dije levantándome y caminando fuera de la cafetería.

Iba por uno de los pasillos cuando alguien me pega a un casillero... era el idiota este que ni sé el nombre.

Colocó sus dos manos a los lados de mi cabeza, acercándose a mí, acorralándome.

-Apártate de una vez idiota-Ordené.

-Primero quiero un beso-Dijo mirando mis labios.

-Pues mala suerte conmigo solo podrías obtener un golpe-Dije seria.

-Linda no hagas esto difícil, yo sé que te gusto admitelo-Sí claro, él me gusta y soy un unicornio morado.

-Ya quisieras-Dije riendo.

-Ya déjala Josh-Dijo una pelinegra al lado de nosotros.

-No te metas Susana-Dijo molesto.

-Deja a esa chica o le digo a Alaska lo que hiciste-Lo amenazó, él suspiró molesto y se alejó de mí.

-Gracias-Le dije a la pelinegra y me fui a las gradas.

En las gradas vi el entrenamiento del equipo de fútbol, cuando uno de los chicos me ve y se me acerca, es el mismo chico al que le quite el yogurt ayer.

-Hola Mackenzie-Me saludo... Ammm ¿Eran? ¿Erman? No, Erik.

-Hola Erik-Saludo a el rubio.

-¿Qué hacés?-¿Somos amigos? No me acuerdo de tener amigos.

-Perdón si soy directa pero no somos amigos, yo no tengo amigos-Dije.

-Bueno ya tienes uno-Dijo sonriendo.

-No lo creo-Dije levantándome.

-Hey vamos dame una oportunidad-Me dijo agarrándome la mano.

-Como quieras pero suéltame-Dije soltándome de su agarre y caminando fuera de ahí, no será mi amigo pero me quería ir.

.....

Entro en mi cuarto y no encuentro mi cajita decorada como el espacio, mis hermanas se la volvieron a llevar junto con mi cargador y mi celular esta muerto.

Me miro al espejo y recuerdo a mi madre, busco entre mis cajones una de mis múltiples navajas y voy al baño, me empiezo a cortar mis brazos mientras miro mi reflejo, sigo haciéndolo hasta que siento la sangre corriendo por mis brazos y con eso también siento un gran alivio.

¿Por qué hago esto? Eso lo entenderán más tarde, veo todo negro y dejó de respirar.

Is My LifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora