la sensación era nueva para mi.

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nuestro beso fue largo y apasionado, con cada roce de labios y lengua, cada pequeña mordida hacía que cayera dentro de un trance, él fue de mis labios a mi cuello dejando un camino de besos y lamidas por mi mandíbula y luego mi pecho descubierto, me aferre con la yema de los dedos a su espalda, está era suave fuerte y amplia bajo mis dedos. Olía bien como un buen perfume caro. Él seguía con aquellos tiernos besos, coloco sus manos sobre mi cintura y subió mi camisa al sentir sus dedos directamente en mi piel sentí un escalofríos.

bajo nuevamente sus manos hasta el botón de mi short y lo soltó quitándomelo ágilmente (como se notaba que no era su primera vez) sujeto mi cintura con fuerza y de un jalón me subió a él, me quito la camisa y comenzó a mordisquear mi sujetador, lo soltó... una gran pena me invadió y mi rostro se calentó advirtiéndome que me había ruborizado, yo me iba a apartar, pero el me sujeto con fuerza.

-shuuu... deja, deja, deja -me murmuro y continuo mordisquean dome los pechos -tienes un hermoso cuerpo... haces que me excite ¿ves? -tomo mi mano y la paso por debajo de su pantalón y su bóxer, yo abrí los ojos como un par de platos ¡ERA ENORME!

Se quito los pantalones (ni idea de como) y roso su enorme bulto contra mi vagina, eso hizo que yo soltara un gemido y dos y tres, él continuaba besándome y sabía claramente que eso me gustaba me hacía sentir una sensación bastante placentera, trague saliva y él bajo a mi abdomen y más abajo mi vientre hasta que se topo con mi ropa interior, la sujeto ferozmente con los dientes y la bajo, yo lo ayude, no quería que eso parara. bajo hasta tener sus labios justo sobre mi clítoris y lo toco con su lengua ¡OH, DIOS! paseo su lengua por toda mi vagina lento y en ciertos puntos rápido, mis gemidos no paraban aun así yo los reprimía no olvida que desgraciadamente mis padres estaban abajo. Él se detuvo y beso mi vagina,me miro con malicia y se lamió el dedo índice y el del medio, sensualmente para luego introducirlos dentro de mí ¡PERO QUE DOLOR! Era horrible esa sensación pero él no se detuvo los introdujo dentro de mí, lo más que pudo y luego los fue metiendo y sacando repetidas veces, solté un gemido...

-Gerald, hijo estas arriba con la hija de los Scott? -grito la madre de Gerald desde la planta baja.

-MALDICIÓN! -murmuro -si madre ya bajamos!!


IDIOTAS!! (Historia terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora