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"¡Me rindo! A decir verdad, desconozco el motivo de tu ausencia, sólo espero que regreses pronto o sino yo mismo iré a tu casa y te sacaré de ahí a patadas.

J—"

Contrario a como reaccioné con las notas anteriores, ésta me hizo estallar en carcajadas. Llevábamos alrededor de quince minutos esperando el transporte público y la fila ya era algo larga, formada principalmente por alumnos del instituto que ya estaban desesperados por llegar a sus hogares o a otros sitios.

— Es mi imaginación o alguien ha estado muy feliz desde que terminamos el examen de la profesora HyuNa. Por cierto, ¿cómo te fue en el examen? la voz de JungHwa hizo que apartara la vista del pedazo de papel que sostenía entre mis manos.

— Digamos que aún tengo dos parciales para recuperarme en su materia —respondí mostrando una sonrisa inocente.

— Nunca vas a cambiar —se burló—. Deja de perder el tiempo con lo que sea que estés leyendo, sino también saldrás mal en otras materias.

Abrí mi boca, lista para responderle al pelinegro. Claro que no contaba con que cierta castaña se me adelantaría y diría algo que tendría que explicar. El tema del autor misterioso y las notas.

— Por fin tiene un admirador secreto y tú quieres que se concentre de lleno en la escuela. ¡Déjala divertirse!

En cuanto HanNa terminó de hablar noté como Jung alzaba una ceja. Eso significaba una sola cosa: explicaciones. Cuando él no entiende algo siempre levanta una ceja para indicar que debemos explicarle con lujo de detalle. Claro que ninguna de las dos hablaba, en cambio, solo nos observábamos a los ojos. HanNa queriendo convencerme para que le contará todo a nuestro amigo y yo intentando negarme.

— ¿Y bien? Estoy esperando, ¿alguna de las dos va a explicarme o no?

— Yang te explicará con mucho gusto.

Y como siempre HanNa me traicionaba para librarse de los problemas. Con esos amigos para qué quiere una enemigos. So no perdió el tiempo y volteó a verme con los brazos cruzados.

— Te escucho.

Me resigne a contarle todo, dándole a Han una mirada de enojo fingido antes de hablar.

— Hace varios días comencé a recibir unas notas de alguien que firma con la letra J. Hemos estado pensando quién podría ser el autor, pero la verdad no estamos seguras de nada y menos en la posibilidad de que JungKook sea el que las envía.

Hice énfasis en esa última frase. Tenía que dejarle en claro a cierta castaña que estaba equivocada al pensar que Jeon era el autor, para él es más importante pensar en alguna forma de reconquistar a JiSoo en vez de estar escribiéndole notas a una chica que apenas y conoce. Eso suena lógico para mí.

JungHwa me seguía observando con una ceja alzada, claro que ahora nos mostraba una sonrisa burlona. ¿Acaso se estaba burlando?

— ¿Sólo era eso? ¿Es lo que no me querías contar? —era obvio que esa pregunta estaba dirigida a mí así que simplemente alcé los hombros y no lo hice para restarle importancia, fue sólo un acto reflejo.

Él negó un par de veces con la cabeza sin borrar la sonrisa de sus labios. Ya no pude decir nada más porque el bus llegó en cuestión de segundos, los alumnos que estaban al principio de la fila comenzaron a subir. Sentí algo de pena por las personas que tendrían que esperar el siguiente bus, en poco tiempo yo estaría en casa y algunos de ellos tal vez seguirían esperando el transporte.

— Supongo que pensé que no era importante para ustedes —respondí cuando ambos estuvimos sentados, uno al lado del otro. HanNa estaba atrás, hablando sobre maquillaje con una chica que sólo ella conocía.

No soy ella  |J. Jungkook|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora