Cap XXXIII Vuelve

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Cada día era más difícil para mí, ya quería ver a Julie como era antes, quería que ya llegará el momento de su recuperación, es que ya habían pasado dos meses y aún estaba ahí como un Vegetal, cada día iba a visitarla, no falté ningún día pero ahora que inician nuevamente las clases no sé si pueda estar siempre allá con ella, por más que quisiera todo se iba complicando un poco, me desperté temprano ya que sería el último día que podría quedarme con ella, además quería decirle muchas cosas, he estado investigando acerca de los comas y he leído un artículo donde dice que es bueno hablarle a la persona que está en coma o leerle algo que siempre le hubiera gustado ya que podría ayudar a que saliera más rápidamente de ese estado, por mi mente pasaban muchos temas pero no lograba saber cuál era el indicado justo para este momento [...]

Pronto llegue a la clínica, salude a la señora Martha quien me esperaba para regresar a su casa, hasta el momento no había ninguna novedad todo seguía igual y ella seguía estable. Entré a la habitación y saludé a Julie así como todos los días, pero nunca me atrevía a tratarla diferente, solo la llamaba por su nombre.

- Hola Julie, que tal estas hoy? Yo estoy ben aunque un poco preocupada ya que no podre venir a visitarte durante todo el día como lo he venido haciendo ya que empezaran las clases de nuevo, créeme que quisiera que estuvieras bien, mi Julie, quiero que vayamos juntas al colegio mañana, se que nada será igual sin tí.
Empezaba a ponerme muy triste y estaba apunto de llorar pero no quería llorar delante de ella, no quería que supiera que estaba triste, después de la hora del almuerzo recordé que había llevado un libro para leer, esto lo hacía todos los días pero hoy lo haría diferente porque hoy no leería para mí, hoy leería para ella.
Cuando conocí a Julie no me gustaba leer, lo encontraba aburrido o pensaba que era para tontos, pensaba que solo los chicos listos e intelectuales podían leer, pero ella cambió todo ese pensamiento absurdo en mí, ahora amaba leer, todos los días tenía una o dos horas del día sólo destinadas para la lectura. Hoy empezaría un nuevo libro "el gato que venía del cielo" lo había buscado exactamente para ella

Enamorada de una chicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora