ATENCIÓN :
Este capítulo tiene,escenas sexuales. (Lenguaje explícito) si no te agradan este tipo de capítulos, te recomiendo pasar al siguiente.
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Narra Catherine:
- ¿Que hace por acá la señorita Green? ¿Acaso la locura ya te consumió? - pregunta en un susurro cerca de de mi oído, mandando corrientes eléctricas a todo mi cuerpo, un gruñido sale de mi garganta haciendo que ría de la manera más sínica que pude escuchar.
- La pregunta te la tengo que hacer yo James, acaso ¿No tienes a una cría que cuidar? - especuló mordiendo una fresa de la manera más brusca, observando sus verdosos ojos.
- Mi sirvienta se encargo de cuidarlo hoy, quería relajarme - dice encogiéndose de hombros sin interés alguno.
- Aún así no me interesa, si me permites - levanto mi baso ya vacío nuevamente, pidiendo al chico que lo llene de nuevo.
- Esperaré a que te embriagues y sacar provecho - dice con burla pidiendo un trago, observándolo con aquella sonrisa egocéntrica.
- Largo James, hay demasiados lugares aquí, así que largo de mi vista - especuló seriamente, dando a conocer mi enojo su risa se hace presente, poniendo mis nervios de punta - Un lugar libre cariño, hago lo que quiero - dice posando sus manos alrededor de mi cintura, un cálido aliento se posa en mi cuello, soltando el aire de mis pulmones aprieto con fuerza el vaso esperando a que este se rompa.
«Déjate llevar» «Demuestra quien manda «Hazlo tuyo» las risas y las voces en mi cabeza regresan, mis venas palpitan al igual que mi zona baja, en el estomago se me forma un nudo y una sonrisa lobuna aparece en mi rostro.
- ¿Que quieres exactamente Stephen? - pregunto con voz suave y dulce, tomándolo por sorpresa, el sonríe y bebe de un jalón su trago - Solo una noche - susurra cerca de mis labios, sonriendo tomó su rostro en mis manos tocando con delicadeza cada uno de sus rasgos bien marcados - Solo una noche es lo que te pido Green - dice en un suspiro cerca de mi oído, besando con delicadeza el lóbulo de mi oreja, tomando la iniciativa tomo con fuerza su cabeza y juntando sus labios con los míos en un feroz beso, duro y completamente demandante.
- Solo una noche, solo una... - susurro antes de separar mis labios de los suyos por completo, dejando un puñado de dinero sin importar cuanto fue, tomando con fuerza sus mano y llevándolo a la salida - Iremos en mi coche - dice con voz ronca, una sonrisa lobuna aparece en mi rostro - De acuerdo - es lo único que digo, observando mi motocicleta que esta aparcada la ignoro, ya vendré por ella más tarde o mañana.
Adentro de el carro, el olor a su colonia inunda mi olfato provocando pequeños espasmos de placer, observando como adentra la llave al auto sonrió con malicia, mis manos se dirigen a su entrepierna notando como el motor aún no se enciende - Que haces - su voz sale en un ronco sonido, sin mover ni un musculo - Jamás lo he hecho nunca en un auto - susurro con malicia, apretando con suavidad su miembro, el cual genuinamente ya hace erecto.
Un gruñido brutal sale de su garganta, su mano toma la mía con suavidad su mirada verdosa conecta con la mía, dejando ver el deseo de ambas partes con salvajismo jala mi cuerpo asta que este encima de él suyo, sus labios toman con fiereza los míos, mordidas entre ambos, mis manos ya hacen en su nuca profundizando aun más aquel desenfrenado beso, mis caderas se mueven en círculos en el miembro completamente duro de Stephen - Maldición - dice apretando con fuerza mi cintura, sacando un gemido de mi parte muevo con más rapidez mis caderas, sintiendo como mi ropa interior se empieza a mojar de una manera impresionante.
Con desesperación busco el botón de sus pantalones bajando rápidamente este lo suficientemente para dejar su miembro libre, mis manos toman posesión de tan delicioso miembro erecto, masturbado con suavidad mordiendo mis labios observando como poco a poco lo llevo a la locura con tan solo mis manos - Basta - dice en un gruñido, poniendo su mano llena de tinta sobre la mía impidiendo a que siga mi trabajo, el no pierde el tiempo arrancando mi chaqueta lanzando esta a la parte trasera, adentro sus manos a mi blusa tomando con fiereza mis senos, moldeando cada uno en un deseable masaje, llenando más de placer mi cuerpo - Más... ¡Diablos! ¡Más! - digo entre gemidos, sintiendo el caliente y gran miembro en mi abdomen -Eres fabulosa - dice en un susurro, dejando caer de golpe su aliento tibio en mi cuello, chupando y lamiendo este.
Rompiendo con brutalidad el botón de mi pantalón, quita este de la manera más desesperante, sus dedos tocan mi intimidad sacando un brutal gemido de mi garganta, adentrando los dos de golpe hace que mis uñas se encajen con fuerza por encima de su camisa - Eso es Catherine, mojate para mi, se mía - dice entre gemidos los vidrios ya hacen empañados.
- Ya no puedo estar así - dice en un gruñido, rompiendo por completo mi ropa interior, lastimando un poco suelto un gruñido - Era mi favorita - digo mordiendo mis labios al sentir como su gran miembro entra lentamente a toda mi cavidad - Te comprare otra - dice gimiendo, y moviendo sus caderas mis manos se recargan en aquel cristal empañado, dando pequeños pero bruscos brincos en su miembro, sintiendo como llega asta la profundidad de mi cuerpo llenándome por completo.
- Infiernos - decimos ambos, apunto de llegar a tan deseado mareo sexual, tres embestidas consecutivos fueron suficientes para llegar al clímax - Eres hermosa Catherine Green - dice en un susurro, dejando un último y casto beso en mis labios.
- Aún no termina cariño - sonrió, devolviendo el beso con más calma y delicadeza.
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Espero lo hayan disfrutado
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LA ÚLTIMA GREEN. (EN EDICIÓN)
Akcja- Recuerda que sangre corre por tus venas - dice en un susurro mientras su agarre se desvanece y sus pupilas se dilatan, hasta que sus ojos se quedan estáticos y su respiración se detiene. - ¡NO! ¡NO ME DEJES MALDITA SEA! ¡NO ME DEJES! - Grito con...
