Digimon Tamers: Una nueva amenaza

Capitulo XII: ¡Shogakumon se multiplica!

Sakuyamon comenzó a cantar, creando un campo a su alrededor y alrededor de Megagargomon para que pudieran bajar hacia donde el viento no era tan agresivo. Shogakumon los tomó de sorpresa y barrió con ambos mediante un ataque de tierra. Los digimons apenas y podían ver, lo que hacía mucho más difícil la batalla. Para colmo de males, Henry y Rika nunca pudieron congeniar en cuanto a sus ataques elementales, por lo que la batalla no sólo se pondría difícil, sino casi imposible..

Por otro lado, Justimon y Gallantmon resistieron la tormenta hasta que cesó su furia. El cielo aún no aclaraba, pero el viento ya no era tan feroz. Esto les hizo darse cuenta de que el digimundo estaba tan inestable que cualquier cambio brusco en la estructura de la data podría descomponer las uniones digitales y terminar con ese mundo.. Y por consiguiente, terminar con ellos.

Intentaron rodear a Shogakumon como la primera vez, pero al no tener a Sakuyamon y a Megagargomon, no tenían nada que distrajera al digimon de su ataque directo. Además de eso, Shogakumon contaba ahora con muchos tentáculos, que (Como comprobaron ellos al observar brevemente su ataque) dispersaban los datos de cualquier cosa que tocaran sus puntas.

Tanto Justimon con su espada y Gallantmon con su lanza, trataron de cortar esos tentáculos y aunque lograron privarlo de algunos, Shogakumon aún tenía decenas de ellos y ahora que estaba alerta de lo que querían hacer, el digimon se protegía mucho más. Esto les dificultaba bastante las cosas, porque a pesar de tener la certeza de que su armadura tenía cierta resistencia ante el contacto del D-Reaper, sabían que un golpe de esos tentáculos los debilitaría demasiado y perder su digievolución en un momento así era lo último que querían.

Estos cambios no solo afectaban al digimundo, también se notaban en el mundo real con climas atípicos, fallas en la red y cortes en el sistema de electricidad. Los demás tamers como Hirokazu y Kenta resolvieron al instante que el digimundo tenía que ver en eso, pero sus padres no los dejaron salir a investigar; ya demasiado se habían arriesgado antes. Juri y los pequeños Suzie, Ai y Makoto se quedaron muy preocupados en el parque, porque el cielo parecía muy inestable, pero de una forma sobrenatural y aterradora. El huevo canela que Juri sostenía se puso muy frío y Juri supo que algo andaba mal en el digimundo. Los chicos se volvieron asustados a la casa de Ai y Makoto, que no estaba lejos de ahí y Juri aprovechó para escabullirse sin ellos hacia dónde sabía que alguien le informaría de lo que estaba ocurriendo: Hypnos.

Mientras tanto en Hypnos, Tao intentaba saber lo que pasaba, mientras Yamaki se paseaba nervioso de un lado a otro, abriendo y cerrando su encendedor, como siempre solía hacer.

- No puedo saber que ocurre, el digimundo se desestabilizó demasiado y perdí la señal que tenía. – Le dijo Tao consternado

- No quiero creer que ellos fracasaron.. Les tengo demasiada fé como para no confiar en que los cuatro y sus digimons atravesaran ese portal de regreso en cualquier momento.

- Tienes razón, sé que ellos regresarán – Le dijo Tao, confiado – Esta desestabilización del digimundo debe ser causada por el reordenamiento de la información liberada por Shogakumon, estoy seguro.

-"Espero que sí, Wong.. Espero que tengas razón.."

- ¡Justimon, intentemos cortarlo por la mitad como hiciste con el agente D-Reaper aquella vez! – Gritó Gallantmon por encima del azote del viento y los ininterrumpidos ataques de Shogakumon – ¡Yo te cederé mi armadura!

- ¡Estás loco! ¡No quiero que haya otro más de estos! – Le contestó Justimon, también a los gritos, mientras esquivaba un tentáculo con gran rapidez - ¡No podemos arriesgarnos a que se siga reproduciendo como lo hizo antes!

Apenas y podían esquivar sus ataques, tratando de golpearlo lo más posible con la esperanza de que se debilitara.

Megagargomon y Sakuyamon estaban en la misma situación, con la diferencia de que no habían cortado ningún tentáculo del Shogakumon y ni siquiera habían podido golpearlo.

Henry y Rika no podían ponerse de acuerdo con una estrategia y apenas se hablaban: Aún pesaba el hecho ocurrido hacía ya algunas mañanas. Ambos intentaban reprimir esas emociones, ya que si no lograban vencer a Shogakumon, no podrían volver a sentir nada nunca más, ni por el otro ni por nadie..

Los tamers peleaban fieramente, intentando salvarse y salvar ambos mundos. Tao y Yamaki intentaban no desesperarse por no conseguir la conexión necesaria para saber que ocurría con los chicos y Juri corría preocupada hacia Hypnos con el huevo de Leomon en brazos..