Aria's POV
Me quedo casi sin aliento al escuchar la frase que acaba de pronunciar el Sr. Marson.
—¿Cómo que Sam Trunez está muerto? —pregunto con apenas un hilo de voz.
Él asiente y deja sobre la mesa una carpeta con un par de documentos dentro. La agarro con cuidado y despliego la tapa para poder ver bien los documentos que contiene. Cuando ya los tengo en mi poder, leo por encima lo que tienen escrito fijándome en una palabra subrayada en negrita.
—Suicidio... —susurro.
—Si, suicidio. —exclama el Sr. Marson—. Según el informe, Sam Trunez acabó con su vida ahorcándose en su propio desván.
—¿Que? —exclama esta vez Steven, que como yo, también está sorprendido—. Yo mismo le vi enfrente de la casa de Aria.
—Y usted mismo ha leído la carta firmada con su propio nombre. —continuo.
Se recuesta en su enorme silla y nos mira expectante a Steven y a mí.
—Mire Srta. Hamilton, no quiero tomarla por loca ni tampoco parecer un insensible con todo esto, pero usted misma ha visto el informe y ha leído lo que le sucedió a ese tipo.
—¿Y cómo explica la carta o el ataque que he sufrido hace apenas una hora? —pregunto furiosa— ¿Acaso cree que me lo he inventado?
El Sr. Marson me mira dudoso hasta que se apoya en el escritorio de madera para poder mirarme mejor.
—Mire Srta. Hamilton, yo no he querido decir eso, pero como comprenderá, ahora mismo no podemos hacer mucho más con este tema, quizás haya sido alguna broma de alguien que la conoce.
—¿Y alguien que conozco me quería clavar una navaja de broma también? —exclamo furiosa.
—Pero comprenda que no había testigos y que nadie ha visto a esa chica que usted ha descrito en la fiesta. Pero mire, para que esté más segura pondremos vigilancia en su casa las veinticuatro horas, y estará vigilada también cuando salga de casa.
Respiro un poco aliviada aunque no del todo, ya que presiento que el Sr. Marson piensa que todo esto me lo estoy inventando.
—Bien. —digo cortante—. Solo espero que no tenga que morir nadie de mi entorno para que usted verdaderamente empiece a tomar medidas serias.
Me levanto de la silla y junto con Steven salimos del despacho rodeado de ventanas hacia la salida. Ahora mismo únicamente me apetece meterme en la cama y dormir hasta que todo esto se pase por fin.
* * *
—Todo va a salir bien. —me consuela Steven una vez estamos enfrente de mi casa—. Estaré aquí para protegerte.
Me aferro fuerte a él ocultando mi rostro en su pecho y es entonces cuando noto como las lágrimas empiezan a brotar de mis ojos recorriendo mis mejillas.
—Pero es que tengo tanto miedo Steven, miedo de que os pueda pasar algo.
—Ahora mismo lo único que te debe preocupar es tu propia seguridad, no te preocupes por mí, ese cabrón no me hará nada a mí.
—No soportaría perderte Steven. —susurro desganada.
—No me perderás. —responde—. Ahora entra y duerme un poco.
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Alone ©
Teen FictionLIBRO 1 - Felix Guillen © 2014 Cuando Aria Hamilton, víctima de otra mudanza llega a Idaho junto a sus padres y a su hermano Ian, cree que sus días serán igual de monótonos que en sus institutos anteriores. Pero todo cambia cuando, por casualidades...