Una Persona Especial (Mpreg)

Cap. 2

Hola queridos :D les dije que volvería.

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-¿Ya terminaste?

-Sip, podemos irnos.

Le di un último vistazo en el espejo fijándome en que mi cabello estuviera bien peinado. Una vez revisado salí, Brandon en medio de mi sala mostrándome la pantalla de su teléfono bloqueada. Que mostraba que estábamos atrasados por casi una hora.

-emm... ¿Lindo fondo de galaxia? –sonreí apenado. Él rodó los ojos y se dirigió a la salida.

-Tenemos que irnos ¡YA!

Tomé las llaves me despedí de mi perro rápidamente y fui tras mi amigo. Al llegar al auto buscamos por GPS una ruta más corta y sin tráfico, o al menos lo segundo. No hubo mucha suerte, y no teníamos más tiempo que perder así que tomamos la primera que nos sugirió el aparato. Brandon enviaba mensajes, seguro le explicándole a Noah que llegaríamos tarde.

-este... al menos es solo el ensayo, ¿te imaginas la loco que sería si el día de la boda también llegamos tarde? –no le causó gracia en absoluto y en su lugar me estremecí por su mirada furiosa. –Bueno, me callo, pero al menos admite que Noah pudo hacer su boda en un salón más cercano.

-deja de dar excusas, se nos hizo tarde por culpa tuya. Tal vez a ti te dé igual porque solo eres un invitado más a la boda. Pero yo soy el padrino, si le fallo en este ensayo, ambos podrían dudar de mí y relevarme de su puesto.

-Dé vuelta a la izquierda en doscientos metros. –dijo la señorita del GPS. Por un par de segundos la conversación se detuvo.

La boda de Noah es en dos semanas, hoy es el ensayo general. Me aproveché de que soy yo el que tiene auto y no le presté atención a los tiempos. Ahora disculparme no arreglaría gran cosa, podría disipar su enojo de otra manera.

-Bueno... en todo caso, sigue siendo increíble que Noah se vaya a casar, y todavía más extraño, con una chica de su edad. –trató de retener una carcajada pero no pudo. –Hiciste bien en presentarle a Amelia.

-Si... aunque es un poco raro ¿sabes? Es mi mejor amigo, y mi casi hermana, que ambos se casen. Pero claro, estoy feliz por ellos.

-Debes estar orgulloso de que hiciste que sentaran cabeza. –un pequeño pensamiento vino a mí. -¿Y tú para cuándo? –se rio otra vez, detecté un poco de nervios en eso.

-No por el momento, tal vez en unos años.

Dejamos hasta ahí la plática y entramos al estacionamiento del salón.

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Mientras Noah y Amelia decían sus votos, Brandon los observaba con una mirada soñadora, dirá mucho sobre las ventajas de la soltería, pero viéndolo ahora puedo saber que en el fondo también quiere establecerse. Los pocos familiares e invitados los ven con ternura, yo me aburro un poco, aunque no pienso ser maleducado viendo mi teléfono como otros.

Sentí como si alguien me estuviera observando, voltee a los alrededores, hasta que di con la mirada de la chica a lado de la novia, o sea, la dama de honor.

Era una chica gordita, de cabello rizado, y unos hermosos ojos avellana. Era muy bonita en realidad, la saludé para que supiera que noté su mirada y ella me lo devolvió tímidamente.

Cuando terminó el ensayo, los comprometidos se acercaron a reclamarnos nuestro retraso.

-Lo siento, fue culpa mía, yo debía traer a Noah, y no respeté la hora. -el mencionado me miró mal pero no agregó ningún comentario.