Capítulo V

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Un día para noche buena.

Los preparativos para la cena iban de maravilla, la decoración desde hace semanas está, el ambiente navideño se siente y el frío de la noche lo dice a gritos, esta es mi época favorita del año, sin dudas lo es, mi familia debe llegar a la noche, mamá hará una cena para recibir a mis tíos, primos y abuelos, todos preferían pasar navidad en nuestra casa, ¿Y cómo no? Si nuestra casa era sumamente grande, obviamente en total somos 7.

Nick, mi hermano había entrado a mi habitación a hablar un rato conmigo.

—Nathaly, la verdad es que no sé que regalarle a mamá para mañana—Dijo sentándose en un mueble individual a un costado de mi cama.
—Creeme que para mi fue difícil encontrar su regalo.
—¿No puedes colocar algo como "Para: Mamá. De: Nick y Nathaly"—Haciendo ilustración con sus manos, empecé a reír.
—¡No!, ¿Por qué colocaría tu nombre primero?—Le miré con gracia.
—¿Por lo menos dime que le compraste?—Dude varios segundos entre decirle o no.
—Nada importante, solo fue un juego de collar con pendientes.
—¡Joyas!—Exclamó.
—¿No quieres decir "Rayos" o "Demonios"?.
—¡Joyas!—Exclamó por segunda vez—No, ¿Cómo no lo pensé?, que tonto, que tonto, que tonto.

Y así el niño salio de mi habitación repitiéndose el mismo lo tonto que era.

Luego salí yo a buscar a la pequeña de la casa, Nessa, la cual estaba haciendo galletas con mi madre y con mi hermana Nubia, que es la mayor de todas, la que está entre ella y yo, se llama Nohelia, mis padres fueron muy creativos con nuestros nombres, todos por "N" y con vocales, es gracioso, pero prefiero esto a que nombres compuestos, en fin, mi madre y hermana reían y no sé porqué.

—¿De qué se ríen?, yo también me quiero reir—Dije.
—Oh hija de nada—Tratando de tomar seriedad.
—Lo que pasa es que te quedas mirando a la nada—Dijo Nessa.
—¡Shhhhhh!—Le dijo Nubia.
—Perdon—Respondió Nessa y agacho la mirada
—Ay Nessa, no te pongas así pequeña, no fue nada —Le dije yo para calmarla.
En el mesón había una cesta con muchas galletas de la cual tomé una y empecé a comerla.
—Estan buenas—Dije con la boca llena.
—Nathaly no seas asquerosa—Me dijo mi hermana.
Tragué.
—Ok ok, ¿Algo en lo que pueda ayudarte mamá?—Opiné.
—Si, prepara la mesa, ya sabes cómo.

Y si, ya sabia como, casi siempre era yo quien colocaba la mesa para recibir a nuestra familia, así que ya sé que debo hacer, fui por los manteles, servilletas, cubiertos, vasos y platos, empecé estirando los manteles, acomode silla por silla, coloque a mano derecha una servilleta doblada y encima un juego de cubiertos de cuchillo, cuchara y tenedor, 3 pares para cada servilleta o mejor dicho para cada puesto, en frente un vaso boca abajo, y por supuesto donde iría el plato.

Nohelia, acaba de aparecer la cual me saludo de mano y entro de volada a la cocina, se escuchó un grito de asombro de parte de mi mamá, fui a ver con algo de apuro.

—¿Qué ocurre?—Dije exaltada.
—Nada, que nuestra familia está en el supermercado comprando algunas cosas y vendrán para acá —Dijo Nohelia.
—¿Ese es tu drama mamá?—Dije yo.
—Tiene que estar todo listo, ¿¡Donde está tu padre!?—Grito mamá.
—Ya lo busco—Nessa de un brinco bajó del taburete y corriendo salió de la cocina, luego salí yo.

Terminé de acomodar, y recogí unas cosas regadas por el comedor. Fui a ducharme y vestirme rápido, creo que era la única que aun no se arreglaba.

