Cuando Camila dejó la universidad, bastante tarde por cierto, llegó a casa sintiendo el frío de la tarde al irse.
Una vez que terminó de cenar y de fingir que le fue de maravilla en clases ante la típica charla familiar, fue a su alcoba, gracias al cielo la ventana estaba cerrada y no planeaba abrirla.
Sí la abría seguramente vería a Lauren y era justo en lo que no quería pensar.
Se comenzó a despojar de su ropa para tomar un baño antes de dormirse, era divertido cuando Lauren la espiaba pero ya no quería esa clase de diversión con ella, porque por culpa de eso y de las estúpidas prácticas que se le había ocurrido inventarse la ojiverde no la tomaba y seguramente jamás la tomaría en serio.
Bueno, hablar de en serio para alguien de su edad no era muy literal, pero a lo que se refería era a que Lauren jamás la miraría como a alguien con la que quisiera un noviazgo de adolescente. O por lo menos eso creía.
Siendo la media noche, la castaña ya estaba durmiendo cuando entré sueños logró escuchar el molesto sonido de su teléfono, a tientas buscó el aparato, creyó que quizá alguien de la universidad que dejó su trabajo para hacerlo de último minuto le marcaba y seguramente lo estaba haciendo para resolver su montón de dudas, eso era recurrente en la vida escolar de Camila.
Respondió a la llamada con voz perezosa y aún con los ojos cerrados hasta que la voz al otro lado de la línea la hizo despertarse por completo y sentarse sobre el colchón.
—¿Lauren? —cuestionó la mayor.
— Sí, lo siento si te desperté.
—No hay problema ¿Qué pasó?
—Estoy afuera de tu casa ¿puedes abrirme? Hace frío.
Camila lo dudo un poco, además de lo de Lucy estaba el factor Alejandro, su castigo estaba a punto de terminar y si su padre la descubría la mediomataba y luego le contaba a Sinu para que esta la terminara de matar.
—Mi papá... si nos descubre estoy muerta.
Un silencio se formó al otro lado de la línea hasta que Lauren decidió volver a hablar.
—Seguro —dijo con algo de tristeza —entonces me...
— O espera —se apresuró Camila. No podía negarse a Lauren —. Revisaré que todos estén dormidos —. Añadió saliendo de la cama.
Una pequeña sonrisa se formó en Lauren y por alguana razón estúpida se limitó a asentir, como si Camila pudiera verla, que boberia. De cualquier manera la mayor tomó el hecho de que no hubiera colgado como una respuesta afirmativa.
Salió de la habitación y vio hacia ambos lados del pasillo antes de dirigirse hacia la recamara de sus padres y pegar su oído a la puerta rogándole al señor no escuchar nada traumante.
El señor la escuchó porque sólo oyó ronquidos, y así se atrevían a decir que Dios odiaba a los gays.
—Están dormidos, en unos segundos estoy contigo —indicó la universitaria.
—De acuerdo —aceptó antes de colgar.
Tal como lo dijo Camila, en breves instantes ya se encontraban ambas escaleras arriba en busca de la habitación.
A puerta cerrada la ojiverde y la castaña se acomodaron una frente a la otra sobre el colchón.
A pesar de la oscuridad los ojos de Lauren siempre sobresalían, brillaban tan lindo, pero esta vez Camila no podía sostenerle la mirada por mucho tiempo, porque no quería que la menor notara que se sentía mal ni quería ella misma sentirse peor.
—Gracias por abrir —dijo Lauren tomando una de las mantas de su vecina para cubrirse —, me estaba helando.
— De nada, Lauren —contestó a secas —¿qué es lo que necesitas?
—Bueno ya tiene bastante tiempo que no nos vemos —indicó torciendo un poco la boca mientras se encogía de hombros.
— Bueno has estado ocupada.
—Tú has estado castigada.
— La diferencia es que yo ni tengo opción —replicó no de muy buen modo y Lauren arrugó un poco el entrecejo sin comprender del todo la manera de Camila.
— ¿A qué te refieres con que tu no tienes opción?
—Olvídalo, Lauren.
— ¿Por qué? Solo quiero que me expliques porque pareces molesta y ni siquiera sé por qué.
—Lauren, no estoy molesta —replicó pero su tono de voz decía lo contrario.
—Camila —insistió la más joven buscando estrechar la mirada de la otra.
La universitária entonces se puso de pie y dio media vuelta para evitar lo que quería lograr Lauren.
— Solo estoy estresada por la universidad ¿sí? —y su tono de voz no cambiaba.
— ¿Y te desquitas conmigo? —reclamó también incorporándose y con un volumen un poco más alto.
— Guarda silencio ¿quieres? —habló Camila girandose para volver a quedar frente a la otra —te recuerdo que mis padres están a solo unos metros y ya tengo bastantes problemas por tu culpa como para que se me acumulen más.
Lauren se congeló ante lo dicho por su vecina.
Y aunque Camila lo dijo más por la cuestión de su corazón apretado por el hecho de que estaba sintiendo celos como nunca por el hecho de que la ojiverde saliera con Lucy, Lauren lo interpretó como si la estuviera culpando por su castigo.
.
.
.
.
.
Gracias por leer ;)
.
.
.
.
.
(Si te gusta esta historia házmelo saber con tu voto y comentando cxcxcx)PD; Sé que dije domingo en la tarde pero madrugué xd
PD2; ILY
.
.
.
.
.
ESTÁS LEYENDO
Lauren quiere ser tops || Fanfic Camren
Fiksi Penggemar- ¿Por qué crees que vas a ayudarme si tu eres más pasiva que yo? - Porque sé exactamente que es lo que hace a una buena tops. Lauren sentía una especie de odio y agrado por su vecina Camila. Camila era una chica un par de años mayor que Lauren...