[CAPÍTULO SIN EDITAR]El capítulo se encuentra sin editar, me disculpo por cualquier error ortográfico, al terminar esta novela se encontrará editando y arreglando esos errores, si no es mucha molestia me ayudarías demasiado marcar donde están los errores. ❤
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V.R ♐🌹
CAPÍTULO VEINTE
Maldita sea, llegó azotando la puerta nadie está, todo está completamente vacío, no escucho alguna voz nada.
Camino hacia mi habitación, encontrando a Artemis dormido al lado de Mauricio, suelto un suspiro, alguien de los ángeles tuvieron que haber dado el aviso que me encontraba en Londres.
Camino a el baño quitando cualquier rastro de maquillaje, y poniendo una pijama cómoda para dormir.[...]
Los rayos de el sol, chocan con mi rostro abro los ojos poco a poco acostumbrándome a la luz, me levanto pesadamente observando que aún están en un profundo sueño Mauricio y Artemis, soltando un bostezo me dirijo a el baño a tomar una ducha.
Relajada por completo, salgo de la ducha, secando mi cuerpo escucho como Artemis llora, dando la señal que acaba de despertar, suelto un suspiro poniendo una bata salgo de el baño, encontrando a Mauricio somnoliento con el cabello alborotado, tratando de calmar los lloriqueos, suspira al verme salir.
- Pensé que aún no regresabas - me observa con alivio, levanto una de mis cejas, ahora una pequeña punzada hace que no confíe de nunca manera en el, pero ¿como hacer eso? Se supone que estoy enamorada de él, se supone que debo de confiar en el ¿no?.
- Claro, llegue tarde anoche - hablo con desinterés tomando a el saco de carne entre mis brazos calmando, sus lágrimas, el me observa como si tratase de descubrir algo - ¿Pasa algo? - pregunto sin mirarlo.
No dice nada, simplemente sale de la habitación sin decir absolutamente nada, Artemis me mira con esos ojos verdosos y brillantes, sonrió con dulzura acariciando su regordeta mejilla rosada, entonces vuelve a llorar dando señal que tiene hambre camino a una parte de la habitación encontrando la leche y el aparato que la calienta. Tomando el biberón, lo pruebo poniendo unas gotas en mi mano, revisando que este a una temperatura adecuada, para después dárselo el cual acepta sin problemas.
- Eso es, come con calma pequeño - susurro observando como, toma su biberón, sonrió al ver que el no aparta la vista de mi en ningún momento, sus pequeñas manos sostienen el biberón, en minutos dejando el biberón de lado le doy unas palmadas en su espalda para que eructe, lo cual sucede en unos minutos.
Amanda toca la puerta, es hora de que se lleve Artemis para poder hacer mi trabajo.
- Dale un poco de comida sólida, apenas a tomado su biberón - ella asiente tomando a el niño en brazos saliendo de el cuarto, no espero y empiezo a buscar unos pantalones y una blusa, encontrando unos ajustados y una blusa de tirantes color rojo, las tomó enseguida al igual que un conjunto de ropa interior.
Me cambió rápidamente, tomando mi cabello en una coleta alta, suelto un suspiro y salgo de mi habitación para entrenar a mi despacho.
Las horas pasan, mi cabeza está apunto de explotar, termino el último mapa por donde pasarán la mercancía de la semana, empiezo a leer algunos papeles que mi padre me dejó, la puerta se abre, no le tomo importancia y sigo leyendo, es entonces donde una rosa negra, decorada con otras pequeñas flores, junto con una caja de terciopelo del mismo color de la rosa, simplemente que este se encuentra en vuelto con un delgado listón rojo, levanto una de mis cejas y observo a Mauricio quien me observa serio, con los brazos cruzados.
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LA ÚLTIMA GREEN. (EN EDICIÓN)
Action- Recuerda que sangre corre por tus venas - dice en un susurro mientras su agarre se desvanece y sus pupilas se dilatan, hasta que sus ojos se quedan estáticos y su respiración se detiene. - ¡NO! ¡NO ME DEJES MALDITA SEA! ¡NO ME DEJES! - Grito con...