Digimon Tamers: Una nueva amenaza

Capítulo VIII: El terrible Shogakumon

Rika salió como un maremoto de Hypnos y corrió rápidamente hacia el parque, justo el lugar en el que había estado con Ryo aquel día. Estaba realmente confundida, no sabía que hacer..

Se recostó contra un árbol y en un instante Renamon apareció, algo alejada de ella.

- Rika, ¿Qué ocurrió? ¿Por qué atacaste a Henry y a Terriermon?

- Yo.. No lo sé – Le dijo Rika, intentando evadir la pregunta

- Rika, sé que estás mintiendo. Soy tu Digimon camarada, puedes confiar en mí

- Desde que lo conocí.. Él me.. Llamó la atención. Y conforme lo fui conociendo, creo que..

- ¿Te enamoraste de él?

- No, yo.. – Pero Rika se quedó callada. No tenía qué responder a ello, porque nunca supo aclarar sus sentimientos por Henry,

De repente, Renamon desapareció y Rika miró hacia atrás para confirmar lo que pensaba: Alguien venía.

- Rika.. – Ryo se acercaba a ella y le extendió los brazos, como si fuera a abrazarla, pero Rika lo apartó.

- No, Ryo.. Yo.. – Rika no se sentía bien, no quería ocultarle nada a Ryo, pero pensó que debía acomodar sus ideas antes de hacer algo.

- Rika.. – Repitió Ryo, despacio, mirándola – No importa qué es, pero dime que ocurrió con Henry..

- ¡Nada ocurrió con Henry!

- Eres demasiado terca y orgullosa para decírmelo, pero puedo saber que algo te lastimó.. Dime qué pasó, Rika..

Rika lo miró y luego miró al suelo, pensando qué hacer. Ryo notó lo contrariada que estaba Rika e intentó nuevamente abrazarla, esta vez Rika también lo abrazó.

- No importa que haya pasado.. No tienes que decírmelo tampoco Rika.. Yo te amo y sólo quiero que estés bien

Rika no se sentía lista para decirle nada a Ryo y pensó quizá que se podía olvidar de todo el asunto y volver a estar bien con su novio. Debía contarle lo ocurrido, pero no ahora.

- Quiero estar sola un rato, mañana nos veremos en mi casa, ¿Sí?

- De acuerdo..

Al otro día en la mañana, Takato y Henry debían ir a la escuela. Takato le preguntó a Henry el porqué del ataque de Rika, a lo que Henry le respondió contándole lo ocurrido la noche anterior.

- Rika.. Ella me gusta desde hace mucho, Takato..

- ¿Y por qué nunca se lo dijiste?

- Nunca tuve en claro mis sentimientos hacia Rika.. Y nunca tuve el valor para decirle nada, creí que por su carácter, dejaríamos de ser amigos.. Sólo siendo su amigo me siento bien, realmente la quiero..

Llegaron a la escuela y debieron separarse, ya que seguían estando en salones diferentes.

Mientras, en Hypnos, Yamaki tomaba un descanso, bebiendo café. Miraba lo datos del digimon por enésima vez, pensando en cómo los humanos perjudicábamos no sólo el mundo en el que vivíamos, sino también otros mundos.. "Es tan grande nuestro parecido al cáncer" – Pensó Yamaki.. – "Hasta nacemos y crecemos de la misma forma que los tumores cancerígenos.. Es realmente deprimente.."

Miró sin pensar el monitor y casi se vuelca el café: Shogakumon estaba rompiendo la jaula digital en la que Tao lo había envuelto y trataba de salir.

Juri paseaba sola por el parque, muy contenta y sonriente, porque Tao Wong le había dicho que el huevo había sido afectado momentáneamente por el estado del digimundo, pero que estaría en perfectas condiciones ahora que Shogakumon había sido enjaulado. En el sitio donde Takato, Hirokazu y Kenta solían jugar al juego de cartas de Digimon, se encontró con Suzie, Ai y Makoto, que hablaban entre ellos y a Lopmon y a Impmon, que los observaban pacientemente.

- ¡Hola, chicos!

- ¡Hola, Juri-san! – Corearon los pequeños. Le tenían un gran afecto a Juri.

- Hola, Juri-sama – Le dijo, un mucho más sumiso Impmon. Él le tenía mucho respeto, porque había sido el responsable de la muerte de Leomon y se sentía culpable. Pero también se prestó gustosamente para que le extrajeran la información perteneciente a Leomon, que originó el digihuevo que Juri sostenía en ese momento.

- ¿A qué juegan?

- En este momento a nada.. Pensábamos en qué podemos jugar..

De pronto, se oscureció de una forma sobrenatural. No había nubes en el cielo, pero parecía como si el Sol se hubiese apagado. Los niños sintieron miedo y se acercaron a Juri, pero también ella estaba asustada. Impmon y Lopmon se pusieron en guardia, por cualquier cosa que pudiera ocurrir a continuación..