Mi madre estaba agitada, alegre como siempre, ya había puesto su musica de fondo, típica canción navideña, esperando en la puerta el sonido del timbre para gritar de entusiasmo y abrir la puerta abrazandolos a todos.

No pasaron más de 5 minutos cuando llegaron, empezaba lo que me gustaba y lo que no. Saludar.

La cena transcurrió tranquila, se recogieron las platos sucios, se lavaron, se limpió la mesa, y como si fuera un botón de hotel junto con Nick y Nohelia estábamos guardando maletas y bolsos en algunos cuartos, mi papá estaba en la sala con algunas bebidas y brindando con los demás, nuestro deber, asignar cuartos cuando se vayan a dormir, una de las cosas que más amo son las casa grandes. Cada uno tenia su habitación, sin meter las 2 restantes y la de servicio, es una casa de 3 pisos, papá es gerente de una empresa transnacional y hace años compró esta casa, sin embargo somos muchos, Nessa y Nick dormirían en mi cuarto, y Nohelia junto a Nubia.

Mis abuelos, por parte de papá, dormirían en el cuarto de Nohelia con 2 de mis 9 primos, mis abuelos por parte de mamá con 2 primos más en el cuarto de Nick. En el cuarto de Nessa dormiría el Hermano menor de mi papá con su esposa y su hija. En una de las habitaciones disponibles, dormirían mis 2 tías hermanas de mi mamá con 2 primas mías,  y en las 2 ultimas habitaciones la hermana de mi papá con su esposo y sus 2 hijos, y el hermano de mi mamá con su novia.

Esto es confuso, y aun falta gente, pero muchos de ellos pasan navidad por otros lares, ellos, al parecer la pasaran aquí siempre, ok no, siempre no, pero verán unas cuantas veces mas, tanta gente en casa,a veces siento que invaden mi privacidad, pero esto será solo unas semanas.. Se preguntaran por qué una casa tan grande, la razón es simple, una de las habitaciones de más es cuando mamá discute con papá, y ésta lo manda fuera del cuarto es para no dormir en el sofá, duerme en un cuarto a gusto y acto para él, la habitación de servicio para la señora que limpia a la cual se le ha dado sus días libres hasta el año entrante, y la otra, solo es como una sala de juegos a la cual le tiran colchones y es todo, del resto, como 5 baños, sala, comedor, y salas de estar, una enorme cocina, y un patio gigantesco, la cena de navidad será mañana en el patio, mi madre tiene un hermoso jardín en frente y atrás de la casa, piedras, plantas, estanques, adornos, luces, muchas luces.

Antes de ir a dormir todos estaba en la sala, sentados en la alfombra y en los sofás, hablando de lo que se ha hecho en el año, de los chismes recientes, y demás cosas, era agradable este ambiente, sin duda, una gran familia, jamás los cambiaría por nada del mundo.

Nessa ya mostraba sueño por medio de bostezos, a la cual lleve al cuarto y acosté en la cama, ella empezó a hablar conmigo.

—Nathaly,¿No te parece que somos una familia grandisima?—Dijo ella.
—Lo sé pequeña, somos una familia grande y unida.
—¿Les tienes regalos a todos?.
—No, o bueno, ya el regalo de por sí será comida y posible compras que haga mamá con ellos—Reimos.
—¿Y tú ya tienes mi regalo?—Preguntó curiosa.
—Si, y ya debes irte a dormir si no, para pasado mañana Santa no te traerá nada.
Abrió los ojos tan grandes que no puede aguantar la risa,a lo que ella empezó a reír también, asintió y se acomodo en la cama.
—Buenas noches hermana, te quiero mucho.
—Yo más hermanita.

Le di un beso en la frente y salí a ver que hacían los demás, sería una larga noche, habrá mucho que contar y que hablar.

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Disculpen si no actualice ayer, pero aquí está, un capitulo el cual espero hayan disfrutado.

Liciibg.

Imposible olvidarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora