Se sentó en la cama y observó todo a su alrededor. Se acordó de las tantas veces que Erick se metia entre ellos dos cuándo a la noche lo atacaba alguna pesadilla. Sonrió y saco la valija de abajo de la cama, metió algunas prendas y cosas personales y la cerró. Cerro los ojos aguantandose las ganas de llorar, tomó una hoja de papel y aunque su mano temblaba empezó a escribir las primeras líneas.
"Quizás pienses que soy un cobarde, que tome la decisión
más fácil pero no fue así. Creo que es la única manera de que Erick vuelva a casa"Seco sus lágrimas y continuo escribiendo, sabía que Nina no iba entender el porque de su accionar.
"Todo lo que hago es por ustedes dos porque los amo más que mi vida. Y no me importa nada con tal de que vos y Erick estén juntos. A veces hay que sacrificar cosas importantes para que las personas que más amamos sean felices y yo los sacrifique a ustedes, a mi familia."
Ya estaba todo arreglado, la policia había podido contactarse con ella por una llamada que le había hecho a Nina.
"Nunca olvides cuánto te ame, pronto nos vamos a volver a encontrar, es una promesa"
Y se fue, dejando su hogar atrás. Sacrificó todo por la felicidad de Nina y de Erick. Ana no tenía límites y él lo sabía.
[· · ·]
Y al llegar a casa Nina se encontró con que no había nadie, Gastón no estaba. Sobre la mesa de la cocina había un papel, una carta. La leyó y no pudo evitar llorar. Rápidamente marco el número del Sargento Arias y le explicó la situación. Él le dijo que esperaba a que Ana se contactara con ella y le contará de que Gastón se había ido y entonces ella quizás le devolvería a Erick. Pero ella también necesitaba a Gastón.