ONE SHOTS ; SUPERNATURAL

36. Dean Winchester

"Dean Winchester"

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—¡He dicho ahora!— nos dijo el ángel, antes de tirarnos por la ventana, literal. Los tres caímos encima de... ¿un colchón?

Sacudí un poco mi cabeza, y rápidamente me puse de pie. Me llevé una gigante sorpresa al ver la cantidad de personas que estaban al frente de nosotros. Y especialmente las cámaras. ¿Acaso estamos en un programa de bromas?

— ¡Corte!— habló una voz grave, mientras todos los presentes comenzaban a aplaudir, miré a los chicos en modo de buscar ayuda.

Ellos estaban aún peor que yo. Luego, un hombre se acercó, y nalgeó a Dean. ¿Espera, qué?

― Supernatural, escena uno. "Echo". ― habló otra persona, detrás de nosotros con el tipo marcador que llevan las... películas.

—¿Donde mierdas estamos?— exclamé, Sam miraba por todos lados, mientras Dean tenía su cara infectada en confusión.

― Al parecer, no hay ángeles cerca.― habló Sam.― ¿Deberíamos matar a alguien?

Yo lo miré con el ceño fruncido.

― Al parecer no.― me limité a responder. 

 Esto parecía sin duda la casa de Bobby, pero, lucía más como el set de una película. Comenzamos a caminar, mientras productores, guionistas se cruzaban por nuestro camino.

— ¡Jane! Te he buscado por todos lados, ven, necesitamos hacerte un par de retoques a tu maquillaje.— apareció una muchacha de no más de 20 años mirándome preocupada, mientras me tironeaba a quien sabe donde.

—Hey.— la detuve.— ¿Quién es Jane?

Ella me miró, para luego comenzar a reír. Miré a los chicos, pero estaban aún más confundidos que yo.

—Tú, obvio.— dijo mientras nos dirigimos hacia unas mesas con espejos. Mire a los chicos, quienes se encontraban en la misma situación que yo.

Solo que a Sam lo habían llevado con un par de camaras, que a simple vista, parecía como si estuvieran a punto de hacerle una entrevista. Yo mientras miraba como desmaquillaban a Dean. Fue algo cómico de ver.

― Supe lo de Misha... felicitaciones.― habló la mujer mientras me quitaba un poco el maquillaje, que no tenía idea que usaba. Yo en mi mente no podía estar más confundida. ¿Quién es Misha? A juzgar a como suena, puede que sea alguna mascota o...

― Oh, gracias.― hablé algo bajo. Miré a Dean con mi ojos expectantes.

...

 La mujer ya había terminado, es por eso que con Dean nos fuimos en busca de Sam. Este lugar era enorme.

― ¿Puedes imaginar donde mierdas estamos?― dije rompiendo el silencio, Dean me miró.

― No, pero ya quiero largarme de aquí. ¡Llevaba maquillaje! Esos bastardos...― dijo con su típica voz de queja, yo reí.

― Te entiendo.

A unos metros más adelante, pudimos divisar a Sam, nos acercamos a un paso rápido.