Lo Que Realmente Paso.

605 56 6
                                    

Hace un año...

POV. Anna.

- Creo que no es bueno que salgamos.- dijo Alec, que estaba sentado en la cama.

- Hay, vamos. Es solo una fiesta. - dije, acomodandome el cabello. - Aparte. Magnus llega en tres días. -

- Bien, pero no beberé ni una gota de alcohol.- dijo levantándose.

- Claro! Ya veremos!- dijo en tono sarcástico.

Cuando llegamos, el lugar estaba repleto de gente, pero cualquier persona, solo aquellos que vestían de marca y olían a perfume caro.

— Vamos, bebé solo un trago. Bueno, tres, para que te aflojes.— dijo.

Me sentía extraño, y no estaría mal, consumir un poco de medicina.

Gire, por que quería irme. Este no era un lugar para mi.

Choque, virtiendo su trago en su camisa cara.

— Lo siento!— dije.

— Alexander Lightwood?— escuche salir mi nombre, de una voz, agridulce, con malicia pero seductora.

Mire hacia arriba, el hombre era mas alto que yo. Con ojos negros y cabello rubio, plateado.

— Jonathan Morgernstern?— salio su nombre de mi boca, con confucion.

Su sonrisa resplandeció, siendo una luz brillante.

Se había vuelto mas musculoso, y mas apuesto, con sus facciones, mas perfeccionadas.

Escuche toser a Anna.

— Ella es Anna Herondale!— dije, Anna, sacaba su sonrisa encantadora, como cuando coqueteaba.

— Te pareces tanto a Celine! — Jonathan dijo. — Tienes el atractivo de los Herondales!— se sonrieron. — Desean un trago?— pregunto Jonathan.

Asenti con la cabeza. — Si, pero primero, Alec tiene que acompañarme a hacer algo.— dijo Anna, jalandome del brazo.
Mientras Anna me arrastraba, entre la gente, yo mire hacia Jonathan, sonriendole.

— Que demonios te pasa?— dijo Anna.

— De que hablas!?—

— Estas coqueteando con ese tipo!—

La mire molesto.

— No eres el centro de atención Anna, estas acostumbrada a que los hombres te persigan. Bien, pues el no es como los otros hombres.— comencé a irme.

Llegue con Jonathan. Había dos martinis al lado de el. Tome ambos rápido.

Jonathan me miro y sonrió, su estúpida sonrisa seductora.

Y yo no paraba de beber. De un punto a otro, ya lo estaba besando.

Y sus labios eran amargos, no dulces, como los de Magnus.

¡¡¡Magnus!!! Mi mente me grito. Entonses mi juicio, dejo de nublarce y ya estaba en una habitación, El sin camisa y yo debajo de el.

Lo empuje y me levante.

¿Como había llegado hasta aquí?

El no hablo, ni siquiera me vio.
— Magnus!— susurré.

El escuchó, me miro y se levanto, poniéndose la camisa.

Lo vi irse, por la puerta, y entonses, todo comenzó a verse borroso, hasta quedar solo la oscuridad.

.

.

.

Perdón por tardar tanto en actualizar.

Tengo una sorpresa para ustedes para Navidad. Y por eso, eh estado muy ocupada.

Me preguntaba si querían leer una escena de Anna y Camille.

¿No les pareció extraño eso?

Nos vemos hasta la próxima actualización, que esperemos que sea pronto.

Las Canciones Del Corazón III [Malec]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora