— Estuve pensando en lo de ayer.— la vio entrar en la sala.
— ¿Ya aclaraste tu mente? — habló sarcástica.
— Yo creo que sí. Emma, ¿Peleaste en el colegio? — alzó sus cejas mirando a la menor.
Emma solo rodó los ojos mientras se sentaba, esta mujer era necia, sorda, testaruda, todos los adjetivos que ella le pudiera otorgar. No la entendía, y eso que aparentaba usar un lenguaje sumamente normal y entendible. Emma se estaba cansando, por primera vez quería que alguien supiera su dolor, lo que le pasaba, lo que pensaba, pero, Emily no estaba esforzándose.
— Se nota mucho.— miró a su derecha como de costumbre.
— ¿Qué cosa? — la miró intrigada porque respondiera con alguna clave como la sesión anterior.
— Que tus pacientes no son de mi edad.
— Tienes razón, eres la única con 15 años.— se recostó en su silla exhausta.
Emily estaba emocionada en cierto punto, sabía que eran claves para llegar a las respuestas que necesitaba pero no las comprendía, su adolescencia fue totalmente diferente a la de Emma y aunque lo agradecía, también lo maldecía, ya que culpa de eso no podía entender las señales que la muchacha le enviaba descaradamente. Ella confiaba que necesitaba tiempo, meses, para comprender la situación de Emma.
— Emma, ¿Puedes hacerlo un poco más fácil? Por favor.— la niña la miró sorprendida, ¿Le estaba pidiendo por favor que hablara?
— Te lo hago lo más fácil que puedo, Emily.— la joven suspiró, Emma no estaba cooperando con ella.
— Te aseguro que no, no logro comprender del todo tu ideología, y créeme que me prepare para todo esto por mas de 6 años.— suspiró.
— A veces, — hizo una pausa y la miró.— solo hay que tener buen ojo y oído para entender las cosas que tenemos delante.
La alarma volvió a sonar, otra vez, la sesión se había pasado en nada.
El clima de silencio que se formo una vez que Emily apagó su alarma se rompió cuando Emma se levanto decidida a salir de la sala.
— Me gustaría que nos entendamos, Emma. Pero no estas cooperando conmigo.
— Créeme que lo hago.
La muchacha salió dejándole a Emily una gran pregunta en la punta de la lengua.
¿Qué es lo que no te deja hablarme?
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Sesiones.
Short Story¿Tener problemas a los 15 años? ¿Qué problemas pueden ser? Grandes preguntas, pero más grandes respuestas.