La Hermandad No Es Lo Único Que Nos Une

De vuelta en casa.

Se escontraba frente a frente de la puerta dónde habia pasado toda su infancia y adolescencia.

A punto de oprirmir el botón del timbre. . . Su mano temblaba y al final de todo, apretó el bendito boton. Luego de unos 2 minutos salio una chica de cabello rubio y ojos negros.

-¿Si? ¿Que necesita? -realizó un tono amable.

-Hola, estoy buscando a Kushina Uchiha. . .

-¿Kushina Uchiha? Perdoné pero ella no vive aquí.

Naruto frunció el entrecejo ¿Como era posible? ¿Se habia equivocado de casa? No, esa era su casa.

-¿PE pero como es posible? Yo soy su hijo.

-Espera, tal vez te refieres a la antigua dueña. ¿Una señora de cabello rojizo muy amable?

-Si! -Lucía desesperado

-Ella era la antigua dueña. Vivia sola aquí con dos pitbulls.

¿Sola? Como que sola?

-¿A donde se a ido?

-No lo se, pero me a dejado su numero, ¿Te interesa?

-¡Claro! -Se apresuro a darle una respuesta.

La chica sonrió divertida.

-Pasa si quieres, en un momento te lo traigo. -Lo miro sonriente mientras se corria de la puerta.

Naruto paso a su antiguo hogar y observo la remodelada decoración que ahora reinaba en la casa.

La chica volvio con un papel en la mano y se lo entregó a Naruto.
Luego de despedirse y dar las gracias, Naruto marco el número en su celular.

Afortunadamente alguien respondio del otro lado de la red telefónica. Efectivamente era la voz de su madre. Sonrió inconsciente.

~¿Mamá?

~¿Hola?

~Mamá, soy yo, Naruto! Volvi a Japón.

~¿Naruto? ¡¿De verdad eres tu?!

~Si, soy yo! ¿Podrias darme tu direccion?.

~Claro claro!

Su madre se oia muy entusiasmada y cuando le paso la direccion, Naruto no tardo en ir hacia alli quién al llegar pudo ver a su madre afuera con una sonrisa de oreja a oreja.

Luego del emotivo encuentro, Naruto pregunto si Sasuke estaba allí, a lo que Kushina respondió en un tono de total preocupación y tristeza que Sasuke estaba en el hospital.

Al ver el rostro de Naruto, rio a carcajadas demostrando que era mentira. Después le dijo que Sasuke estaba en Miami y que vendría en unos días.

Naruto queria matarse. ¡EL ESTABA EN MIAMI! ¡ESTUVIERON EN LA MISMA CUIDAD!

Los dias posteriores se la pasaron hablando y chismoseando de todo. Pero hubo algo raro que el rubio no pudo evitar darse cuenta. Fugaku no estaba.

Al preguntar, Kushina realizo una mueca de asco. Le contó que, Fugaku le estaba siendo infiel y que al final de todo, se fue con otra mujer.

Fue lo mejor para ella.

Finalmente, llegó el dia en el cuál las dos almas gemelas se reunirían nuevamente.

Sasuke llamo a Kushina avisando que ya habia bajado del avión y se encontraba camino a casa.

Por lo general, Naruto estaba entusiasmado y nervioso. Sus palmas sudaban, su corazón latía fuertemente y en su estómago podia sentir las tan tediosas mariposas que una vez había sentido.

Caminaba de un lado hacia el otro, hasta que la puerta se abrio. El, quien estaba en la otra habitación no fue visto por Sasuke.

-¡Llegue! -se escuchó la voz de Sasuke.

Naruto tuvo una sensación bastante placentera la cuál le hizo enternecer.

-¡Sasuke! ¡Bienvenido! ¿Como te fue? ¿Lograste que firmarán en contrato? -Chillo Kushina.

-Fue dificil, pero lo conseguí. -Se notaba alegré.

El ojiazul permanecía tieso en la otra habitación.

-¡FELICIDADES! -río Kushina junto a Sasuke- . Como recompensa, alguien te espera en el comedor.

El silencio se apoderó de la casa por algunos segundos. Luego unos pasos hacia dónde Naruto estaba hicieron eco en toda la habitación.

Las piernas del ru io se convirtieron en fideos al ver a Sasuke pasar por la puerta.

-Naruto... -murmuró dudoso.

-Sas Sasuke... -Le costaba el hablar-. Yo, perdoname...

-Después de todo, vuelves. -Sonrió.

Sasuke comenzo a caminar hacia su hermano mientras este se quedaba tieso.

Al momento en que ambos estaban cara a cara, Sasuke acaricio la mejilla de Naruto mientras sus ojos se empañaban de lágrimas.

El rubio, no tardo en que sus lagrimas cayeran. Sentía su corazón ir cada vez más rápido, sus palmas subaban y sus piernas tiritaban.

Un "Splaf" pudo sentirse en toda la casa, Sasuke había cacheteado a Naruto dandole vuelta la cara, pero antes de que pudiera reaccionar, lo abrazó con todas sus fuerzas.

-¡¿Esto es real? ¿No lo estoy soñando?¡ -rió mientras sus lagrimas caían al separarse del rubio .

-¿Tu que crees? -frotaba su cachete dónde quedo la mano de Sasuke-. ¿Por que hiciste eso?

-¿Prentendias volver y que no te golpeara? -Rio mientras secaba sus lagrimas con sus dedos-. Estoy muy feliz. Sabia que volverías ¿por que te fuiste?

-Uff, necesita alejarme y la mejor manera de acerlo fue ,yendome.

-Como una rata. -Elevo las cejas-. Te fuiste, aun cuándo teniamos una promesa.

El ambiente se volvio tensó.

-Yo...

-Prometiste no irte y yo como un gran idiota te crei. Defraudaste mi confianza y no creo que la recuperes. Tienes idea de lo preocupado que estaba? O las noches que pase en vela esperando por ti, o pensando que te habia sucedido algo. . .

-¡Yo, lo siento! -fue lo unico que salio de la boca del rubio-. Pero, ya estoy de vuelta, se que hice mal pero, podemos empezar de nuevo. -elevo la cabeza hacia Sasuke para besarle, pero Sasuke lo detuvo poniendo una mano en su pecho.

-Naruto, nada se arregla con un simple "lo siento" no quiero volver a enamorarme de ti y que te vayas de nuevo sin decir nada.

-¿Acaso ya no estas enamorado de mi? -Se podia ver el dolor tras esa respuesta la cual Naruto no queria escuchar-. No volvere a irme, lo prometo.

-No, lo siento. Por más que prometas...ya no confio. Ahora solo te veo como un hermano, como lo que siempre fuiste.

Pronto el rubio cayo en un llanto más desesperado que el anterior. Todo lo que queria, era el amor de Sasuke y lo dejo ir como un profesional.

-¿Acaso... hay otra persona? -murmuro entre sollozos.

-Por ahora, no la hay. Yo te dije Naruto, quedate... Pero tu... Tu decidiste solo. Ahora paga los platos rotos. Te amo y esperaba tu regreso con muchan ansias, pero esto es todo.

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Penúltimo capítulo