IDIOTAS!! (Historia terminada)

¿Mi chica?

Entre corriendo a mi habitación y cerré la puerta con llave, me volví pegada a la puerta y solté un suspire de alivio, alce la mirada y hay estaba Juan, acabando de colocarse los zapatos, aun estaba sin camisa y yo me quede plantada admirando su amplio pecho y su trabajado abdomen, pero que chico tan horriblemente apuesto, me ruborizaba de solo verlo... Era glorioso... 

-Y...? -Me pregunto, sacándome de embobamiento -Que tal estuve? 

-Eres precioso Juan -dije sin querer cuando mi cerebro quiso detener aquella acción mi boca ya había acabado de decirlo. 

El me miro un poco sorprendido y soltó una hermosa risa -Encerio lo crees? -me pregunto con una media sonrisa. Camino hasta mi y me acorralo encerrandome entre la puerta su cuerpo y sus fuertes brazos a mis costados, no tenia escapatoria aunque de igual forma no quería escapar. Se inclinó y me beso apasionada y ferozmente. Nuestras lenguas bailaron y nuestras manos explotaron el cuerpo del otro. 

-Vaya ¿se están divirtiendo mucho? -dijo de pronto la voz de Gerald. 

Juan se separó de mi, aunque sin mucha prisa, se volvió hacia su amigo y le dedico una sonrisa. 

-Ey, Gerald. Que tal? -pregunto 

-Bien aquí viendo como intentas seducir a MI chica y ella no hace nada para evitarlo. 

-Tu chica? Acaso es tu novia. -razono Juan alzando una ceja. 

-No es mi novia. Pero es mi chica. 

-Mmmm... No entiendo eso. Si no es tu novia entonces ella puede hacer lo que le plazca y aun mas con su cuerpo. 

-Juan ella es mía. 

Gerald avanzo hasta Juan y fue entonces que note, que ambos chicos tenían casi la misma contestura y la misma estatura. Solo que en cuanto a sus facciones y formas de actuar eran muy diferentes. 

-Andy!! -griro mi hermano desde abajo. 

-Que diablos quieres, Estúpido -le devolví el grito.

-Baja que ya llegaron la tía Sol y el Tío William. Junto con nuestros primos... 

-Ya bajo. -grite de nuevo. -Ya basta ustedes dos. Yo no le pertenezco a nadie. Ahora ti si quieres te vas a tu casa y tu -señale a Juan -vamos para que te escondas y salgas por la puerta trasera. 

-Ah no. Ahora quiero conocer a tus tíos y a tus primos. Tal vez tengas una prima linda. 

-Pues si el se queda yo me quedo. No tengo pensado dejarlos solos. 

-que clase de estupideces dicen. Váyanse. -los amenace. Ambos se miraron y luego a mi, soltaron una carcajada escandalosa.

-te ves adorable, y es muy difícil tomarte encerio. 

Eso me hizo molestarme aun más. Pero me di por vencida. 

-bajemos entonces. -dije poniendo mis ojos en blanco. 

-no hagas eso -dijeron ambos al mismo tiempo. 

-Bhag.