LEJOS DE FRIN

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Esa carta que llegó en plena crisis, fue como gasolina especial. Frin parecía el de la moto dep circo, caminaba por las paredes. No fue tanto el premio que agregaron, porque a Frin se le ocurrió pedir seis entradas en el cine, y seis entradas tampoco son nada del otro mundo pero el impulso de la carta de Alma. Ella estaba ahí, ayudandolos,dándoles ánimo. ¿Como iban a dejarse vencer? ¿Quien había pensado esa ridiculez?

Hubo otra ronda de ventas familiares, y algunas de las cartas largas de los parientes eran atajadas por chistes, devueltas en abrazos y saltos de tal entusiasmo que hasta quedaban agradecidos de haber comprado ese número extra que los dejaba a las puertas de ganar una pelota de Fútbol y seis entradas de cine. Eso pensó la tía de Frin: "¿Y que diablos hago con las seis entradas para el cine y qué me importa la pelota de fútbol? Se las voy a terminar regalando a Ellos". Pero quedo Feliz de haberles comprado esos números. Los chicos le habían alegrado la tarde. Saltaron, gritaron. ¡Grande,tía, grande! ¡Eres genial!  Y una vecina que siempre se asomaba por el tapial para conversar con ka tía preguntó por qué era ese alboroto, Y ahí nomas le chantaron cuatro números. Además la tía le pasó los datos de algunos de sus clientes, fue un golpe maestro. Eran personas del barrio, les gustaban las apuestas , y decir que venían de parte de la tía era la llave maestra. Ni uno solo se negó. A Frin se le ocurrió un plan, sobre que responder si ferraro se metía, cosa que, por supuesto fue lo primero que ocurrió.

-¿Otra vez con la rifita de los noviecitos? (Ferraro).

- No es la misma, pero a ti no te puedo vender (Arno).

-¡...! ¿Que dices?

- No Ferraro, que no te puedo vender.

-¿Cómo que no? ¿Y por qué?

- Porque Frin nos dijo que no te vendieramos.

-¡¿Y qué se mete ese carajo?!

- No sé, bueno tengo que seguir...

- Espera un minuto.

- En serio, Ferraro,tenemos un montón para vender todavía.

- Espera te dije...(Confundido). A ver, muestramelas.

- No, en serio, Ferraro, Frin no quiere.

-¡Y que me importa lo que diga Frin! Muestramelas.

- Pero si te vendo a ti,me voy a quedar sin para los demás, en serio.

Y Ferraro picó, picó,picó, como un pescadito. Compro todos los números que se le antojaron. Sr corrió esa noticia, porque enseguida se encargó de pavonearse con que nadie más iba a participar en la rifa porque el iba a agotar todos los números. Entonces ocurrió un fenómeno:a nadie le importo Frin,Alma, ni si eran computadoras, ni para que era la rifa ni nada: se convirtió en una competencia en sí misma, como si fueran figuras de colección o entradas paea un club secreto.  El asunto pasó a ser quienes tenían números estaban "adentro" y los que no conseguían estaban "afuera". ¿"Adentro "y "afuera" de qué?  Nadie se lo cuestionaba.  Frin se dio cuenta de que convenía dejar de ofrecer los números y más bien simular que quedaban pocos.

- Che,Frin, yo vengo de parte de Alberto, de cuarto...(un chico de otra salón).

-¿Y?

- No, que dijo que me podías vender dos.

-Uh,pero si yo le pedí que no le dijera a nadie (Frin).

- Un número, por lo menos, Frin,dale, en serio (El chico).

-¿Que hacemos Lynko? (Frin).

-Miren que soy amigo de Alberto, de verdad (el chico).

-Bueno,Frin,vendele uno aunque sea; pero prometenos que no le dices a nadie (Lynko).

-¡No,más bien! Tranquis con eso.

-Mira,te vendo los dos...(Frin).

-¡...! (Al chico se le ilumina la cara).

-¡No,Frin! ¡Dos no! (Lynko).

-...Tranquilo, Lynko,después vemos cómo hacemos.

-Chicos, esto, ¿cuando se sortea?

-Todavía no sabemos; pero si no quieres....

-¡No!,¡para nada! Total, ¿que apuro tengo?

-Es que ni sabemos todavía, ¿Seguro que no quieres devolverlos? (Lynko seño fruncido).

- todo bien, chicos; cuando sorteen me avisan, y listo. Chaaauuu.