DNA|Jimin&Tú|

Capítulo 4

  —No, no, está bien. — sonreí. Rió. Comenzamos a hablar de todo un poco. Me invitó a salir a tomar aire. Caminamos por el campus, un rato, yo con muletas y con la ayuda de él. 

Sentí como resbalaba, pero él me sostuvo en sus brazos y tan cerca que sentía que mis labios rozaban con los de él... Me sonrió y me guiñó un ojo. Sentí mis mejillas encenderse. 

  —Eh... em.. — dije nerviosa — Lo siento— 

  —No te preocupes—Sonrió. Me tendió las muletas y me ayudó para acomodarme.—

  —Y... Am... — comenzamos a caminar — ¿Eres de buen promedio? 

  —Oh.. Claro que sí. — sonrió — ¿Y tú? 

  —Pues, es obvio, soy nerd... — suspiré — Nadie ama a los nerds. 

  —¡Hey Nerd! — me llamó J-Hope, el capitán de Basquet — Muy torpe tú no? Como siempre — rió. — Anda, vamos, contéstame, sé que tienes ganas — rió con sus amigos— Oh, pero es verdad... Sólo eres una debilucha, y que nadie te quiere, con razón tus padres te pusieron aquí, ellos nunca te quisieron ni te querrán. — Agaché mi mirada mientras apretaba mis labios.

  —Oye — habló Jimin — Déjala en paz. 

  —¿Sí no qué? 

  —Te las verás conmigo — dijo enfrentándolo. 

  —Jimin... No, déjalo, no vale la pena... Ya... Vamos — él miró por última vez a J-Hope y nos fuimos. 

  —No debes dejar que esos inútiles hablen así de ti. ____, tú vales mucho y ellos no pueden describirte de una forma en la cual no eres, te conozco a tan solo un día, pero sé como eres, lo siento aquí — señaló su corazón — presiento que te conozco de algún lugar... No estoy bromeando... 

  —Jimin... 

  —Siento que tú eres alguien muy cercana a mí. Siento que vives en mi mente todo el tiempo. 

  —¿Qué quieres decir?— Arrugué mi frente— 

  —Qué creo que tú eres la de mis sueños — suspiró.

  —¿Yo? Pero si sólo nos conocemos hace un día, ¿Cómo puedo estar en tus sueños, Jimin?

  —No lo sé... Por eso mismo, siento que nos conociéramos desde siempre. Entiendes? 

  —Sí, entiendo — asentí.— 

  —Y.. um... Creo que esto pasará lento — rió mirando mi pie. — lo siento, fue mi culpa.

  —No te preocupes... De verdad no fue nada — reí. — Y sí, yo también creo que pasará lento esto... — moví lentamente mi pie. 

  [...]

  Me aburría, estas semanas en la habitación. Sun Hee me contaba lo que pasaba y Jimin venía a visitarme. La enfermera me revisaba y decía que cada vez iba mejorando. Las muletas desaparecieron, pero mis sueños aún seguían permanentes en mi mente. 

  Esto se estaba volviendo una actividad semanal. Todas las noches sueño con él, no puedo dejar de pensar en sus ojos, los cuales me resultan muy parecidos al ver los de Jimin. No entiendo... ¿Qué es lo que me pasa? ¿Qué es lo que los sueños tratan de decirme? 

  Yo sólo sé, una respuesta... Y esa es... Creo que me estoy enamorando del hombre misterioso de mis sueños... Pero... ¿Dónde está él?

  Lo sentía cerca... y Aún más cuando Jimin estaba a mi lado. 

  Mis nervios aumentaban... Mi corazón latía muy rápido, al igual que en los sueños... Mis manos temblaban y no tengo explicación de lo que siento en mi cuerpo cuando lo veo a Jimin... 

  —Hey, qué tanto piensas, bella? — preguntó Sun Hee entrando a a habitación. Quité mi vista del techo y la miré. 

  —Sun Hee... — me apoyé con los codos — Estoy confundida...

  —¿Con qué? — preguntó mientras guardaba sus libros. 

  —Siento que el chico de mis sueños está cerca de mí... Y lo siento aún más cerca cuando Jimin está a mi lado.

  —Yo creo... Que él es el de tus sueños. ¿Qué color de ojos tiene tu hombre misterioso ? 

  —Verdes esmeraldas.— contesté segura.

  —Ahí lo tienes, los de Jimin son verdes esmeraldas...

  —Pero... No creo que sea él.. ¿Oh sí? 

  —Para mí, querida amiga, él es el chico de tus sueños misteriosos. Y También creo, que tú estás enamorada de alguien...— alzó ambas cejas.

  —¿Eh? ¿De Quién? — rió.

  —De Jimin, tontita.