11. Aléjate de mi novio

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El paseo al que se refería Inzhu, no otra cosa, sino la de ir de compras por las tiendas del gran centro comercial de la ciudad.

La kazaja, arrastraba del brazo a su novio para todos lados.

Sin embargo, y contrario a lo que pudiera pensarse, él estaba de lo más feliz.

A Otabek y Yuuri, además de parecerle súper tierno, trataban de contener la risa.

Y cuando aquello les era muy difícil, el ruso los miraba con cara de asesino y les hacía un gesto grosero, mostrándole el dedo del medio.

Gesto que por supuesto,  era reprendido tiernamente por su novia, bastando con un simple:

Gatito...

Seguido de una mirada inquisitiva.

Y el ruso, además de sonrojarse, obedecía con un:

Sí, bebé.

Los novios, apretaban aún más sus manos entrelazadas.

Y Yuri, los maldecía internamente.

Jodidos raros!!!

Pasaron por fuera de una tienda de mascotas, y Yuri, cual chiquilín, les pidió entrar

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Pasaron por fuera de una tienda de mascotas, y Yuri, cual chiquilín, les pidió entrar.

Y como se iban a negar,  si ya estaba con su cara de gato con botas, la que siempre lograba lo que quería.

Ya en la tienda, literalmente lo perdieron.

Se dedicó a acariciar a cada gatito que había, su primo en tanto, le tomaba fotos con los mininos, haciendo distintos gestos y acciones.

Las encargadas de tiendas, dos muchachas bastantes bonitas, estaban encantadísimas con ellos.

Y les prestaban toda su atención, al punto incluso de integrarse frescamente en las fotos.

Los piropos iban y venían.

Son tan guapos...

Se nota que son extranjeros...

Vengan más seguido...

Y anquen ellos estaban más concentrados en lo suyo..

El coqueteo  descarado, no les hacía ni una pisca de gracia  a los primos Altin, que con una expresión de pocos amigos, el ceño fruncido y brazos cruzados, miraban desde la puerta.

-Inzhu.

-Otabek.

-Hagámoslo –se dijeron al mismo tiempo.

Asintieron.

-Gatito, amor mío –hablándole con dulzura, y besando su mejilla –Tenemos que irnos.

La chica que le había estado coqueteando, miró con clara envidia a la kazaja, más aun cuando el bonito rubio la besó tiernamente en los labios.

-Mi amor, ¿Vamos? –la voz varonil, sumado al gesto posesivo que hizo Otabek, cuando pasó su brazo derecho por la cintura de su novio. No pasó desapercibido por las muchachas.

-¿Son novios? –preguntaron  ellas, al unísono y con voz sorprendida.

-Así es –contestó firme el moreno, entrelazando su mano con la de Yuuri.

-Lo somos –aportó orgulloso el nipón, aun estando bien coloradito.

Lo siguiente que sucedió fue bastante inesperado.

Las dos chicas, se miraron y comenzaron a chillar.

Apenas entendible era lo que decían.

-AAJSSJDDJDJDJJDJDJDKDKD!!!

Fujoshis tenían que ser, y ahora era Inzhu la que se unió al momento bastante particular,

Demás está decir lo feliz que  se sentía de conocer en su natal tierra, a chicas tan fujoshis como ella.

Tanto así que incluso, les  perdono el coqueteo a su gatito…

Continuará....

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PigBear (Otayuuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora